Hace casi dos semanas, El Tribuno tocó la puerta de la solidaridad porque el profe wichi pedía ayuda para celebrar con sus alumnos de la escuelita de idioma, que funciona en el patio de su casa, el fin de curso. Soñaba con premiar tanto esfuerzo de los chicos que concurren a escuelas con sistema bilinge y que se frustran al no poder aprender las asignaturas por inconvenientes con el lenguaje: a veces resulta abrumador haber crecido sin el alimento suficiente y adecuado y tener que aprender matemática, lengua y ciencias en dos idiomas. Elio Fernández y su hermana Dorita no dudaron y, desde hace dos años, en el fondo de la casa materna, en el Lote 75 de Embarcación, practican con medio centenar de chicos todas las tareas.
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Hace casi dos semanas, El Tribuno tocó la puerta de la solidaridad porque el profe wichi pedía ayuda para celebrar con sus alumnos de la escuelita de idioma, que funciona en el patio de su casa, el fin de curso. Soñaba con premiar tanto esfuerzo de los chicos que concurren a escuelas con sistema bilinge y que se frustran al no poder aprender las asignaturas por inconvenientes con el lenguaje: a veces resulta abrumador haber crecido sin el alimento suficiente y adecuado y tener que aprender matemática, lengua y ciencias en dos idiomas. Elio Fernández y su hermana Dorita no dudaron y, desde hace dos años, en el fondo de la casa materna, en el Lote 75 de Embarcación, practican con medio centenar de chicos todas las tareas.
Afortunadamente, bastó un toc toc para que las puertas se abran y la solidaridad sueñe los sueños del profe wichi, quien con la fuerza de su sangre india logró editar un diccionario de la lengua wichi y creó una aplicación para celulares y PC (que aún no ha conseguido financiamiento para estar al alcance de todos). Pero sí llegó la ayuda que pedía: El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación ya descargó en su humilde vivienda sillas, escritorios, armarios, una cocina y chapas para que la escuelita de idioma wichi comience a tomar forma. Aunque todavía necesita cemento y ripiosa para hacer bloques y levantar paredes.
Con respecto a la fiesta, la ONG Haciendo Lío Salta se comprometió con la donación de la mayoría de los pedidos del profesor: las remeras impresas con el logo de la escuelita de idioma wichi, y también los alimentos que compartirán ese día. Desde Orán, Pamelita Producciones viajará hasta el Lote 75 con todos los personajes de Disney para animar la fiesta. Además, Elio cuenta con varios benefactores que no quieren ser nombrados, que enviaron ayuda desde Córdoba y desde el exterior. "Estoy tan agradecido porque mi única intención es que el idioma wichi no muera, y es así como voy encontrando seres maravillosos en el camino", dijo.
Para la fiesta faltan bebidas y para la escuelita, algunos materiales de construcción.
Para ayudar: Lote 75, calle 4, medidor 105. El teléfono de Elio es 03878 - 15344201 y su CBU del banco Macro es 2850102040094707358908.