El dolor y la falta de justicia fueron los sentimientos que se hicieron visibles en los rostros de los familiares de personas fallecidas en siniestros viales que participaron de un acto por el Día Mundial de Recordación de las Víctimas de Accidentes de Tránsito, organizado por la Asociación Estrellas Amarillas Jujuy en el Parque San Martín.
Bajo la consigna “Para no sumar más estrellas en el cielo”, la Asociación Estrella Amarilla Jujuy impulsó el acto y una caminata para sensibilizar a la sociedad sobre las consecuencias fatales de los siniestros viales, recordando que el 26 de octubre de 2005 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 60/5 “invitó a los Estados Miembros y a la comunidad internacional a reconocer el tercer domingo de noviembre de cada año como Día Mundial en conmemoración de las víctimas de los accidentes de tráfico”.
Asistieron al acto, el secretario de Seguridad Vial, Luis Martín; el coordinador general de Emergencias de la Provincia, Alejandro Cooke; el secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad capitalina, Guillermo Marenco, entre otras autoridades, representantes de la Asociación Estrellas Amarillas, familiares y amigos de víctimas de siniestros viales, entre ellos las madres de Matías Puca y de Ian Fabrizio Gremasqui, visiblemente emocionadas.
En esa oportunidad, la Asociación Estrellas Amarillas entregó estatuillas en reconocimiento a la lucha de las familias en la búsqueda de justicia y la concientización sobre la prevención de “accidentes” viales y a los funcionarios por su colaboración en esa tarea.
Luego Mario Valdez, víctima de un accidente vial que lo dejó incapacitado para caminar, indicó que “hoy es un día muy importante y de reflexión”, y agregó que “la pérdida de un ser querido es la pérdida de todos y su sufrimiento es compartido, aunque solo sea a través del reconocimiento de la tragedia y del horror”.
“Un accidente de tránsito no sólo afecta a quien lo tuvo sino que afecta a todo un entorno, padres, hijos , hermanos, amigos y parejas, llenando de pena incredulidad, pena e impotencia”, aseguró, al mismo tiempo que instó a la comunidad a apegarse a las normas viales y de seguridad para disminuir las muertes que suceden en las calles y rutas y que, lamentablemente, no paran de ocurrir
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El dolor y la falta de justicia fueron los sentimientos que se hicieron visibles en los rostros de los familiares de personas fallecidas en siniestros viales que participaron de un acto por el Día Mundial de Recordación de las Víctimas de Accidentes de Tránsito, organizado por la Asociación Estrellas Amarillas Jujuy en el Parque San Martín.
Bajo la consigna “Para no sumar más estrellas en el cielo”, la Asociación Estrella Amarilla Jujuy impulsó el acto y una caminata para sensibilizar a la sociedad sobre las consecuencias fatales de los siniestros viales, recordando que el 26 de octubre de 2005 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 60/5 “invitó a los Estados Miembros y a la comunidad internacional a reconocer el tercer domingo de noviembre de cada año como Día Mundial en conmemoración de las víctimas de los accidentes de tráfico”.
Asistieron al acto, el secretario de Seguridad Vial, Luis Martín; el coordinador general de Emergencias de la Provincia, Alejandro Cooke; el secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad capitalina, Guillermo Marenco, entre otras autoridades, representantes de la Asociación Estrellas Amarillas, familiares y amigos de víctimas de siniestros viales, entre ellos las madres de Matías Puca y de Ian Fabrizio Gremasqui, visiblemente emocionadas.
En esa oportunidad, la Asociación Estrellas Amarillas entregó estatuillas en reconocimiento a la lucha de las familias en la búsqueda de justicia y la concientización sobre la prevención de “accidentes” viales y a los funcionarios por su colaboración en esa tarea.
Luego Mario Valdez, víctima de un accidente vial que lo dejó incapacitado para caminar, indicó que “hoy es un día muy importante y de reflexión”, y agregó que “la pérdida de un ser querido es la pérdida de todos y su sufrimiento es compartido, aunque solo sea a través del reconocimiento de la tragedia y del horror”.
“Un accidente de tránsito no sólo afecta a quien lo tuvo sino que afecta a todo un entorno, padres, hijos , hermanos, amigos y parejas, llenando de pena incredulidad, pena e impotencia”, aseguró, al mismo tiempo que instó a la comunidad a apegarse a las normas viales y de seguridad para disminuir las muertes que suceden en las calles y rutas y que, lamentablemente, no paran de ocurrir