Ayer se confirmó un caso de gripe A en un hombre de 50 años residente en la localidad de Salvador Mazza. El jefe de epidemiología, Alberto Gentile, habló esta mañana con El Tribuno y llevó tranquilidad a la población: “La gripe A no es la misma de cuando tuvimos la pandemia”, dijo.
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Ayer se confirmó un caso de gripe A en un hombre de 50 años residente en la localidad de Salvador Mazza. El jefe de epidemiología, Alberto Gentile, habló esta mañana con El Tribuno y llevó tranquilidad a la población: “La gripe A no es la misma de cuando tuvimos la pandemia”, dijo.
Gentile explicó que la influenza A tiene dos subtipos: el H1N1 y el H1N3, este último detectado en Salvador Mazza. “El primero provocó la pandemia y el segundo se detectó luego”, relató.
“Al ser dos virus que circulan ya por todo el mundo, tienen ambos exactamente la misma clínica y los mismos riesgos así que las medidas de control y las normas de la Organización Mundial de la Salud no varían al respecto. Son normas para la gripe en general”.
El epidemiólogo explicó que al ser nuevo, el H1N1 había significado un grave riesgo para la salud de la población, sin embargo, “pasó el tiempo y la gente está inmunizada por lo que estos virus tienden a declinar en el comportamiento que tenían al principio”.
Pese a ello, el funcionario recordó la importancia de tener precaución para evitar el contagio de gripe. “La gripe no es una enfermedad benigna, es de tener mucho cuidado y es muy traicionera. Hay que vacunarse, higienizarse las manos y tomar todas las medidas recomendadas. Si nos sentimos mal, consultar inmediatamente al médico, no automedicarse”, resaltó, “sobre todo si son grupos de riesgo”.
Se detectó un caso de rabia
Días atrás también se detectó un caso de rabia luego de que un perro mordiera a dos miembros de una familia. Gentile recordó que en noviembre desde el Ministerio de Salud se emitió un alerta y se extremaron las medidas de precaución dado que en Bolivia se declaró la catástrofe sanitaria por la cantidad de animales rabiosos.
“Luego de este caso, confirmado por un análisis efectuado en Buenos Aires, fortalecimos la vacunación en los municipios de alto riesgo. Sin embargo, todo depende también de cómo se comporte Bolivia, por la cercanía de la frontera”.
Gentile explicó que ante la sospecha de rabia, inmediatamente las familias deben tomar las precauciones. Señaló que el animal empieza a tener comportamientos extraños y puede atacar a sus propios dueños: “Cuando ataca, lo vigilamos durante 10 días. Si en ese tiempo el animal muere, se le extrae el cerebro para confirmar que fue un caso de rabia. Es lo que hicimos con este perro que atacó a los hermanos”.
Hay que tener precaución también con los niños pequeños. “Ante el miedo de que los reten, muchos no cuentan que un perro los mordió o los rasguñó y los niños son los que más mueren luego de un ataque. Hay que enseñarles a avisar lo que sucede”. También se pidió atención con las perras que mueren durante el parto o tiempo después: “Muchas familias creen que murieron por el parto y a veces es por rabia. Deben hacerlos revisar porque esa mamá contagió a sus perritos en la panza”, concluyó.