Se inicia la última semana del año muy complicada, ya que arranca con un paro en el transporte público de pasajeros en Capital, dado que el sector empresarial no obtuvo el aumento de la tarifa del boleto urbano.
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Se inicia la última semana del año muy complicada, ya que arranca con un paro en el transporte público de pasajeros en Capital, dado que el sector empresarial no obtuvo el aumento de la tarifa del boleto urbano.
La medida de fuerza se iniciará a partir de las 4 de la madrugada de hoy convocada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA), anunciada ante las amenazas de los empresarios del transporte de iniciar despidos masivos. Al cierre de esta edición no se conocían la modalidad pero no descartaban acompañar el paro con cortes de ruta.
El Tribuno de Jujuy consultó a Eduardo Farfán, secretario general de la UTA Jujuy, sobre los motivos del paro, dijo que es por la suspensión del aumento del boleto urbano de pasajeros, ya que ese impedimento hace que las empresas amenacen con despedir a trabajadores. Al respecto relató que son dieciséis trabajadores que los dejaron fuera y que a través del gremio lograron que se incorporen 13, pero que aún faltan y van a defender las fuentes laborales.
Vale recordar que el pasado martes se conoció la resolución del Tribunal Contenciosos Administrativo, una medida cautelar presentada por asociaciones de usuarios, vecinos y partidos políticos ante la Justicia provincia. De modo que el aumento del boleto urbano a $ 5 en enero y $ 5,50 para mayo quedó suspendido hasta que se resuelva de fondo el amparo presentado en la Justicia.
Ante esta situación Farfán dijo que “estamos con estas medidas porque debemos cuidar las fuentes laborales genuinas que tenemos y que no quede ningún trabajador en la calle”.
Así también destacó que el objetivo es que los empresarios consigan el aumento del boleto. Además hace unas semanas atrás la UTA está intercediendo para que los trabajadores se reintegren a sus puestos de trabajo.
Al respecto serían 16 los empleados que quedaron sin trabajo, y las empresas han comunicado a los empleados que ante la “negativa del aumento” habría un ajuste de personal, porque no podían cumplir con los salarios y otros beneficios.
Por último dijo que “la devaluación nacional hace que los aumentos del gremio que se han obtenido durante el año, la inflación los fumó ahora. Estamos bregando para que no quede ningún trabajador en la calle”.
Si bien la medida de fuerza es fuerte y contundente a dos días de finalizar el año, este medio no se pudo comunicar con funcionarios municipales para conocer algún dispositivo de guardia para dar el servicio público.