PURMAMARCA (Corresponsal). Las comunidades de La Ciénaga, Patacal y Quisquiri (Cipaqui) celebraron el sábado sus fiestas patronales en honor a Nuestra Señora del Rosario participando con mucho fervor de las actividades religiosas, culturales y deportivas que se llevaron a cabo en la cálida jornada.
Los festejos se realizaron en La Ciénaga, un pequeño poblado ubicado a 10 kilómetros de Purmamarca siguiendo por la ruta nacional 52 donde cerca de las 6 de la mañana estallaron las bombas de estruendo para anunciar el día de fiesta.
Los cerros de color ocre y una pequeña capilla con un arco de flores recibieron a los feligreses que arribaron en las primeras horas de la mañana, aunque algunos vecinos de parajes más lejanos llegaron con sus santos y vírgenes en la tarde del viernes luego de una peregrinación.
Tras un delicioso chocolate que pudieron disfrutar niños y adultos, los presentes se congregaron en el predio del salón comunitario para iniciar con los actos protocolares.
Del izamiento del pabellón nacional participaron el comisionado municipal, Marcelo Aramayo; el diputado provincial Humberto López, la directora de la escuela primaria 73 "Marcelino Vargas", Susana Ortiz, y Rosalía Ríos, en representación de la comunidad de Cipaqui.
Luego de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, se trasladaron hacia el atrio de la iglesia donde el padre Mario Valdivia ofició la santa misa en presencia de la imagen de la patrona.
La procesión
Poco después de las 12 las bandas de sikuris marcaron el comienzo de la procesión con los sonidos de los bombos, redoblantes, platillos y sikus que se hicieron eco por los pequeños cerros que recorrieron.
Nuestra Señora del Rosario partió entonces acompañada de sus fieles devotos hacia el Cristo ubicado en el mirador del pueblo donde al llegar elevaron oraciones para pedir por la unión y el bienestar de las comunidades.
Antes de las 13 retornaron al templo donde dejaron las imágenes y partieron hacia el salón comunitario para compartir un riquísimo almuerzo y brindar por una de las fiestas más importantes de la feligresía del lugar. Por la tarde se llevaron a cabo encuentros deportivos que disputaron un mini campeonato de fútbol con equipos masculinos y femeninos de la zona.
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Los festejos se realizaron en La Ciénaga, un pequeño poblado ubicado a 10 kilómetros de Purmamarca siguiendo por la ruta nacional 52 donde cerca de las 6 de la mañana estallaron las bombas de estruendo para anunciar el día de fiesta.
Los cerros de color ocre y una pequeña capilla con un arco de flores recibieron a los feligreses que arribaron en las primeras horas de la mañana, aunque algunos vecinos de parajes más lejanos llegaron con sus santos y vírgenes en la tarde del viernes luego de una peregrinación.
Tras un delicioso chocolate que pudieron disfrutar niños y adultos, los presentes se congregaron en el predio del salón comunitario para iniciar con los actos protocolares.
Del izamiento del pabellón nacional participaron el comisionado municipal, Marcelo Aramayo; el diputado provincial Humberto López, la directora de la escuela primaria 73 "Marcelino Vargas", Susana Ortiz, y Rosalía Ríos, en representación de la comunidad de Cipaqui.
Luego de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, se trasladaron hacia el atrio de la iglesia donde el padre Mario Valdivia ofició la santa misa en presencia de la imagen de la patrona.
La procesión
Poco después de las 12 las bandas de sikuris marcaron el comienzo de la procesión con los sonidos de los bombos, redoblantes, platillos y sikus que se hicieron eco por los pequeños cerros que recorrieron.
Nuestra Señora del Rosario partió entonces acompañada de sus fieles devotos hacia el Cristo ubicado en el mirador del pueblo donde al llegar elevaron oraciones para pedir por la unión y el bienestar de las comunidades.
Antes de las 13 retornaron al templo donde dejaron las imágenes y partieron hacia el salón comunitario para compartir un riquísimo almuerzo y brindar por una de las fiestas más importantes de la feligresía del lugar. Por la tarde se llevaron a cabo encuentros deportivos que disputaron un mini campeonato de fútbol con equipos masculinos y femeninos de la zona.
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PURMAMARCA (Corresponsal). Las comunidades de La Ciénaga, Patacal y Quisquiri (Cipaqui) celebraron el sábado sus fiestas patronales en honor a Nuestra Señora del Rosario participando con mucho fervor de las actividades religiosas, culturales y deportivas que se llevaron a cabo en la cálida jornada.
Los festejos se realizaron en La Ciénaga, un pequeño poblado ubicado a 10 kilómetros de Purmamarca siguiendo por la ruta nacional 52 donde cerca de las 6 de la mañana estallaron las bombas de estruendo para anunciar el día de fiesta.
Los cerros de color ocre y una pequeña capilla con un arco de flores recibieron a los feligreses que arribaron en las primeras horas de la mañana, aunque algunos vecinos de parajes más lejanos llegaron con sus santos y vírgenes en la tarde del viernes luego de una peregrinación.
Tras un delicioso chocolate que pudieron disfrutar niños y adultos, los presentes se congregaron en el predio del salón comunitario para iniciar con los actos protocolares.
Del izamiento del pabellón nacional participaron el comisionado municipal, Marcelo Aramayo; el diputado provincial Humberto López, la directora de la escuela primaria 73 "Marcelino Vargas", Susana Ortiz, y Rosalía Ríos, en representación de la comunidad de Cipaqui.
Luego de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, se trasladaron hacia el atrio de la iglesia donde el padre Mario Valdivia ofició la santa misa en presencia de la imagen de la patrona.
La procesión
Poco después de las 12 las bandas de sikuris marcaron el comienzo de la procesión con los sonidos de los bombos, redoblantes, platillos y sikus que se hicieron eco por los pequeños cerros que recorrieron.
Nuestra Señora del Rosario partió entonces acompañada de sus fieles devotos hacia el Cristo ubicado en el mirador del pueblo donde al llegar elevaron oraciones para pedir por la unión y el bienestar de las comunidades.
Antes de las 13 retornaron al templo donde dejaron las imágenes y partieron hacia el salón comunitario para compartir un riquísimo almuerzo y brindar por una de las fiestas más importantes de la feligresía del lugar. Por la tarde se llevaron a cabo encuentros deportivos que disputaron un mini campeonato de fútbol con equipos masculinos y femeninos de la zona.
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Los festejos se realizaron en La Ciénaga, un pequeño poblado ubicado a 10 kilómetros de Purmamarca siguiendo por la ruta nacional 52 donde cerca de las 6 de la mañana estallaron las bombas de estruendo para anunciar el día de fiesta.
Los cerros de color ocre y una pequeña capilla con un arco de flores recibieron a los feligreses que arribaron en las primeras horas de la mañana, aunque algunos vecinos de parajes más lejanos llegaron con sus santos y vírgenes en la tarde del viernes luego de una peregrinación.
Tras un delicioso chocolate que pudieron disfrutar niños y adultos, los presentes se congregaron en el predio del salón comunitario para iniciar con los actos protocolares.
Del izamiento del pabellón nacional participaron el comisionado municipal, Marcelo Aramayo; el diputado provincial Humberto López, la directora de la escuela primaria 73 "Marcelino Vargas", Susana Ortiz, y Rosalía Ríos, en representación de la comunidad de Cipaqui.
Luego de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, se trasladaron hacia el atrio de la iglesia donde el padre Mario Valdivia ofició la santa misa en presencia de la imagen de la patrona.
La procesión
Poco después de las 12 las bandas de sikuris marcaron el comienzo de la procesión con los sonidos de los bombos, redoblantes, platillos y sikus que se hicieron eco por los pequeños cerros que recorrieron.
Nuestra Señora del Rosario partió entonces acompañada de sus fieles devotos hacia el Cristo ubicado en el mirador del pueblo donde al llegar elevaron oraciones para pedir por la unión y el bienestar de las comunidades.
Antes de las 13 retornaron al templo donde dejaron las imágenes y partieron hacia el salón comunitario para compartir un riquísimo almuerzo y brindar por una de las fiestas más importantes de la feligresía del lugar. Por la tarde se llevaron a cabo encuentros deportivos que disputaron un mini campeonato de fútbol con equipos masculinos y femeninos de la zona.
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