Se confirmó ayer el procesamiento de los hermanos Atilio Efraín Mamaní y Daniel Avelardo Mamaní, acusados de asesinar de casi 80 puñaladas al gendarme retirado Miguel Argentino Huerga, en un hecho ocurrido el 23 de abril del 2008 en una zona conocida como Loma Hermosa del Departamento San Antonio.
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Se confirmó ayer el procesamiento de los hermanos Atilio Efraín Mamaní y Daniel Avelardo Mamaní, acusados de asesinar de casi 80 puñaladas al gendarme retirado Miguel Argentino Huerga, en un hecho ocurrido el 23 de abril del 2008 en una zona conocida como Loma Hermosa del Departamento San Antonio.
Así lo decidió el titular del Juzgado de Instrucción Penal Nº 2 Javier Aróstegui al encontrarlos “supuestos coautores responsables del delito de homicidio agravado por alevosía y ensañamiento”.
Junto a esta medida el juez también dictó “el sobreseimiento parcial y definitivo a una tercera persona” que hasta ayer estaba vinculada a la causa.
Cabe señalar que la resolución judicial dictada por el magistrado, la cual podrá ser recurrida en una instancia superior, se concretó luego de que el funcionario judicial considerara que “los dos inculpados no sólo tuvieron en miras el quitarle la vida a la víctima, haciéndolo de una manera pérfida sino también que procuraron con su accionar, aumentar deliberadamente e inhumanamente el dolor de ésta”.
Por otro lado vale decir que la detención de los hermanos se llevaron a cabo luego de minuciosas investigaciones llevadas adelante por la División Homicidios de esa fuerza especial de seguridad.
La primera detención se concretó el 9 del corriente en Purmamarca donde los sabuesos, dieron con Atilio Efrain Mamaní que se encontraba allí trabajando.
Como consecuencia de esta detención y sabiendo que su “caída” era inminente Daniel Avelardo Mamaní, hermano del detenido y también acusado por el homicidio, se presentó espontáneamente junto a su abogado ante el juzgado de Instrucción Penal Nº 2 y quedó automáticamente detenido.
Si bien hasta el momento se desconoce el móvil del homicidio, la calificación penal de los hechos se debe a que al momento de su hallazgo el cuerpo del gendarme retirado presentaba cerca de 80 heridas punzocortantes.