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Dictan talleres de alimentación saludable a madres de comunidades

Martes, 31 de enero de 2017 01:30
Imagen ilustrativa.
Madres de las comunidades del norte salteño aprenden e incorporan nuevos hábitos de alimentación saludable, primeros auxilios, cuidado personal y estimulación temprana en los Centros de Primera Infancia (CPI).
La semana pasada, el ministro de la Primera Infancia, Carlos Abeleira, recorrió algunos de estos espacios para supervisar el desarrollo del programa y conocer a los equipos territoriales.
En General Ballivián, localidad ubicada sobre la ruta nacional 34 y la finalización de la 81 que, como es propio en la zona, tiene un clima subtropical de elevadas temperaturas, el ministro compartió una jornada de trabajo junto a las madres y los acompañantes educativos del centro. Allí, a primera hora del día, las mujeres de las comunidades aborígenes asisten al centro para participar de los talleres de cocina y nutrición, y para colaborar con la elaboración de los alimentos para sus hijos. Sobre la propuesta, Abeleira explicó que "la idea de los Centros de Primera Infancia es fortalecer los conocimientos de la comunidad y al mismo tiempo incorporar paulatinamente prácticas que favorezcan y aseguren el pleno desarrollo y crecimiento de los más chicos".
En ese sentido, añadió que fue por esa razón que "los equipos de trabajo de los CPI se conformaron con profesionales y jóvenes de las mismas comunidades. Esto posibilitó afianzar los vínculos entre las comunidades, las familias y los centros".
A partir de esta metodología de trabajo se propone una estrategia de abordaje integral que permita preservar y asegurar el crecimiento de los niños durante sus primeros años de vida y, al mismo tiempo, empoderar a sus madres y las mujeres de las comunidades con talleres de capacitación. Según explicó Abeleira, en cada uno de los CPI del norte salteño "los más chicos reciben alimentos saludables, talleres de estimulación temprana, arte, lectoescritura o matemáticas. Sus madres, al mismo tiempo, aprenden a preparar nuevas recetas saludables o bien incorporan conocimientos para cuidar mejor la salud familiar".

Talleres integrales
La semana pasada, las mujeres que asisten al Centro de Primera Infancia de Ballivián participaron de diferentes talleres de higiene personal, salud bucal y cuidados durante el embarazo, además de los talleres de cocina y alfabetización que se dictan habitualmente.
Los operadores de los centros explican que otro de los objetivos que definen el trabajo diario de los CPI es afianzar los vínculos intrafamiliares, revalorizando el rol de los niños y sus padres. "Durante el primer mes de vida de los CPI son impresionantes los cambios que se empezaron a gestar. Hoy las madres, por ejemplo, nos avisan cuándo un niños empieza con un cuadro de diarrea o vómitos, algo que antes no se daba. Están cambiando su percepción sobre los signos de alerta, y eso va a contribuir muchísimo en el cuidado de los niños de la zona", explicó Abeleira.
Los equipos de Primera Infancia y el Ministerio de Salud desarrollaron mecanismos de articulación para derivar los casos de urgencias que se detecten en los Centros de Primera Infancia. "Para que esto funcione correctamente la participación de las familias, y principalmente las madres, es de vital importancia. Si no nos alertan cuando un chico tiene los primeros síntomas, cuando el deterioro está avanzado es mucho más complejo asistirlo", concluyó el ministro.
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Madres de las comunidades del norte salteño aprenden e incorporan nuevos hábitos de alimentación saludable, primeros auxilios, cuidado personal y estimulación temprana en los Centros de Primera Infancia (CPI).
La semana pasada, el ministro de la Primera Infancia, Carlos Abeleira, recorrió algunos de estos espacios para supervisar el desarrollo del programa y conocer a los equipos territoriales.
En General Ballivián, localidad ubicada sobre la ruta nacional 34 y la finalización de la 81 que, como es propio en la zona, tiene un clima subtropical de elevadas temperaturas, el ministro compartió una jornada de trabajo junto a las madres y los acompañantes educativos del centro. Allí, a primera hora del día, las mujeres de las comunidades aborígenes asisten al centro para participar de los talleres de cocina y nutrición, y para colaborar con la elaboración de los alimentos para sus hijos. Sobre la propuesta, Abeleira explicó que "la idea de los Centros de Primera Infancia es fortalecer los conocimientos de la comunidad y al mismo tiempo incorporar paulatinamente prácticas que favorezcan y aseguren el pleno desarrollo y crecimiento de los más chicos".
En ese sentido, añadió que fue por esa razón que "los equipos de trabajo de los CPI se conformaron con profesionales y jóvenes de las mismas comunidades. Esto posibilitó afianzar los vínculos entre las comunidades, las familias y los centros".
A partir de esta metodología de trabajo se propone una estrategia de abordaje integral que permita preservar y asegurar el crecimiento de los niños durante sus primeros años de vida y, al mismo tiempo, empoderar a sus madres y las mujeres de las comunidades con talleres de capacitación. Según explicó Abeleira, en cada uno de los CPI del norte salteño "los más chicos reciben alimentos saludables, talleres de estimulación temprana, arte, lectoescritura o matemáticas. Sus madres, al mismo tiempo, aprenden a preparar nuevas recetas saludables o bien incorporan conocimientos para cuidar mejor la salud familiar".

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La semana pasada, las mujeres que asisten al Centro de Primera Infancia de Ballivián participaron de diferentes talleres de higiene personal, salud bucal y cuidados durante el embarazo, además de los talleres de cocina y alfabetización que se dictan habitualmente.
Los operadores de los centros explican que otro de los objetivos que definen el trabajo diario de los CPI es afianzar los vínculos intrafamiliares, revalorizando el rol de los niños y sus padres. "Durante el primer mes de vida de los CPI son impresionantes los cambios que se empezaron a gestar. Hoy las madres, por ejemplo, nos avisan cuándo un niños empieza con un cuadro de diarrea o vómitos, algo que antes no se daba. Están cambiando su percepción sobre los signos de alerta, y eso va a contribuir muchísimo en el cuidado de los niños de la zona", explicó Abeleira.
Los equipos de Primera Infancia y el Ministerio de Salud desarrollaron mecanismos de articulación para derivar los casos de urgencias que se detecten en los Centros de Primera Infancia. "Para que esto funcione correctamente la participación de las familias, y principalmente las madres, es de vital importancia. Si no nos alertan cuando un chico tiene los primeros síntomas, cuando el deterioro está avanzado es mucho más complejo asistirlo", concluyó el ministro.

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