La
Conferencia Episcopal Argentina (CEA) transmitió ayer su "cercanía", "solidaridad" y "condolencias" al arzobispo de
París, cardenal
André Vingt-Trois, y al pueblo francés por los ataques terroristas ocurridos en la capital francesa y que "hieren a la humanidad entera".
Fue a través de una carta enviada al purpurado parisino que lleva la firma del presidente de la CEA, monseñor José María Arancedo, arzobispo de Santa Fe; y del secretario general del organismo, monseñor Carlos Humberto Malfa, obispo de Chascomús,
Buenos Aires.
"Los obispos argentinos hemos expresado que la historia nos enseña que la intolerancia viene de la mano con la más cruel de las violencias, y lo primero que se pierde es la paz, tan necesaria para la convivencia humana", expresaron en el mensaje.
También señalaron en la misiva que "las naciones que no aceptan ni valoran la pluralidad religiosa, se aíslan de la comunidad internacional y se cierran a la cultura del encuentro".
"Lo que es más grave, para llevar a cabo su crueldad, invocan el nombre de Dios, que es Padre de todos los hombres. Nunca la fe en Dios puede justificar la violencia, la discriminación y la muerte", subrayaron los obispos argentinos al citar un documento de la Confederación Episcopal Argentina de agosto de 2014.
Carta de la Daia
El titular de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (Daia), Julio Schlosser, le entregó ayer al embajador francés en Buenos Aires, Jean-Michel Casa, una carta de condolencias en nombre de toda la comunidad judeoargentina.
La nota está dirigida al gobierno galo y los familiares de las víctimas que provocaron los siete atentados en París.
Del encuentro "surgió el mensaje de que tenemos que estar juntos, luchando codo a codo", completó el dirigente.
La
Conferencia Episcopal Argentina (CEA) transmitió ayer su "cercanía", "solidaridad" y "condolencias" al arzobispo de
París, cardenal
André Vingt-Trois, y al pueblo francés por los ataques terroristas ocurridos en la capital francesa y que "hieren a la humanidad entera".
Fue a través de una carta enviada al purpurado parisino que lleva la firma del presidente de la CEA, monseñor José María Arancedo, arzobispo de Santa Fe; y del secretario general del organismo, monseñor Carlos Humberto Malfa, obispo de Chascomús,
Buenos Aires.
"Los obispos argentinos hemos expresado que la historia nos enseña que la intolerancia viene de la mano con la más cruel de las violencias, y lo primero que se pierde es la paz, tan necesaria para la convivencia humana", expresaron en el mensaje.
También señalaron en la misiva que "las naciones que no aceptan ni valoran la pluralidad religiosa, se aíslan de la comunidad internacional y se cierran a la cultura del encuentro".
"Lo que es más grave, para llevar a cabo su crueldad, invocan el nombre de Dios, que es Padre de todos los hombres. Nunca la fe en Dios puede justificar la violencia, la discriminación y la muerte", subrayaron los obispos argentinos al citar un documento de la Confederación Episcopal Argentina de agosto de 2014.
Carta de la Daia
El titular de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (Daia), Julio Schlosser, le entregó ayer al embajador francés en Buenos Aires, Jean-Michel Casa, una carta de condolencias en nombre de toda la comunidad judeoargentina.
La nota está dirigida al gobierno galo y los familiares de las víctimas que provocaron los siete atentados en París.
Del encuentro "surgió el mensaje de que tenemos que estar juntos, luchando codo a codo", completó el dirigente.