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Mejor nivel en cisternas, pero los cortes seguirán

Martes, 18 de noviembre de 2014 00:00
<p>FERNANDO ROSENBLUTH</p>

A raíz de las altas temperaturas y la falta de lluvias, el servicio de agua potable seguirá sufriendo interrupciones programadas y por sectores en distintos puntos de la capital jujeña. Mucho trabajo demandó para Agua de los Andes la reparación de dos acueductos dañados en las últimas semanas, uno en el mes de septiembre en la margen izquierda del río Grande; y otro a principios de este mes en el acueducto que llega a la cisterna Sargento Cabral. Estos hechos extraordinarios provocaron que muchos vecinos se quedaran por varias horas sin el vital líquido.

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A raíz de las altas temperaturas y la falta de lluvias, el servicio de agua potable seguirá sufriendo interrupciones programadas y por sectores en distintos puntos de la capital jujeña. Mucho trabajo demandó para Agua de los Andes la reparación de dos acueductos dañados en las últimas semanas, uno en el mes de septiembre en la margen izquierda del río Grande; y otro a principios de este mes en el acueducto que llega a la cisterna Sargento Cabral. Estos hechos extraordinarios provocaron que muchos vecinos se quedaran por varias horas sin el vital líquido.

Al brindar un panorama general de lo que está sucediendo con la producción de agua potable, el titular de la empresa prestataria del servicio, Fernando Rosenbluth, refirió que los inconvenientes que se fueron presentando causaron serios problemas a la compañía para tomar, tratar, potabilizar y distribuir el líquido. Dijo que los principales inconvenientes son la escasez de agua en los ríos que alimentan las cisternas de la empresa, el aumento del consumo por las altas temperaturas, y los incidentes extraordinarios con algunos acueductos.

Sobre la rotura de los dos acueductos, el directivo indicó que en ambos casos se hicieron las reparaciones y se cambiaron los tramos de conductos rotos, con lo que se evitaría una potencial aparición de un nuevo desperfecto de iguales características. “Paralelamente a ello, venimos realizando una serie de acciones para mejorar y morigerar el esquema de cortes se efectúan y se seguirán efectuando”, confió.

En ese contexto, ratificó que los cortes programados continuarán, fundamentalmente hasta que comience el período de lluvias que permita elevar el nivel de los afluentes de donde se capta el agua para su potabilización. “Estos niveles siguen siendo muy bajos, porque todavía no se han presentado precipitaciones de importancia”, acotó.

Aseguró que en algunas cisternas se recuperó en las últimas semanas el nivel, por lo que se suspendieron los cortes que se venían produciendo en Alto Comedero durante las horas del día y sobre todo la noche. Informó que la suspensión programada del servicio continúa -por la noche- para los barrios ubicados en la margen izquierda del río Grande y la zona comprendida entre Cuyaya y Coronel Arias.

Adelantó que la empresa viene ejecutando algunas obras paliativas para garantizar la continuidad del servicio a todos los vecinos de la capital provincial y recalcó que la situación actualmente mejoró respecto a las dos últimas semanas, donde la demanda de agua era alta y las posibilidades de captación desde los efluentes eran prácticamente nulas.

Por último, instó a los vecinos a denunciar los hechos puntuales que hacen a la calidad del servicio, como las roturas, pérdidas y derroches, señalando que esa es la única manera de que el sistema de detección de Agua de los Andes actúe a la brevedad. “Es muy importante el reclamo de los usuarios y su alerta por estos temas puntuales”, finalizó.