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El trabajo de nenes wichis ya está en Tecnópolis

El trabajo es sobre pinturas no contaminantes para telas y otras texturas
Lunes, 20 de noviembre de 2017 00:00

Para darle color a las telas, a los lienzos y otros materiales similares no se necesitan materiales contaminantes, como lo descubrieron los docentes y los niños del jardincito de infantes de la escuela de la comunidad wichi La Mora, ubicada a tres kilómetros al este de Tartagal, cuando casi por casualidad descubrieron las propiedades que tienen frutas, verduras y hortalizas como la remolacha, la zanahoria y tantas otras.

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Para darle color a las telas, a los lienzos y otros materiales similares no se necesitan materiales contaminantes, como lo descubrieron los docentes y los niños del jardincito de infantes de la escuela de la comunidad wichi La Mora, ubicada a tres kilómetros al este de Tartagal, cuando casi por casualidad descubrieron las propiedades que tienen frutas, verduras y hortalizas como la remolacha, la zanahoria y tantas otras.

En base a ese hallazgo todos comenzaron a trabajar para ver la forma de hacer más eficiente el método de teñido ecológico y ese empeño les valió superar la instancia local en el departamento San Martín, llegar a la provincial y hoy estar participando en Tecnópolis, junto a los proyectos que presentan colegios y escuelas de toda la provincia de Salta, de los diferentes niveles, en la feria de la ciencia. Lo novedoso es que el trabajo es de los docentes y los nenes de una escuela aborigen pero también de los papás de esa humilde comunidad wichi, que se comprometieron para concretarlo y presentarlo en Buenos Aires, como lo están haciendo en este momento la docente del nivel inicial Claudia Fernández junto a una asistente bilinge.

Por casualidad

Según lo explica la docente, "todo comenzó cuando una nena wichi llegó con una mochila de chaguar pero de colores diferentes, que no son los habituales (en la gama del ocre o del marrón, con la que las mujeres originarias suelen colorear estas artesanías) y los nenes se sorprendieron y lo comentaban en clase; eso sirvió como partida para desarrollarlo en la feria de ciencia".

La misma docente comenzó a investigar entre las familias de la propia comunidad wichi "las propiedades de los vegetales y hortalizas que podrían ser utilizadas para teñir en forma totalmente natural, y como lo hacen en forma ancestral las comunidades originarias, las telas y diferentes texturas sobre las que trabajan. Contamos con una huerta en la escuela y pudimos seguir avanzando en nuestra investigación utilizando remolachas como primer producto". Los chicos hicieron experimentos para obtener tinturas de diferente intensidad en diversas texturas y como materia prima fueron utilizadas además de remolachas y zanahorias, otras verduras que se producen en la huerta escolar".

Ganadores en varias instancias

En el mes de junio se realizó la instancia institucional de la Feria de Ciencias y pasaron con el proyecto a la instancia zonal, “y ahí nos tocó competir con otros 20 proyectos. Pasamos nosotros a la provincial, junto a los de las escuelas San Isidro y de educación especial, y ganamos en esa instancia que se realizó en el Centro de Convenciones”.

Para la instancia nacional y de nivel inicial pasaron 6 proyectos de Salta, uno de ellos los chiquitos wichis de Misión La Mora. “Ahora nos toca defender a los docentes y en nuestro caso voy con la auxiliar bilingüe y presentamos la propuesta acompañada de materiales, como filmaciones y fotografías, porque lógicamente no podemos ir con los 22 niños del jardín de infantes. Para nosotros como docentes, que un trabajo que lleven adelante niños de una comunidad originaria es muy importante, porque la propuesta apunta a revalorizar la riqueza cultural de las comunidades originarias”, remarcó Claudia Fernández.

Chaguar

Dentro del desarrollo del proyecto, los chicos aborígenes mostraron el trabajo que realizan con el chaguar, que de ser una planta silvestre resistente a las elevadas temperaturas de la zona, después de un extenso proceso -que de hecho no se condice con el precio que obtienen por el trabajo final- se convierten en artesanías como las típicas yicas.

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