Los recientes caso de Silvina Luna y Vicky Xipolitakis a raíz de los problemas que le causó una sustancia (metacrilato) que le inyectaron en los glúteos, siguen en la mira de la justicia y de la opinión pública pero, una de las primeras victimas que callò y ahora salió hablar es la vedette, Virginia Gallardo.
"Lo que le pasó a Silvina es más grave que lo mío porque yo tuve un Dios aparte. Un especialista me dijo que a mí me habían puesto poca cantidad y eso fue lo positivo", aclaró.
"Vine de Corrientes y sufrí un montón de cosas por los castings, por estar expuesta... por inseguridades propias. Vi a una persona que se la había hecho y me gustó, por eso fui sola de inconciente que soy y me operé. Mis papás me querían matar", confió.
"Me da impotencia que este debate se hace todos los años y queda en la nada. Es importante que entiendan que esto puede pasar. A veces, los que trabajamos en la televisión somos tomados como modelos pero no todo pasa por tener una linda cola o un buen cuerpo".
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Los recientes caso de Silvina Luna y Vicky Xipolitakis a raíz de los problemas que le causó una sustancia (metacrilato) que le inyectaron en los glúteos, siguen en la mira de la justicia y de la opinión pública pero, una de las primeras victimas que callò y ahora salió hablar es la vedette, Virginia Gallardo.
"Lo que le pasó a Silvina es más grave que lo mío porque yo tuve un Dios aparte. Un especialista me dijo que a mí me habían puesto poca cantidad y eso fue lo positivo", aclaró.
"Vine de Corrientes y sufrí un montón de cosas por los castings, por estar expuesta... por inseguridades propias. Vi a una persona que se la había hecho y me gustó, por eso fui sola de inconciente que soy y me operé. Mis papás me querían matar", confió.
"Me da impotencia que este debate se hace todos los años y queda en la nada. Es importante que entiendan que esto puede pasar. A veces, los que trabajamos en la televisión somos tomados como modelos pero no todo pasa por tener una linda cola o un buen cuerpo".