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Remar en dulce de leche... ¡repostero!

Lunes, 18 de diciembre de 2023 00:57

Ya sé que no es momento para hacerse el gracioso, pero valga la intención de suavizar con un toque de humor la gravísima situación económica que comenzamos a atravesar en la gestión de Javier Milei que hoy recién cumplirá 216 horas. Y que a pesar de la bronca y el dolor que generan las medidas tomadas, nadie puede decir que sean una sorpresa: se anunciaron con tiempo, se explicaron con antelación, y se votaron con conciencia de lo que sucedería. Como a conciencia, quiero creer que fue así, los argentinos aprobaron con su voto ocho años de kirchnerismo (2003/2011), cuatro de cristicamporismo (2011/2015), y otros cuatro opacados aún más por la gestión del presidente delegado Alberto Fernández. Y claro, cuatro de macrismo (2015/2019) que se colaron en el medio para arreglar el país que se venía barranca abajo y lo dejaron peor. Esto deja una enseñanza: "Vox populi, vox Dei", puede no ser una verdad indiscutible. El pueblo puede equivocarse, seducido, engañado o inducido, puede optar por caminos errados. Lo que no se podrá negar es la buena fe del sufragio: nadie jamás, pondría un voto para suicidarse.

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Ya sé que no es momento para hacerse el gracioso, pero valga la intención de suavizar con un toque de humor la gravísima situación económica que comenzamos a atravesar en la gestión de Javier Milei que hoy recién cumplirá 216 horas. Y que a pesar de la bronca y el dolor que generan las medidas tomadas, nadie puede decir que sean una sorpresa: se anunciaron con tiempo, se explicaron con antelación, y se votaron con conciencia de lo que sucedería. Como a conciencia, quiero creer que fue así, los argentinos aprobaron con su voto ocho años de kirchnerismo (2003/2011), cuatro de cristicamporismo (2011/2015), y otros cuatro opacados aún más por la gestión del presidente delegado Alberto Fernández. Y claro, cuatro de macrismo (2015/2019) que se colaron en el medio para arreglar el país que se venía barranca abajo y lo dejaron peor. Esto deja una enseñanza: "Vox populi, vox Dei", puede no ser una verdad indiscutible. El pueblo puede equivocarse, seducido, engañado o inducido, puede optar por caminos errados. Lo que no se podrá negar es la buena fe del sufragio: nadie jamás, pondría un voto para suicidarse.

Otra enseñanza será aceptar que el ejercicio ilimitado de soluciones rápidas y superficiales, para resolver problemas complejos, termina dando por tierra con el lema romántico y facilista de que detrás de cada necesidad hay un derecho. Al revés: detrás de cada derecho deberían quedar amparadas todas las necesidades que surjan en la sociedad, y su vigencia debería ser producto del consenso entre las partes en conflicto o en estado de vulnerabilidad. La enseñanza es redonda: el populismo como la mentira tiene patas cortas. Por definición, es un concepto que proclama la supremacía de la voluntad popular por sobre las instituciones y aboga por una relación directa entre el pueblo y sus líderes, y es controvertido, se conciba como ideología, estilo retórico o movimiento político. En cualquier caso, las pruebas están expuestas, el populismo enfrenta a un pueblo homogéneo, encarnado en la figura de sus líderes, con una élite que generalmente cae en manejos oscuros o corruptos.

Enseñanza o no, la última cifra de "inflación Massa" subió a 12,8% y la primera "inflación Milei" será quizás del doble. Aquella tenía todo congelado, pisado o retenido mediante precios equilibrados, pactados, justos, adecuados, etc. etc., metáforas del fracaso de los controles del Estado. Esta se presenta desatada y enloquecida. En ambos casos, la gente es la que sufre. Las naftas a precio internacional, rondando un dólar por litro (en Jujuy siempre un poquito más), los precios en disparada feroz (en Jujuy siempre un poco más); los alquileres subiendo a las nubes (en Jujuy siempre mucho más). La gente hierve en las estaciones de servicio y en los supermercados para aprovisionarse hoy con la plata que mañana le alcanzará para menos. El tema es que los que venden podrán seguir subiendo los precios, solamente mientras haya quienes puedan comprar. La teoría indica que cuando no se pueda comprar, los precios deberían estabilizarse o bajar, y los formadores de precios tendrían que adecuarse a esa realidad. Esa es la teoría.

Entre enseñanzas y teoría, las medidas del gobierno libertario profundizan el ajuste sobre los sectores más bajos, lo aumentan sobre la castigadísima clase media, y le exige al sector productivo exportador un nuevo esfuerzo, ya que en todos los casos, las mejoras del tipo de cambio se licúan con el aumento de los costos. Dicen que todo sería por el tiempo más corto posible, pero los argentinos esperan otras medidas que efectivamente, bajen los privilegios de lo que el Presidente en campaña llamaba "la casta". Los ajustes a la política, las privatizaciones anunciadas y otras promesas todavía pendientes, ayudarían a mejorar el humor social si se producen ya. Y que no se limite al recorte de fondos a las Provincias, que es lo más fácil, lo de manual, que termina arrinconando a los gobernadores entre la pared y la espada.

También hay que mirar la reacción de los sectores que se asumen en franca oposición. La izquierda con su discurso clásico, el cristicamporismo refugiado en la provincia de Buenos Aires del gobernador Axel Kicillof, bendecido por CEFK. Ya hay ejemplos: Malena Galmarini de Massa, Silvina Batakis y Gabriel Katopodis, primerísimas espadas K, entre otras, ya forman parte del elenco de Axel, que aunque sigue enfrentado con Máximo K, sigue soñando con llegar a la Casa Rosada en el 2027. Y la CGT es otra corporación que volvió a la vida: tras cuatro años hibernando y apañando con el silencio colaboracionista la gestión de Alberto Fernández, recordaron su función de defender a la clase trabajadora y reaccionaron rápidamente advirtiendo que ahora retomarán el protagonismo olvidado o subsumido bajo los negocios sectoriales o personales, de esta otra verdadera casta de la sociedad argentina.

Focalizados en Jujuy, el contador Carlos Sadir sale de la sartén para caer en las brasas. Cruza de los olvidos y la discriminación flagrante a la que la Provincia fue sometida por el kirchnerismo, cuando él era ministro de Economía y Finanzas, y entra a los ajustes durísimos y a la eliminación de aportes especiales que realizarán los libertarios. Ese será uno de los frentes donde deberá dar pelea el CS. El otro será imponer su posición en el bloque de gobernadores cambiemitas y también cuando el conjunto de los mandatarios provinciales organice presentaciones comunes ante el Gobierno nacional.

Eso pondrá a prueba la muñeca y cintura política del CS. Mientras tanto tendrá dos frentes locales: 1- Reordenar la administración según su interpretación de la realidad, achicando lo que según trasciende desde círculos oficiales, una estructura que se fue sobredimensionando con los años. Salvando el empleo público, aseguran, intentará achicar el número de funcionarios cuyas tareas en muchos casos se superponen, son innecesarias, y pueden ser absorbidas por un esquema más modesto. 2- Contener al frente sindical que si bien no abandonará su actitud dialoguista y comprensiva, reforzará la lucha por mejorar una grilla salarial que venía retrasada y que ahora quedará sumergida bajo los nuevos programas económicos. El CS eligió mantener el 90% del equipo de gobierno, lo que demuestra la confianza y la aprobación que tiene en el grupo con el que compartió años de trabajo. Sin embargo, se conocieron filtraciones que por ahora circulan discretamente por los pasillos oficiales entre despachos importantes de Casa de Gobierno: "Carlitos esperará los primeros meses para comprobar el funcionamiento y la identificación de sus colaboradores con los lineamientos que pretende imponer", confiesan.

Memorias, enseñanzas, experiencias y expectativas de fin de año nos encuentran en un punto de inflexión, como decía al comienzo de esta última columna, flotando en una balsa con rumbos abiertos por los cuatro costados, remando con dos escarbadientes, y en dulce de leche... írepostero! Valga por una sonrisa que acompañe el deseo de una muy feliz Navidad, en la que Dios renacido nos colme de bendiciones y nos lleve a comenzar el año 2024 con los sueños y las energías que siempre nos caracterizaron a los jujeños.

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