El programa del Enero Tilcareño 2015, impreso con el membrete del Municipio Indígena de Tilcara, son cinco páginas que suman actividades culturales, deportivas y sociales desde la inauguración del 10 de enero próximo. La mayor parte de los eventos se realizarán desde los viernes a los domingos hasta el cierre del sábado 31.
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El programa del Enero Tilcareño 2015, impreso con el membrete del Municipio Indígena de Tilcara, son cinco páginas que suman actividades culturales, deportivas y sociales desde la inauguración del 10 de enero próximo. La mayor parte de los eventos se realizarán desde los viernes a los domingos hasta el cierre del sábado 31.
Habrá recitales en el centro de la plaza y las clásicas noches festivaleras en el Tinglado Municipal, conciertos en el Salón Municipal y en el museo Terry, bailes, desfiles de moda, destrezas gauchas, nombres como Coroico, Franco Tolaba, Bruno Arias y Micaela Chauque, y los primeros llamados a un Carnaval que nacerá a mediados de febrero.
Para enmarcar aquello que se quiere sintetizar en este Enero, conversamos con Juan Carlos Torrejón, quien es director de cultura de la comuna y miembro de una familia que participa activamente de las manifestaciones culturales locales con una banda de sikuris que cumplirá 85 años en el 2015, y un pesebre en el que los niños adoran al son de quena y redoble desde hace 70 años.
Nos explica que "uno de los temas es el de darle más participación a las comunidades originarias, mostrarle al público que llega en la temporada que son ellas, a través de sus referentes, las que participan de los distintos eventos que organiza el municipio tilcareño. El día del lanzamiento se van a convocar en Tilcara distintas comunidades de las diferentes regiones de la provincia, y así vamos a poder mostrar una postal de la cultura nuestra."
Entonces hablamos de sus vivencias personales entorno a este festival, que Torrejón remonta "a cuando era niño, porque desde entonces ya éramos espectadores y vivamos esos viejos Eneros en la plaza. Durante los años del Proceso, la cultura local no era tenida en cuenta. Hubo un momento oscuro, pero cuando llega la democracia empezamos a recuperar los valores nuestros, y empieza a haber grandes cambios."
Torrejón nos dice que "antes la gente migraba a las ciudades, pero con la democracia llega la necesidad de reivindicar lo propio aunque al principio con temor y con vergüenza, pero hoy ya la gente que viene de afuera pregunta por lo nuestro y así se muestran con orgullo carnavales, la pachamama, los pesebres, las sikuriadas y los misachicos."