Las centrales sindicales opositoras aseguraron que el paro de ayer "fue contundente", sin precisar el porcentaje de adhesión a la medida de fuerza en demanda de cambios en el pago del impuesto a las Ganancias. Destacaron que si no hay respuesta en abril se realizará otro paro. En una conferencia de prensa encabezada por el líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano; el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, y el secretario de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, se dio a conocer la reivindicación y la organización que hubo para el paro nacional. Moyano admitió que "podemos decir con enorme satisfacción que hemos interpretado el reclamo de la gente, pero es imposible sacar un porcentaje del acatamiento". En una sala colmada por barras de camioneros y de otros sindicatos aliados, Moyano destacó la adhesión de "muchos trabajadores que se plegaron al paro a pesar de que sus organizaciones gremiales no convocaron" a la medida de fuerza.
"Esperamos con humildad y responsabilidad que este reclamo sea interpretado por quienes tienen que dar respuesta", afirmó el secretario general de la CGT disidente quien asimismo consideró que la posibilidad de una futura medida de fuerza de 36 horas para el próximo mes "está más para el sí que para el no".
Los gremialistas dejaron en claro que hay muchas posibilidades que se convoque a una jornada de lucha por 36 horas.
Al ser consultado sobre la posibilidad de un acercamiento con los gremios más afines al Gobierno, Moyano manifestó que "las puertas de la CGT están abiertas para cualquiera que quiera participar de la lucha".
En ese sentido, Luis Barrionuevo agradeció al titular de la CGT, Antonio Caló, porque el líder metalúrgico dio libertad de acción a los trabajadores de su gremio aunque esa central obrera no adhirió al paro de 24 horas propuesto por el sindicalismo opositor.
En una posición ya tomada, el líder gastronómico dijo que "este es el tercer paro que realiza el conjunto del movimiento obrero y en ningún momento el Gobierno acusó recibo".
El titular de la Confederación Argentina del Transporte, Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), señaló que "se ha parado porque hay un malestar general contra este Gobierno y estamos abiertos a un plan de lucha". "No queremos pagar más Ganancias hasta que no graven a otros sectores como la renta financiera", fustigó Schmid. Por su parte, Micheli calificó la huelga como "histórica" y cuestionó al Gobierno Nacional por "aplicar un ajuste contra los trabajadores cuando hay algún problemita económico".
Sobre los piquetes en los principales accesos a la Ciudad de Buenos Aires y en las rutas del país, Micheli salió en defensa de esas acciones.
"Ejercemos el derecho a huelga porque (el Gobierno) cerró el diálogo", aseveró Micheli.
Además, les pidió a quienes quieren ir a trabajar en un día de paro que "piensen en los que menos ganan y en la situación del país", en contraste con el reclamo por el impuesto a las Ganancias que pagan los trabajadores de más altos salarios, eje central del reclamo de ayer.
A pesar de la crítica del titular de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores, Gerónimo "Momo" Venegas, a los gremialistas que no convocaron al paro, la conferencia de prensa finalizó con el grito de la barra: "hay una sola CGT" y la advertencia de que el sindicalismo opositor va a "copar la plaza". No participaron de la conferencia de prensa Roberto Fernández (UTA) y Omar Maturano ( La Fraternidad).
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Las centrales sindicales opositoras aseguraron que el paro de ayer "fue contundente", sin precisar el porcentaje de adhesión a la medida de fuerza en demanda de cambios en el pago del impuesto a las Ganancias. Destacaron que si no hay respuesta en abril se realizará otro paro. En una conferencia de prensa encabezada por el líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano; el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, y el secretario de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, se dio a conocer la reivindicación y la organización que hubo para el paro nacional. Moyano admitió que "podemos decir con enorme satisfacción que hemos interpretado el reclamo de la gente, pero es imposible sacar un porcentaje del acatamiento". En una sala colmada por barras de camioneros y de otros sindicatos aliados, Moyano destacó la adhesión de "muchos trabajadores que se plegaron al paro a pesar de que sus organizaciones gremiales no convocaron" a la medida de fuerza.
"Esperamos con humildad y responsabilidad que este reclamo sea interpretado por quienes tienen que dar respuesta", afirmó el secretario general de la CGT disidente quien asimismo consideró que la posibilidad de una futura medida de fuerza de 36 horas para el próximo mes "está más para el sí que para el no".
Los gremialistas dejaron en claro que hay muchas posibilidades que se convoque a una jornada de lucha por 36 horas.
Al ser consultado sobre la posibilidad de un acercamiento con los gremios más afines al Gobierno, Moyano manifestó que "las puertas de la CGT están abiertas para cualquiera que quiera participar de la lucha".
En ese sentido, Luis Barrionuevo agradeció al titular de la CGT, Antonio Caló, porque el líder metalúrgico dio libertad de acción a los trabajadores de su gremio aunque esa central obrera no adhirió al paro de 24 horas propuesto por el sindicalismo opositor.
En una posición ya tomada, el líder gastronómico dijo que "este es el tercer paro que realiza el conjunto del movimiento obrero y en ningún momento el Gobierno acusó recibo".
El titular de la Confederación Argentina del Transporte, Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), señaló que "se ha parado porque hay un malestar general contra este Gobierno y estamos abiertos a un plan de lucha". "No queremos pagar más Ganancias hasta que no graven a otros sectores como la renta financiera", fustigó Schmid. Por su parte, Micheli calificó la huelga como "histórica" y cuestionó al Gobierno Nacional por "aplicar un ajuste contra los trabajadores cuando hay algún problemita económico".
Sobre los piquetes en los principales accesos a la Ciudad de Buenos Aires y en las rutas del país, Micheli salió en defensa de esas acciones.
"Ejercemos el derecho a huelga porque (el Gobierno) cerró el diálogo", aseveró Micheli.
Además, les pidió a quienes quieren ir a trabajar en un día de paro que "piensen en los que menos ganan y en la situación del país", en contraste con el reclamo por el impuesto a las Ganancias que pagan los trabajadores de más altos salarios, eje central del reclamo de ayer.
A pesar de la crítica del titular de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores, Gerónimo "Momo" Venegas, a los gremialistas que no convocaron al paro, la conferencia de prensa finalizó con el grito de la barra: "hay una sola CGT" y la advertencia de que el sindicalismo opositor va a "copar la plaza". No participaron de la conferencia de prensa Roberto Fernández (UTA) y Omar Maturano ( La Fraternidad).