En una nueva audiencia del juicio que se le sigue a diez personas por agresiones con armas de fuego en contra de un grupo de personas que realizaban una caminata con fines proselitista, el 21 de octubre de 2013 en el barrio Mariano Moreno de nuestra ciudad, se les tomó declaración testimonial a seis personas.
Los imputados Cristian Llanes, Néstor Cerda, Oscar Sequeiros, Alejandro Sequeiros, Miguel Ángel Estévez, Juan Manuel Hurtado, Adolfo Martearena, Genaro Moruno, Walter Sagredo y Juan Carlos Ríos escucharon detenidamente los detalles que relataron los testigos citados.
La testigo Raquel Sánchez, quien en ese entonces era una de las presidentes de la organización barrial Tupac Amaru, dijo que estaba en la caminata y quedó delante de casualidad porque buscaba a un familiar. Recordó que delante de la columna iban Milagro Sala y "Beto" Cardozo y cuando iniciaron los incidentes, un grupo de personas "la sacó de ahí a Milagro y se la llevó corriendo".
Sánchez dijo además que el incidente comenzó en un negocio en una de las esquinas de la calle Ejército del Norte, donde hubo una pedrea, luego entre esta calle y Colón continuó, pero esta vez fue mucho más violenta.
Pero la testigo en su declaración dijo no haber visto gente armada ni personas heridas. Lo que si recordó haber visto y reconocido es a algunas personas que estaban enfrentados con las de la caminata proselitista.
El fiscal Marcelo Cuellar indagó sobre el tiempo que pasó desde que ocurrieron los hechos hasta el mes de diciembre, fecha en que realizó la denuncia. De pronto Sánchez, entre llantos, dijo haber sido "presionada" para culpar a los imputados. Manifestando que los "instigadores" eran sus propios compañeros, quienes sabían que la mujer los conocía a los supuestos agresores.
"Me dijeron que si no los denunciaba me iban a quitar las "capacitaciones" y me tenía que ir del barrio porque mis hijos iban a tener problemas", dijo Sánchez, al tiempo que dejó en claro que desde ese episodio se desvinculó de la organización.
En otro tramo de su declaración, dijo no conocer a los jóvenes que resultaron heridos con armas de fuego, pero que se enteró tras los incidentes que dos personas que resultaron heridas fueron llevadas al hospital.
"Vi un tremendo problema"
El testigo Jonathan Velázquez dijo que se encontraba en su domicilio "cuando lo que vi fue un tremendo problema, vi que la gente de Milagro Sala tiraba piedras a una carnicería, me pareció que fue un intento de saqueo. Yo estuve en el momento de la provocación por la gente de la Tupac". Luego haciendo referencia a los imputados, Velázquez dijo que "también haría lo mismo que ellos, porque ellos respondieron como cualquier vecino que defiende su cuadra, yo si no hubiera estado lesionado, también hubiera salido a defender mi barrio".
Además el testigo recordó que en frente del negocio, "había un camión cargado con ladrillos, y los de la Tupac vaciaron el camión y arrojaban esos ladrillos", dijo.
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En una nueva audiencia del juicio que se le sigue a diez personas por agresiones con armas de fuego en contra de un grupo de personas que realizaban una caminata con fines proselitista, el 21 de octubre de 2013 en el barrio Mariano Moreno de nuestra ciudad, se les tomó declaración testimonial a seis personas.
Los imputados Cristian Llanes, Néstor Cerda, Oscar Sequeiros, Alejandro Sequeiros, Miguel Ángel Estévez, Juan Manuel Hurtado, Adolfo Martearena, Genaro Moruno, Walter Sagredo y Juan Carlos Ríos escucharon detenidamente los detalles que relataron los testigos citados.
La testigo Raquel Sánchez, quien en ese entonces era una de las presidentes de la organización barrial Tupac Amaru, dijo que estaba en la caminata y quedó delante de casualidad porque buscaba a un familiar. Recordó que delante de la columna iban Milagro Sala y "Beto" Cardozo y cuando iniciaron los incidentes, un grupo de personas "la sacó de ahí a Milagro y se la llevó corriendo".
Sánchez dijo además que el incidente comenzó en un negocio en una de las esquinas de la calle Ejército del Norte, donde hubo una pedrea, luego entre esta calle y Colón continuó, pero esta vez fue mucho más violenta.
Pero la testigo en su declaración dijo no haber visto gente armada ni personas heridas. Lo que si recordó haber visto y reconocido es a algunas personas que estaban enfrentados con las de la caminata proselitista.
El fiscal Marcelo Cuellar indagó sobre el tiempo que pasó desde que ocurrieron los hechos hasta el mes de diciembre, fecha en que realizó la denuncia. De pronto Sánchez, entre llantos, dijo haber sido "presionada" para culpar a los imputados. Manifestando que los "instigadores" eran sus propios compañeros, quienes sabían que la mujer los conocía a los supuestos agresores.
"Me dijeron que si no los denunciaba me iban a quitar las "capacitaciones" y me tenía que ir del barrio porque mis hijos iban a tener problemas", dijo Sánchez, al tiempo que dejó en claro que desde ese episodio se desvinculó de la organización.
En otro tramo de su declaración, dijo no conocer a los jóvenes que resultaron heridos con armas de fuego, pero que se enteró tras los incidentes que dos personas que resultaron heridas fueron llevadas al hospital.
"Vi un tremendo problema"
El testigo Jonathan Velázquez dijo que se encontraba en su domicilio "cuando lo que vi fue un tremendo problema, vi que la gente de Milagro Sala tiraba piedras a una carnicería, me pareció que fue un intento de saqueo. Yo estuve en el momento de la provocación por la gente de la Tupac". Luego haciendo referencia a los imputados, Velázquez dijo que "también haría lo mismo que ellos, porque ellos respondieron como cualquier vecino que defiende su cuadra, yo si no hubiera estado lesionado, también hubiera salido a defender mi barrio".
Además el testigo recordó que en frente del negocio, "había un camión cargado con ladrillos, y los de la Tupac vaciaron el camión y arrojaban esos ladrillos", dijo.