Una nueva tragedia migratoria en el
mar Egeo se cobró las vidas de dos niños ayer, provocando una movilización de protesta en la isla griega de
Lesbos, mientras que la
ONU anunció que llegarán 600.000 migrantes más en los próximos cuatro meses a la
Unión Europea. La Comisión Europea estimó por su parte que unos tres millones de personas llegarán al bloque europeo entre 2015 y 2017, huyendo de la guerra y la pobreza.
En la madrugada de ayer se ahogaron dos niños migrantes cuando el bote en el que viajaban con sus familias desde Turquía se hundió cerca de Kos. El cuerpo de uno de ellos fue rescatado, pero todavía están buscando el del otro niño, de seis años. El padre de los menores, uno de los 14 supervivientes del naufragio, dijo a los socorristas que no pudo salvar a sus hijos y abandonó sus cuerpos para ayudar a otros pasajeros.
Un poco más al norte, en Lesbos, la principal puerta de entrada de los migrantes a Europa, hubo manifestaciones ayer por la mañana para protestar contra la política europea de migración, antes de la visita a la isla del primer ministro griego Alexis Tsipras y del presidente del parlamento europeo Martin Schulz.
"El Egeo está lleno de cadáveres de migrantes. Europeos asesinos de los pueblos", rezaba una banderola que desplegó un grupo de manifestantes delante del edificio de la alcaldía.
Otros manifestantes con chalecos salvavidas color, símbolo del éxodo, naranja pidieron que se permita a los migrantes ingresar de modo seguro en la Unión Europea.
Una nueva tragedia migratoria en el
mar Egeo se cobró las vidas de dos niños ayer, provocando una movilización de protesta en la isla griega de
Lesbos, mientras que la
ONU anunció que llegarán 600.000 migrantes más en los próximos cuatro meses a la
Unión Europea. La Comisión Europea estimó por su parte que unos tres millones de personas llegarán al bloque europeo entre 2015 y 2017, huyendo de la guerra y la pobreza.
En la madrugada de ayer se ahogaron dos niños migrantes cuando el bote en el que viajaban con sus familias desde Turquía se hundió cerca de Kos. El cuerpo de uno de ellos fue rescatado, pero todavía están buscando el del otro niño, de seis años. El padre de los menores, uno de los 14 supervivientes del naufragio, dijo a los socorristas que no pudo salvar a sus hijos y abandonó sus cuerpos para ayudar a otros pasajeros.
Un poco más al norte, en Lesbos, la principal puerta de entrada de los migrantes a Europa, hubo manifestaciones ayer por la mañana para protestar contra la política europea de migración, antes de la visita a la isla del primer ministro griego Alexis Tsipras y del presidente del parlamento europeo Martin Schulz.
"El Egeo está lleno de cadáveres de migrantes. Europeos asesinos de los pueblos", rezaba una banderola que desplegó un grupo de manifestantes delante del edificio de la alcaldía.
Otros manifestantes con chalecos salvavidas color, símbolo del éxodo, naranja pidieron que se permita a los migrantes ingresar de modo seguro en la Unión Europea.