Ya entrada la noche, fue momento para el traslado de Los Alegres hacia el mojón ubicado a la vera de la colectora de acceso al barrio, sobre la ruta 66, lugar en donde en ceremonia clásica los simpatizantes, y bajo una nube de talco y nieve, le dijeron un "hasta pronto" carnaval, con la sepultura del diablo que los acompañó durante seis jornadas de celebración.
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Ya entrada la noche, fue momento para el traslado de Los Alegres hacia el mojón ubicado a la vera de la colectora de acceso al barrio, sobre la ruta 66, lugar en donde en ceremonia clásica los simpatizantes, y bajo una nube de talco y nieve, le dijeron un "hasta pronto" carnaval, con la sepultura del diablo que los acompañó durante seis jornadas de celebración.