La presidenta reelecta de Brasil, Dilma Rousseff, mantiene la aprobación del 42 por ciento de los brasileños, similar a la que registraba antes del proceso electoral que la consagró para un nuevo mandato, según una encuesta privada divulgada hoy.
Ese porcentaje reúne a quienes opinan que la gestión de la mandataria es "buena" u "óptima", de acuerdo con el sondeo del Instituto Datafolha cuyos resultados fueron publicados hoy por el diario Folha de S. Paulo.
La tasa de aprobación a la jefa del Estado es similar a la que tenía en la encuesta del 1 de octubre pasado -cuatro día antes de la primera vuelta electoral y 25 antes del balotaje que la consagró- y a la que tenía en junio de 2013, antes de que se produjeran masivas protestas populares que hicieron desplomar su popularidad.
Paralelamente, 24 por ciento de los brasileños consideran "mala" o "pésima" la gestión de Rousseff, y 70 por ciento cree que la mandataria tiene algún tipo de responsabilidad en el escándalo de la empresa estatal Petrobras, de la que se desviaron cerca de 3.900 millones de dólares para financiar ilegalmente campañas del Partido de los Trabajadores (PT) gobernante.
Ese porcentaje reúne a quienes opinan que la gestión de la mandataria es "buena" u "óptima", de acuerdo con el sondeo del Instituto Datafolha cuyos resultados fueron publicados hoy por el diario Folha de S. Paulo.
La tasa de aprobación a la jefa del Estado es similar a la que tenía en la encuesta del 1 de octubre pasado -cuatro día antes de la primera vuelta electoral y 25 antes del balotaje que la consagró- y a la que tenía en junio de 2013, antes de que se produjeran masivas protestas populares que hicieron desplomar su popularidad.
Paralelamente, 24 por ciento de los brasileños consideran "mala" o "pésima" la gestión de Rousseff, y 70 por ciento cree que la mandataria tiene algún tipo de responsabilidad en el escándalo de la empresa estatal Petrobras, de la que se desviaron cerca de 3.900 millones de dólares para financiar ilegalmente campañas del Partido de los Trabajadores (PT) gobernante.
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La presidenta reelecta de Brasil, Dilma Rousseff, mantiene la aprobación del 42 por ciento de los brasileños, similar a la que registraba antes del proceso electoral que la consagró para un nuevo mandato, según una encuesta privada divulgada hoy.
Ese porcentaje reúne a quienes opinan que la gestión de la mandataria es "buena" u "óptima", de acuerdo con el sondeo del Instituto Datafolha cuyos resultados fueron publicados hoy por el diario Folha de S. Paulo.
La tasa de aprobación a la jefa del Estado es similar a la que tenía en la encuesta del 1 de octubre pasado -cuatro día antes de la primera vuelta electoral y 25 antes del balotaje que la consagró- y a la que tenía en junio de 2013, antes de que se produjeran masivas protestas populares que hicieron desplomar su popularidad.
Paralelamente, 24 por ciento de los brasileños consideran "mala" o "pésima" la gestión de Rousseff, y 70 por ciento cree que la mandataria tiene algún tipo de responsabilidad en el escándalo de la empresa estatal Petrobras, de la que se desviaron cerca de 3.900 millones de dólares para financiar ilegalmente campañas del Partido de los Trabajadores (PT) gobernante.
Ese porcentaje reúne a quienes opinan que la gestión de la mandataria es "buena" u "óptima", de acuerdo con el sondeo del Instituto Datafolha cuyos resultados fueron publicados hoy por el diario Folha de S. Paulo.
La tasa de aprobación a la jefa del Estado es similar a la que tenía en la encuesta del 1 de octubre pasado -cuatro día antes de la primera vuelta electoral y 25 antes del balotaje que la consagró- y a la que tenía en junio de 2013, antes de que se produjeran masivas protestas populares que hicieron desplomar su popularidad.
Paralelamente, 24 por ciento de los brasileños consideran "mala" o "pésima" la gestión de Rousseff, y 70 por ciento cree que la mandataria tiene algún tipo de responsabilidad en el escándalo de la empresa estatal Petrobras, de la que se desviaron cerca de 3.900 millones de dólares para financiar ilegalmente campañas del Partido de los Trabajadores (PT) gobernante.