Un hombre fue condenado ayer a prisión perpetua y otro a 15 años de cárcel por el crimen de un joven asesinado en 2013 cuando realizaba "delivery" de comida a bordo de una moto, en la ciudad de Córdoba, informaron fuentes judiciales.
El fallo unánime de la Cámara Sexta del Crimen cordobesa, integrada con jurados populares, recayó sobre Ángel Cisterna Gilabert (27), alias "Brasita", y Héctor Darío Medrano (26), apodado "Oreja", quienes fueron juzgados por el homicidio de Javier Sona (25).
Gilabert recibió la pena de prisión perpetua como autor de los delitos de "homicidio criminis causa" y "robo calificado por el uso de arma operativa", en tanto Medrano fue sentenciado a 15 años por "homicidio en ocasión de robo, agravado por el uso de arma operativa".
La decisión del tribunal, que dará a conocer los fundamentos de la sentencia en 15 días, coincidió con lo que había pedido en los alegatos el fiscal de Cámara, Marcelo Altamirano; en tanto que el abogado de la familia de la víctima, Carlos Nayi, había requerido perpetua para Gilabert y 22 años de prisión para Medrano.
Tras la lectura del veredicto, familiares de los ahora condenados produjeron incidentes en la sala de audiencia, ubicada en el palacio de los Tribunales II de la capital cordobesa.
Por su parte, Daniel Sona y Patricia Agüero, padres de la víctima, se mostraron satisfechos con el fallo y dijeron que tenían "muchas sensaciones juntas".
El hecho ventilado en el debate ocurrió el 10 de agosto de 2013, cuando Sona repartía sandwiches de lomitos y pizzas, a bordo de una motocicleta, en el barrio Artigas de la capital cordobesa.
Según la acusación, Sona fue interceptado por Gilabert y Medrano, y el primero de ellos lo mató de un balazo mientras que su cómplice le robó 500 pesos que llevaba encima.
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Un hombre fue condenado ayer a prisión perpetua y otro a 15 años de cárcel por el crimen de un joven asesinado en 2013 cuando realizaba "delivery" de comida a bordo de una moto, en la ciudad de Córdoba, informaron fuentes judiciales.
El fallo unánime de la Cámara Sexta del Crimen cordobesa, integrada con jurados populares, recayó sobre Ángel Cisterna Gilabert (27), alias "Brasita", y Héctor Darío Medrano (26), apodado "Oreja", quienes fueron juzgados por el homicidio de Javier Sona (25).
Gilabert recibió la pena de prisión perpetua como autor de los delitos de "homicidio criminis causa" y "robo calificado por el uso de arma operativa", en tanto Medrano fue sentenciado a 15 años por "homicidio en ocasión de robo, agravado por el uso de arma operativa".
La decisión del tribunal, que dará a conocer los fundamentos de la sentencia en 15 días, coincidió con lo que había pedido en los alegatos el fiscal de Cámara, Marcelo Altamirano; en tanto que el abogado de la familia de la víctima, Carlos Nayi, había requerido perpetua para Gilabert y 22 años de prisión para Medrano.
Tras la lectura del veredicto, familiares de los ahora condenados produjeron incidentes en la sala de audiencia, ubicada en el palacio de los Tribunales II de la capital cordobesa.
Por su parte, Daniel Sona y Patricia Agüero, padres de la víctima, se mostraron satisfechos con el fallo y dijeron que tenían "muchas sensaciones juntas".
El hecho ventilado en el debate ocurrió el 10 de agosto de 2013, cuando Sona repartía sandwiches de lomitos y pizzas, a bordo de una motocicleta, en el barrio Artigas de la capital cordobesa.
Según la acusación, Sona fue interceptado por Gilabert y Medrano, y el primero de ellos lo mató de un balazo mientras que su cómplice le robó 500 pesos que llevaba encima.