PALMA SOLA (Corresponsal). Final feliz tuvo la búsqueda desesperada de Miguel Morales de 85 años, quien el pasado jueves abandonó su vivienda en el paraje Las Vertientes, sin poder regresar por sus propios medios.
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PALMA SOLA (Corresponsal). Final feliz tuvo la búsqueda desesperada de Miguel Morales de 85 años, quien el pasado jueves abandonó su vivienda en el paraje Las Vertientes, sin poder regresar por sus propios medios.
El anciano había quedado momentáneamente solo en su vivienda, ya que su concubina Hilda Ruiz se había dirigido a Palma Sola en busca de comestibles.
La casa de Miguel se encuentra ubicada a unos 25 kilómetros de Palma Sola sobre la ruta provincial 80 que va a La Estrella, en la provincia de Salta.
Don Miguel es un hombre sumamente querido por la comunidad donde habita, la que al enterarse de su desaparición organizó distintos equipos de búsqueda durante la jornada del día jueves, la que se prolongó hasta la madrugada del viernes.
El anciano padece de Alzheimer y artrosis y al no contar con alimentos ni bebida se temió por su vida, razón por la cual el viernes en horas de la mañana se presentó en la Seccional 36° Hilda Ruiz solicitando ayuda.
De forma inmediata se formó una comisión con personal policial para la búsqueda de Morales
También se hicieron presentes efectivos de Infantería de la Unidad Regional Dos, personal con canes y la jefa de esa unidad comisario mayor Irma Calapeña
Aproximadamente a las 19.45 del viernes la comisión de la Seccional 36°, a cargo oficial principal Flores, logró encontrarlo a unos cinco kilómetros de su domicilio en un camino interno y muy cerca de un bosque, donde se presume que habría pernoctado y buscado refugio.
Con signos de deshidratación pero consciente fue encontrado por los uniformados, con el auxilio de unos baqueanos que colaboraron con la búsqueda.
Por el estado en que se encontraba y por la edad del anciano se solicitó la ambulancia y se lo trasladó al hospital local, donde quedó internado en observación.