La victoria de Gimnasia ante Villa Dálmine por el choque pendiente de la 36º fecha de la B Nacional tuvo un gusto especial. En realidad existía la necesidad de ganar y jugar bien de una vez por todas. Si bien en casa el equipo potencia sus virtudes, al punto que sólo perdió en una ocasión en la presente temporada, aquel 4 a 1 a manos de Juventud Unida que derivó en la sorpresiva renuncia de Sebastián Méndez, darle una alegría al hincha era fundamental.
El “lobo”, después de quedar fuera de la lucha por el segundo ascenso, se propuso sumar la mayor cantidad de puntos posibles para engrosar el promedio y al mismo tiempo terminar entre los 12 primeros que la próxima temporada competirán en la Copa Argentina. Hoy está en el puesto número 16, pero dos subirán a la “A”. Es decir, debe escalar dos peldaños para estar entre la elite que afrontará en el certamen más federal de todos en el 2016.
El triunfo sirvió para enterrar fantasmas en cuanto a la actitud de los muchachos en este tramo final de competencia, sabiendo que el objetivo se esfumó hace rato. Los jugadores demostraron que realmente se encuentran con ganas de cambiar la imagen y mostraron otra cara. A pura presión ahogaron al rival y después atacaron con ideas, sin abusar de los pelotazos, siendo algo muy saludable. El público despidió con aplausos.
Y aunque queda el sabor amargo de no estar “en la conversación”, más viendo que existe el material humano para hacerlo, en las tres últimas fechas el desafío será cosechar lo máximo posible.
En la reanudación del campeonato, Gimnasia recibirá a Santamarina de Tandil, que lucha por asegurarse un lugar en el Reducido. Luego visitará a Chacarita Juniors con la pesada mochila que implica nueve derrotas seguidas fuera de Jujuy y cerrará con Guaraní Antonio Franco, que pelea por mantener la categoría. Tres finales.
Durante este período, el técnico Gabriel Schürrer seguirá observando juveniles con los cuales contará en la campaña que se viene y también terminará de definir la lista de los jugadores que seguirán, más allá que se habla de una importante depuración.
Mientras que en lo institucional se rumorea que las elecciones serán el 10 de diciembre y que el presidente Fernando Yécora no se presentaría para la reelección. Dicen que un grupo de socios estaría intentando convencer al ingeniero Raúl Ulloa para que vuelva, pero hasta ahora sólo son trascendidos. El histórico hombre fuerte del club había declinado retornar después de 23 años de mandato. Vale recordar que regresó momentáneamente hace un par de años cuando el equipo peligraba su permanencia en la divisional.
En los próximos días tal vez haya mayores precisiones al respecto. Por ahora sólo hay reuniones y charlas informales.
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La victoria de Gimnasia ante Villa Dálmine por el choque pendiente de la 36º fecha de la B Nacional tuvo un gusto especial. En realidad existía la necesidad de ganar y jugar bien de una vez por todas. Si bien en casa el equipo potencia sus virtudes, al punto que sólo perdió en una ocasión en la presente temporada, aquel 4 a 1 a manos de Juventud Unida que derivó en la sorpresiva renuncia de Sebastián Méndez, darle una alegría al hincha era fundamental.
El “lobo”, después de quedar fuera de la lucha por el segundo ascenso, se propuso sumar la mayor cantidad de puntos posibles para engrosar el promedio y al mismo tiempo terminar entre los 12 primeros que la próxima temporada competirán en la Copa Argentina. Hoy está en el puesto número 16, pero dos subirán a la “A”. Es decir, debe escalar dos peldaños para estar entre la elite que afrontará en el certamen más federal de todos en el 2016.
El triunfo sirvió para enterrar fantasmas en cuanto a la actitud de los muchachos en este tramo final de competencia, sabiendo que el objetivo se esfumó hace rato. Los jugadores demostraron que realmente se encuentran con ganas de cambiar la imagen y mostraron otra cara. A pura presión ahogaron al rival y después atacaron con ideas, sin abusar de los pelotazos, siendo algo muy saludable. El público despidió con aplausos.
Y aunque queda el sabor amargo de no estar “en la conversación”, más viendo que existe el material humano para hacerlo, en las tres últimas fechas el desafío será cosechar lo máximo posible.
En la reanudación del campeonato, Gimnasia recibirá a Santamarina de Tandil, que lucha por asegurarse un lugar en el Reducido. Luego visitará a Chacarita Juniors con la pesada mochila que implica nueve derrotas seguidas fuera de Jujuy y cerrará con Guaraní Antonio Franco, que pelea por mantener la categoría. Tres finales.
Durante este período, el técnico Gabriel Schürrer seguirá observando juveniles con los cuales contará en la campaña que se viene y también terminará de definir la lista de los jugadores que seguirán, más allá que se habla de una importante depuración.
Mientras que en lo institucional se rumorea que las elecciones serán el 10 de diciembre y que el presidente Fernando Yécora no se presentaría para la reelección. Dicen que un grupo de socios estaría intentando convencer al ingeniero Raúl Ulloa para que vuelva, pero hasta ahora sólo son trascendidos. El histórico hombre fuerte del club había declinado retornar después de 23 años de mandato. Vale recordar que regresó momentáneamente hace un par de años cuando el equipo peligraba su permanencia en la divisional.
En los próximos días tal vez haya mayores precisiones al respecto. Por ahora sólo hay reuniones y charlas informales.