Los denominados, Zetas han labrado una senda de sangre, brutalidad y mutilaciones a lo largo de todo el norte de
México durante su pelea por el control de rutas de tránsito de drogas hacia
Estados Unidos con el Cártel del
Golfo.
Además del narcotráfico, diversificaron sus actividades criminales entrando en negocios como el paso clandestino de migrantes a Estados Unidos y el secuestro de quienes intentan pasar la frontera, la extorsión a empresas en la zona bajo su control y secuestros a cambio de dinero.
La organización actualmente sigue activa en Nuevo Laredo, en el norte del país, en la frontera con Estados Unidos, en el estado de Veracruz en el Golfo de México y en partes de Centroamérica.
Aunque los arrestos de los hermanos Treviño Morales son significativos, la peligrosa y temida banda se ha convertido en una operación de franquicias y no una organización vertical por lo que sus actividades presumiblemente continuarán a pesar de las capturas realizadas.
Los denominados, Zetas han labrado una senda de sangre, brutalidad y mutilaciones a lo largo de todo el norte de
México durante su pelea por el control de rutas de tránsito de drogas hacia
Estados Unidos con el Cártel del
Golfo.
Además del narcotráfico, diversificaron sus actividades criminales entrando en negocios como el paso clandestino de migrantes a Estados Unidos y el secuestro de quienes intentan pasar la frontera, la extorsión a empresas en la zona bajo su control y secuestros a cambio de dinero.
La organización actualmente sigue activa en Nuevo Laredo, en el norte del país, en la frontera con Estados Unidos, en el estado de Veracruz en el Golfo de México y en partes de Centroamérica.
Aunque los arrestos de los hermanos Treviño Morales son significativos, la peligrosa y temida banda se ha convertido en una operación de franquicias y no una organización vertical por lo que sus actividades presumiblemente continuarán a pesar de las capturas realizadas.