Un grupo de boqueteros robó aproximadamente 40.000 pesos en efectivo y un millón en cheques en un comercio de venta de neumáticos, en la ciudad mendocina de San Rafael. El hecho ocurrió en el local de la empresa HC Neumáticos, en el barrio Pueblo Diamante, distrito situado al sur de la ciudad de Mendoza.
Fuentes policiales informaron que los ladrones hicieron un boquete en el techo y se llevaron una caja fuerte que estaba empotrada en la pared que contenía más de un millón de pesos entre cheques propios, de terceros y dinero en efectivo.
El robo ocurrió durante la inactividad del fin de semana largo y fue descubierto ayer por uno de los responsables de la firma, quien al llegar descubrió que desconocidos realizaron un agujero en el techo e ingresaron a una de las oficinas.
Una vez dentro del negocio, que carece de alarma, custodios o cámaras de seguridad, los boqueteros sustrajeron una caja fuerte que se encontraba empotrada en la pared y unas computadoras.
Según denunciaron los propietarios del establecimiento, el local había quedado cerrado el sábado por la tarde, por lo que se sospecha que ingresaron entre la madrugada del domingo y la del lunes.
Los pesquisas creen que los autores tenían conocimiento de la cifra que se llevaron, una de las más altas que registra la historia delictiva de ese departamento sureño.
El tanto, el juez Gabriel Ravagnani, titular del 3º Juzgado de Instrucción, caratuló la causa como "robo agravado".
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Un grupo de boqueteros robó aproximadamente 40.000 pesos en efectivo y un millón en cheques en un comercio de venta de neumáticos, en la ciudad mendocina de San Rafael. El hecho ocurrió en el local de la empresa HC Neumáticos, en el barrio Pueblo Diamante, distrito situado al sur de la ciudad de Mendoza.
Fuentes policiales informaron que los ladrones hicieron un boquete en el techo y se llevaron una caja fuerte que estaba empotrada en la pared que contenía más de un millón de pesos entre cheques propios, de terceros y dinero en efectivo.
El robo ocurrió durante la inactividad del fin de semana largo y fue descubierto ayer por uno de los responsables de la firma, quien al llegar descubrió que desconocidos realizaron un agujero en el techo e ingresaron a una de las oficinas.
Una vez dentro del negocio, que carece de alarma, custodios o cámaras de seguridad, los boqueteros sustrajeron una caja fuerte que se encontraba empotrada en la pared y unas computadoras.
Según denunciaron los propietarios del establecimiento, el local había quedado cerrado el sábado por la tarde, por lo que se sospecha que ingresaron entre la madrugada del domingo y la del lunes.
Los pesquisas creen que los autores tenían conocimiento de la cifra que se llevaron, una de las más altas que registra la historia delictiva de ese departamento sureño.
El tanto, el juez Gabriel Ravagnani, titular del 3º Juzgado de Instrucción, caratuló la causa como "robo agravado".