Los jujeños disfrutaron nuevamente del desopilante humor de Chichilo Viale, quien con su monólogo logró el disfrute del público que apostó por su talento. Con el espectáculo "Chichilo a la carta", ayudado por la tonada cordobesa y su expresividad corporal cautivó al público que no paró de reír y festejar sus chistes. Ameno y con sólo una banqueta en el escenario, el comediante se valió de su histrionismo para deleitar a los presentes con situaciones cotidianas, recuerdos de prácticas y consumos del pasado que no sólo generaron identificación en el público sino estallidos de risa. Los temas lo ameritaban. Comenzó recreando cómicas situaciones de la actualidad de la crisis económica como del pasado, comparando prácticas de la niñez a la hora de afrontar las limitaciones y a su vez reflexionar sobre la adolescencia y la falta de límites actuales. Recordar los primeros bailes, la indumentaria de moda, y los tragos de la época hacían viajar al pasado a gran parte de público que en espontánea risa disfrutaba de cada detalle. La situación de pareja a la hora de las vacaciones fue otro eje de la desopilante presentación, a la que le siguió una escatológica humorada acerca de la reunión de egresados donde las patologías de la edad, más los anecdóticos accidentes hicieron del deleite de las personas. Pero lo más cómico del monólogo y actuación fue aquella en que se valió de su característica expresividad con tono cordobés, su despeinado cabello y su expresión corporal logrando que la esperada representación que lo catapultara, renueve aplausos. La noche fue fructífera en reconocimientos, ya que la sala pese a no estar colmada acompañó con las palmas cada escena cómica del consagrado Chichilo.
inicia sesión o regístrate.
Los jujeños disfrutaron nuevamente del desopilante humor de Chichilo Viale, quien con su monólogo logró el disfrute del público que apostó por su talento. Con el espectáculo "Chichilo a la carta", ayudado por la tonada cordobesa y su expresividad corporal cautivó al público que no paró de reír y festejar sus chistes. Ameno y con sólo una banqueta en el escenario, el comediante se valió de su histrionismo para deleitar a los presentes con situaciones cotidianas, recuerdos de prácticas y consumos del pasado que no sólo generaron identificación en el público sino estallidos de risa. Los temas lo ameritaban. Comenzó recreando cómicas situaciones de la actualidad de la crisis económica como del pasado, comparando prácticas de la niñez a la hora de afrontar las limitaciones y a su vez reflexionar sobre la adolescencia y la falta de límites actuales. Recordar los primeros bailes, la indumentaria de moda, y los tragos de la época hacían viajar al pasado a gran parte de público que en espontánea risa disfrutaba de cada detalle. La situación de pareja a la hora de las vacaciones fue otro eje de la desopilante presentación, a la que le siguió una escatológica humorada acerca de la reunión de egresados donde las patologías de la edad, más los anecdóticos accidentes hicieron del deleite de las personas. Pero lo más cómico del monólogo y actuación fue aquella en que se valió de su característica expresividad con tono cordobés, su despeinado cabello y su expresión corporal logrando que la esperada representación que lo catapultara, renueve aplausos. La noche fue fructífera en reconocimientos, ya que la sala pese a no estar colmada acompañó con las palmas cada escena cómica del consagrado Chichilo.
Proyectos y gira
Luego de la extenuante presentación, Chichilo Viale comentó acerca de la gira que sigue por todo el país lamentándose porque prevé cambiar la rutina, que tanto éxito tiene, por otra para renovar la presentación. Anunció que pretende hacer temporada veraniega en el teatro Mayor de Córdoba pero de manera mesurada para disfrutar de postergadas vacaciones. La gira que sigue por todo el país pretendía continuarla por Salta, Tucumán, el sur de Córdoba, Buenos Aires, Santa Fe, y otros puntos. Luego de varios años volvió a Jujuy con un espectáculo renovado que le apena dejar por el nivel de disfrute que genera entre el público.
En materia de proyectos, comentó que tiene ofrecimientos del productor "Chino" Carreras, pero aún no confirmó y es que este verano pretende priorizar el descanso, mientras estudia un ofrecimiento para presentaciones durante los fines de semana en el Teatro mayor de Córdoba. Sobre el eje de su espectáculo basado en la observación cotidiana, el cómico que hizo reír al país otrora en el programa de Susana Giménez explicó, "yo le meto chistes disfrazado de monólogo, y la función del cómico es que la gente se ría y para eso laburo. Es algo para todo el país, la gente se ríe acá igual que en Córdoba, la respuesta ha sido muy buena", afirmó reconociendo que de igual manera requiere de mucho esfuerzo mantenerse durante una hora y media con el monólogo.