¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

15 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Gimnasia profundizó aún más su crisis futbolística

Sabado, 23 de noviembre de 2013 23:58

 Gimnasia ahondó aún más su crisis futbolística. El “lobo” perdió dos a cero con Brown de Adrogué y aunque en un momento se habló de la salida de Mario Gómez, el técnico manifestó sentirse aún con fuerzas y que su continuidad está -como siempre- en manos de la dirigencia.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

 Gimnasia ahondó aún más su crisis futbolística. El “lobo” perdió dos a cero con Brown de Adrogué y aunque en un momento se habló de la salida de Mario Gómez, el técnico manifestó sentirse aún con fuerzas y que su continuidad está -como siempre- en manos de la dirigencia.

En el arranque del encuentro y lejos de entender que jugaban una final, el “lobo” fue timorato y dubitativo. Tampoco los locales entendieron la manera de plantear el duelo y así entonces los presentes, sufrieron con el “juego” presentado. Un partido trabado en el mediocampo, con ambos buscando sobre todo a través de los envíos aéreos, la pelota pasó poco por el piso, siendo los balones detenidos las únicas chances netas de peligro. Como el cabezazo de Quiroga que pasó cerca del palo derecho de Giordano. Y como no podía ser de otra manera, la apertura del marcador, en un descuido en la marca en la última pelota de la primera parte, Maidana puso el uno a cero con el cual se fueron al descanso.

Igual lejos de ser un motivo de desvanecimiento anímico para el “lobo”, en el complemento se paró con otra actitud. Metió en su arco a Brown que sufrió las chances que creó Gimnasia en un reinicio furioso. Urresti de arremetida tuvo la primera chance para empatar, en una jugada “sucia” dentro del área del club de Adrogué y luego Bustos no pudo empalmar correctamente el balón, rematando desviado. Luego lo increíble: primero Giordano se hizo gigante frente a la tijera de Vázquez, para desviar el balón al córner. De ese cobro, Quiroga primero y Urresti después -esta segunda más increíble que la primera- estrellaron la pelota en el travesaño. Pero como se dice: los goles que no se hacen en un arco se reciben en el propio. Fabro se animó en una salida rápida y sorprendió con un remate muy bien direccionado para poner el dos a cero y claro, arrojar ahora si un baldazo de agua fría en el equipo del norte, que no supo ni pudo recuperarse de este golpe de KO y terminó con su octavo partido sin alegrías.