La Cámara Federal de Casación Penal ratificó ayer al juez Claudio Bonadio al frente de la investigación sobre la firma Hotesur, una empresa de la cual es socia la presidente Cristina Fernández de Kirchner.
Por mayoría y con los votos de Luis María Cabral y Gustavo Hornos, se rechazó la recusación que había presentado Romina Mercado, accionista de la firma Hotesur y sobrina de la jefa de Estado. En tanto, la jueza Ana María Figueroa votó en disidencia, a favor de la recusación.
Bonadio, uno de los jueces más enfrentados con el Gobierno nacional, había sido recusado luego de que allanara la sede de Hotesur en Capital Federal en el marco de la investigación por presuntas irregularidades a raíz de la no presentación de documentación en la Inspección General de Justicia (IGJ).
Además, se investigan presuntas maniobras de lavado de dinero, a raíz de que uno de los hoteles que explota Hotesur en Río Gallegos, Alto Calafate, alquilaría plazas para personal de la firma Valle Mitre, del empresario Lázaro Báez, que en realidad no son ocupadas.
La recusación contra Bonadio fue porque la defensa de Mercado, a cargo del abogado Carlos Beraldi, consideró que el juez incurrió en falta de imparcialidad y actuó de cierta manera guiado por la repercusión mediática del caso, al tratarse de una empresa de la Presidente.
En una audiencia oral que se hizo semanas atrás, la fiscal ante la Casación, Gabriela Baigún, adhirió al pedido de la defensa.
El voto de los jueces
Los jueces postergaron el fallo que se preveía días atrás, y en el medio hubo rumores de que Figueroa habría mantenido reuniones con una figura fuerte del oficialismo, en tanto que Hornos habría hecho lo propio con un alto funcionario judicial.
"El apartamiento de un magistrado del conocimiento de una causa no puede reposar en la mera invocación de causales desprovistas de un mínimo sustento objetivo", sostuvo en su voto Cabral. Ante el argumento de la defensa sobre que Bonadio no les permitía acceder a fotocopiar la causa, Cabral advirtió que son medidas que "resultan susceptibles de reparación".
En su voto, Hornos primero rechazó la recusación que Mercado hizo en su contra y de Cabral, luego de que en distintos medios se filtrara que ambos habían preparado sus votos en favor de Bonadio.
"La recusación formulada por la defensa debe ser rechazada in limine, toda vez que la pretensión de dicha parte no se funda en actitud alguna de los magistrados para con el recusante que pudiera revelar sospecha de parcialidad, sino tan sólo en versiones publicadas por varios medios periodísticos, ajenos a la instancia judicial, en los que se hizo referencia al sentido en el que deliberarían dos de los magistrados intervinientes en la causa", señaló.
También echó por tierra la recusación de la defensa basada en los allanamientos que dispuso el juez. En ese sentido, el camarista recordó que al impulsar la causa, el fiscal Carlos Stornelli había pedido "la incautación de toda la documentación".
"Las críticas ensayadas por la defensa, sobre las cuales apoyó los motivos casatorios esgrimidos en la pieza recursiva y en la audiencia de debate celebrada, se dirigen a cuestionar la validez de los actos procesales dictados por el juez instructor, más no logran demostrar en qué sentido el dictado de las diligencias aludidas le genera un temor fundado y razonable de parcialidad del juez", añadió.
Para Figueroa, que votó en disidencia: "la facultad de apartar a los jueces sospechados de parcialidad es una garantía del justiciable dentro del debido proceso y no un derecho del juez a no ser apartado por causales objetivas".
De esta forma, Bonadio seguirá al frente de la investigación que puede traerle complicaciones a la Presidente en medio de la campaña electoral.
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La Cámara Federal de Casación Penal ratificó ayer al juez Claudio Bonadio al frente de la investigación sobre la firma Hotesur, una empresa de la cual es socia la presidente Cristina Fernández de Kirchner.
Por mayoría y con los votos de Luis María Cabral y Gustavo Hornos, se rechazó la recusación que había presentado Romina Mercado, accionista de la firma Hotesur y sobrina de la jefa de Estado. En tanto, la jueza Ana María Figueroa votó en disidencia, a favor de la recusación.
Bonadio, uno de los jueces más enfrentados con el Gobierno nacional, había sido recusado luego de que allanara la sede de Hotesur en Capital Federal en el marco de la investigación por presuntas irregularidades a raíz de la no presentación de documentación en la Inspección General de Justicia (IGJ).
Además, se investigan presuntas maniobras de lavado de dinero, a raíz de que uno de los hoteles que explota Hotesur en Río Gallegos, Alto Calafate, alquilaría plazas para personal de la firma Valle Mitre, del empresario Lázaro Báez, que en realidad no son ocupadas.
La recusación contra Bonadio fue porque la defensa de Mercado, a cargo del abogado Carlos Beraldi, consideró que el juez incurrió en falta de imparcialidad y actuó de cierta manera guiado por la repercusión mediática del caso, al tratarse de una empresa de la Presidente.
En una audiencia oral que se hizo semanas atrás, la fiscal ante la Casación, Gabriela Baigún, adhirió al pedido de la defensa.
El voto de los jueces
Los jueces postergaron el fallo que se preveía días atrás, y en el medio hubo rumores de que Figueroa habría mantenido reuniones con una figura fuerte del oficialismo, en tanto que Hornos habría hecho lo propio con un alto funcionario judicial.
"El apartamiento de un magistrado del conocimiento de una causa no puede reposar en la mera invocación de causales desprovistas de un mínimo sustento objetivo", sostuvo en su voto Cabral. Ante el argumento de la defensa sobre que Bonadio no les permitía acceder a fotocopiar la causa, Cabral advirtió que son medidas que "resultan susceptibles de reparación".
En su voto, Hornos primero rechazó la recusación que Mercado hizo en su contra y de Cabral, luego de que en distintos medios se filtrara que ambos habían preparado sus votos en favor de Bonadio.
"La recusación formulada por la defensa debe ser rechazada in limine, toda vez que la pretensión de dicha parte no se funda en actitud alguna de los magistrados para con el recusante que pudiera revelar sospecha de parcialidad, sino tan sólo en versiones publicadas por varios medios periodísticos, ajenos a la instancia judicial, en los que se hizo referencia al sentido en el que deliberarían dos de los magistrados intervinientes en la causa", señaló.
También echó por tierra la recusación de la defensa basada en los allanamientos que dispuso el juez. En ese sentido, el camarista recordó que al impulsar la causa, el fiscal Carlos Stornelli había pedido "la incautación de toda la documentación".
"Las críticas ensayadas por la defensa, sobre las cuales apoyó los motivos casatorios esgrimidos en la pieza recursiva y en la audiencia de debate celebrada, se dirigen a cuestionar la validez de los actos procesales dictados por el juez instructor, más no logran demostrar en qué sentido el dictado de las diligencias aludidas le genera un temor fundado y razonable de parcialidad del juez", añadió.
Para Figueroa, que votó en disidencia: "la facultad de apartar a los jueces sospechados de parcialidad es una garantía del justiciable dentro del debido proceso y no un derecho del juez a no ser apartado por causales objetivas".
De esta forma, Bonadio seguirá al frente de la investigación que puede traerle complicaciones a la Presidente en medio de la campaña electoral.