LIBERTADOR (Agencia). Con la adquisición y puesta en funcionamiento de una nueva bomba eléctrica sumergible, de 30 HP, se logró solucionar el problema en el servicio en el suministro de
agua potable que afectó diversos sectores barriales de la localidad de
Caimancito.
Luego de intensos trabajos realizados por personal municipal y de la empresa Agua de los Andes, durante la noche del miércoles y madrugada del jueves, se logró normalizar el servicio con la puesta en funcionamiento de la nueva bomba, elemento éste que fuera gestionado por el intendente Pedro Torres ante el Ministerio de Infraestructura, Planificación y Servicios Públicos de la Provincia.
Cabe recordar que la merma de presión de agua, en algunos casos con cortes del suministro, fueron los inconvenientes que se registraron en esa localidad, desde el pasado sábado, como consecuencia de desperfectos eléctricos sufridos en una de las bombas, que se encuentran funcionando en la planta potabilizadora, como consecuencia de descargas eléctricas de las intensas precipitaciones.
Lógicamente que la reanudación del servicio llevó tranquilidad a esa comunidad ledesmense, donde por las altas temperaturas que se registran en el lugar hay un importante consumo del líquido elemento.
LIBERTADOR (Agencia). Con la adquisición y puesta en funcionamiento de una nueva bomba eléctrica sumergible, de 30 HP, se logró solucionar el problema en el servicio en el suministro de
agua potable que afectó diversos sectores barriales de la localidad de
Caimancito.
Luego de intensos trabajos realizados por personal municipal y de la empresa Agua de los Andes, durante la noche del miércoles y madrugada del jueves, se logró normalizar el servicio con la puesta en funcionamiento de la nueva bomba, elemento éste que fuera gestionado por el intendente Pedro Torres ante el Ministerio de Infraestructura, Planificación y Servicios Públicos de la Provincia.
Cabe recordar que la merma de presión de agua, en algunos casos con cortes del suministro, fueron los inconvenientes que se registraron en esa localidad, desde el pasado sábado, como consecuencia de desperfectos eléctricos sufridos en una de las bombas, que se encuentran funcionando en la planta potabilizadora, como consecuencia de descargas eléctricas de las intensas precipitaciones.
Lógicamente que la reanudación del servicio llevó tranquilidad a esa comunidad ledesmense, donde por las altas temperaturas que se registran en el lugar hay un importante consumo del líquido elemento.