Ignacio Hermida, el padre de la niña de 12 años hallada tras casi dieciocho horas de ausencia, dijo que la desaparición de Magalí “no fue un rapto en la calle”, sino que “fue obligada y retenida” fuera de su hogar.
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Ignacio Hermida, el padre de la niña de 12 años hallada tras casi dieciocho horas de ausencia, dijo que la desaparición de Magalí “no fue un rapto en la calle”, sino que “fue obligada y retenida” fuera de su hogar.
“Magalí está bien. Lo que sabemos es que ella fue obligada y retenida, esto no fue un rapto en la calle como en otros casos”, dijo el padre.
Al ser consultado sobre el lugar en el que estuvo la menor, el hombre dijo que prefirió no preguntarle: “No sabemos dónde pasó la noche porque no le pude preguntar nada. Sólo la abracé y nada más”.
El hombre contó que su hija ya estuvo con sus compañeras de colegio y que estuvo contenida por el asesor de menores de la Fiscalía y con un grupo de psicólogos.
Una de las pruebas con la que cuenta la Justicia son las cámaras de seguridad de la calle en las que se ve a la menor cuando el martes caminaba por el lugar.
“Desde ayer no puedo pensar en nada. Me limito a lo que pasó y a lo que es seguro. Vimos las imágenes de las cámaras de seguridad y se disparan varias hipótesis de ahí”.
La menor fue encontrada en una parada de colectivos, de la localidad de Béccar y a pocas cuadras de su domicilio, junto a un joven, con quien aparentemente mantenía una relación sentimental.
El joven de 21 años que fue encontrado junto a Magalí, quedó imputado por el delito de “abuso sexual agravado”. El fiscal Marcelo Fuenzalida, de la Unidad Funcional de Instrucción de Violencia de Género y Delitos Conexos a la Trata de Personas de San Isidro, ordenó su detención , luego que a la niña se le practicaran los estudios médicos correspondientes y constataran que la menor tuvo relaciones sexuales.