Un insólito episodio ocurrió en la localidad de Tilcara, cuando familiares se disputaban por un difunto, antes de darle sepultura.
El inusual incidente tuvo lugar ayer entre las 9 y 10 de la mañana, cuando un cortejo fúnebre se dirigía desde la ciudad de San Salvador hasta el pueblo de Juella, para dar entierro al cuerpo de un hombre que hacía pocos días había fallecido.
En esas circunstancias varios vehículos cortaron el tránsito cerca del "monolito" de la localidad tilcareña, y sus ocupantes iniciaron una acalorada discusión con quienes acompañaban el vehículo que transportaba el cajón con el difunto.
Según testigos ocasionales que estaban en el lugar, entre los gritos desaforados se oía que un grupo de personas impedía que el cortejo siguiera su camino hasta el pueblo de Juella, distante a 10 kilómetros de Tilcara para inhumarlo en esa localidad. De inmediato se hizo presente personal de la Seccional 14º de Tilcara para tratar de disuadir el incidente en un momento delicado para sus deudos que seguían discutiendo.
Siete personas resultaron heridas, tres demoradas y varios efectivos también tuvieron que ser asistidos tras la batahola.
En esas circunstancias los incidentes se profundizaron a tal magnitud que el vehículo en que era trasladado el cajón resultó dañado, teniendo que ser trasladado de manera insólita el difunto en una ambulancia del nosocomio local, la cual también resultó dañada.
A causa de estos violentos hechos, trascendió que al menos tres personas fueron demoradas por "ocasionales disturbios en la vía pública" y quedaron alojadas por algunas horas en dicha dependencia policial. Además siete personas resultaron heridas a causa de la gresca que desencadenó en la oposición de un grupo de familiares que no se le dé sepultura en Juella al cuerpo de un hombre que en vida prestara servicio en el hospital de Tilcara. Como así también varios efectivos sufrieron los embates de los descontrolados familiares y tuvieron que ser asistidos.
Finalmente efectivos a cargo de las actuaciones sumariales del insólito episodio, dieron constancia a éste matutino que el cuerpo fue inhumado en el pueblo de Juella, como estaba previsto desde un principio.
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Un insólito episodio ocurrió en la localidad de Tilcara, cuando familiares se disputaban por un difunto, antes de darle sepultura.
El inusual incidente tuvo lugar ayer entre las 9 y 10 de la mañana, cuando un cortejo fúnebre se dirigía desde la ciudad de San Salvador hasta el pueblo de Juella, para dar entierro al cuerpo de un hombre que hacía pocos días había fallecido.
En esas circunstancias varios vehículos cortaron el tránsito cerca del "monolito" de la localidad tilcareña, y sus ocupantes iniciaron una acalorada discusión con quienes acompañaban el vehículo que transportaba el cajón con el difunto.
Según testigos ocasionales que estaban en el lugar, entre los gritos desaforados se oía que un grupo de personas impedía que el cortejo siguiera su camino hasta el pueblo de Juella, distante a 10 kilómetros de Tilcara para inhumarlo en esa localidad. De inmediato se hizo presente personal de la Seccional 14º de Tilcara para tratar de disuadir el incidente en un momento delicado para sus deudos que seguían discutiendo.
Siete personas resultaron heridas, tres demoradas y varios efectivos también tuvieron que ser asistidos tras la batahola.
En esas circunstancias los incidentes se profundizaron a tal magnitud que el vehículo en que era trasladado el cajón resultó dañado, teniendo que ser trasladado de manera insólita el difunto en una ambulancia del nosocomio local, la cual también resultó dañada.
A causa de estos violentos hechos, trascendió que al menos tres personas fueron demoradas por "ocasionales disturbios en la vía pública" y quedaron alojadas por algunas horas en dicha dependencia policial. Además siete personas resultaron heridas a causa de la gresca que desencadenó en la oposición de un grupo de familiares que no se le dé sepultura en Juella al cuerpo de un hombre que en vida prestara servicio en el hospital de Tilcara. Como así también varios efectivos sufrieron los embates de los descontrolados familiares y tuvieron que ser asistidos.
Finalmente efectivos a cargo de las actuaciones sumariales del insólito episodio, dieron constancia a éste matutino que el cuerpo fue inhumado en el pueblo de Juella, como estaba previsto desde un principio.