En las imágenes puede verse cómo este
perro lamenta la partida de su dueño y todos los días acude hasta el cementerio de Cañada de Gómez, en la provincia de
Santa Fe, donde esta semana fue enterrado para estar junto a él. Se queda en el lugar largas horas esperando que otra vez vuelva a su vida. L gente que acude al cementerio a visitar a sus difuntos, le llevan agua y comida para que el can pueda alimentarse. La nota se viralizó vía Facebook a través de una mujer que se estremeció por la imagen.