Estudiantes de La Plata alcanzó los octavos de final de la
Copa Libertadores como escolta de
Atlético Nacional, de Medellín, en el grupo 7, tras vencer en Guayaquil por 2 a 0 a Barcelona, el equipo ecuatoriano homónimo del español en el que su debutante entrenador Gabriel Milito consolidó su ideario futbolero, a partir de haber sido dirigido por Josep Guardiola. Acosta y Carrillo, ambos en el complemento, anotaron los goles.
El comienzo del partido también marcó el inicio del ciclo de
Milito en Estudiantes, quien a pesar del fortísimo respaldo del presidente "pincharrata" Juan Sebastián Verón, llegó a este bautismo profesional con la presión de cargar con una ideología futbolística que va a contrapelo de la historia del club platense.