En una extensa y enfática carta que tituló Por la Argentina de la paz y la verdad, el gobernador jujeño, Gerardo Morales, volvió a arremeter contra el Gobierno y sobre todo contra el kirchnerismo por las protestas en su provincia. A los dirigentes K los tildó de “impostores” y los acusó de tener a la extrema izquierda como “mano de obra barata” para estas marchas violentas.
inicia sesión o regístrate.
En una extensa y enfática carta que tituló Por la Argentina de la paz y la verdad, el gobernador jujeño, Gerardo Morales, volvió a arremeter contra el Gobierno y sobre todo contra el kirchnerismo por las protestas en su provincia. A los dirigentes K los tildó de “impostores” y los acusó de tener a la extrema izquierda como “mano de obra barata” para estas marchas violentas.
Pero no fue solo eso. El precandidato a vicepresidente aseguró también que desde la Casa Rosada ponen como condición para entregar fondos públicos “la persecución o el hostigamiento a sus adversarios”, que enviaron agentes de inteligencia a las comunidades originarias y que alientan la desestabilización de su gobierno. Tras ello dijo que existe una “dictadura de las minorías”.
Con un clima hostil que explotó durante la reforma de la constitución y que ahora mermó, pero todavía no concluyó, Morales insistió con que estas manifestaciones se dan “con el amparo” del gobierno nacional. “Ponen como condición para esa entrega de fondos públicos el permanente apoyo a su favor, o la persecución y el hostigamiento a sus adversarios políticos (según convenga), además de perseguir y violentar a los grupos y minorías que no se suman a las acciones políticas definidas por sus cúpulas”, aseveró en la misiva el radical de Juntos por el Cambio.
Tildó además a los dirigentes oficialistas de “perversos” por no hacerse cargo de la pobreza y de la inflación. Así también dijo que buscan “estigmatizar” a los opositores como los responsables de “los males” de los argentinos. “Prueba de ello es la escena que el kirchnerismo y su mano de obra barata, la extrema izquierda, han intentado montar en la provincia de Jujuy”, indicó.
Además, Morales se quejó por los lugares donde se hacen las movilizaciones. “Peticionar a las autoridades del Frente de Todos, jamás; movilizar y hacer desmanes en territorio bonaerense, ni por casualidad. Todos y todas a la ciudad de Buenos Aires y Jujuy, a estigmatizar a las otras fuerzas políticas y a hablar de dictaduras ante cualquier atisbo de poner orden democrático”, consideró el gobernador, como un guiño a Horacio Rodríguez Larreta, a quien acompaña en la fórmula presidencial.
“Han enviado abogados, funcionarios y agentes de inteligencia a las comunidades originarias, a intranquilizar y convulsionar a los pueblos con mentiras”, remarcó asimismo en la carta el gobernador, que hizo un repaso por las acciones que llevó adelante su administración para integrar a estos grupos.
Convencido de que llegaron manifestantes a su provincia para violentarse porque el Estado provincial no reconoce los cortes de calles y de rutas como una modalidad de protesta, destacó: “A los riesgos de los golpes de mercado, ahora se suma otro riesgo, el riesgo del caos. El instrumento para amenazar la democracia de parte de sectores que cabalgan sobre el discurso de la exclusión es el caos. El problema en Argentina es que el caos sí está siendo organizado, ¿adivinen por quién? No se equivocan: por el kirchnerismo. En efecto pretenden que los cortes de ruta y los cortes de calles sean despenalizados para que ellos puedan sembrar el caos sin consecuencias legales y así tener a toda la sociedad como rehén”.
Fue tras eso que planteó: “Ha nacido una nueva e insólita intención de organizar las sociedades: la dictadura de las minorías”. Bajo esa postura, también expresó que el oficialismo se molesta porque en Jujuy los delincuentes sí van a la cárcel. “Este es el peligro que el kirchnerismo ve en el sistema que instalamos en Jujuy, porque es un modelo peligroso para ellos si lo implementamos en la nación. Encima, la nueva Constitución prohíbe el indulto en casos de corrupción y femicidio. Por eso el ensañamiento. Por eso tanta violencia: si se acaba la impunidad, se acaba el caos; y si se acaba el caos, se acaban sus privilegios”.
En el último tramo de su comunicado señaló como “impostores” a los miembros del oficialismo y, entre varios ítems para justificar ese agravio, indicó: “Ustedes no alientan ninguna lucha, ustedes alientan una desestabilización del gobierno democrático porque se les acaban sus privilegios. Sepan que seremos la garantía para terminar con la impunidad de la dictadura de las minorías y garantizar la construcción de una sociedad democrática, plural y de consenso común. Lo hacemos en Jujuy y lo vamos a hacer en la Argentina, como lo hicimos siempre: defendiendo la Constitución y la ley”.