Los investigadores del crimen de Chiara Páez, la adolescente cuyo cadáver fue hallado el domingo 3 de mayo enterrado en el patio de la casa de su novio en la ciudad santafesina de Rufino, secuestraron ayer el teléfono del padre del chico detenido como autor del asesinato, un policía al que el homicida le confesó el crimen. Fuentes judiciales dijeron que el fiscal de Rufino a cargo del caso, Mauricio Clavero, ordenó el secuestro del teléfono celular del padre del adolescente detenido con la intención de establecer horarios en los que el chico se comunicó con él para contarle lo sucedido.
El hombre, un sargento de la policía de Santa Fe que presta servicios en la comisaría local, es investigado actualmente por la Dirección de Asuntos Internos de la fuerza de seguridad santafesina.
A través de un comunicado, Clavero remarcó que "el hombre siempre prestó colaboración con todo lo que se le solicitó". Fuentes judiciales dijeron, además, que los pesquisas allanaron en las últimas horas la casa de la madre del padrastro del detenido, donde se secuestraron "elementos relacionados con lo que se conoce popularmente como Macumba".
Un comunicado del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe, precisa que el allanamiento fue llevado a cabo por personal policial a partir de un pedido del fiscal Mauricio Clavero, en una casa ubicada en la calle Galán y San Lorenzo, de Rufino, localidad ubicada a 270 kilómetros al sudoeste de Rosario.
El fiscal Clavero imputó ayer a la madre del menor acusado del crimen y a su pareja, ambos por ser "partícipes necesarios" de los delitos de "homicidio agravado" por el vínculo y femicidio, y por aborto no consentido por la víctima. Fuentes judiciales adelantaron que el próximo lunes a las 9 se realizará una nueva audiencia imputativa en la que la jueza de la Investigación Penal Preparatoria, Lorena Garini, deberá resolver si mantiene la prisión preventiva a los dos acusados mayores de edad. Chiara Páez fue encontrada enterrada en el fondo de la casa familiar del joven el domingo pasado.
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Los investigadores del crimen de Chiara Páez, la adolescente cuyo cadáver fue hallado el domingo 3 de mayo enterrado en el patio de la casa de su novio en la ciudad santafesina de Rufino, secuestraron ayer el teléfono del padre del chico detenido como autor del asesinato, un policía al que el homicida le confesó el crimen. Fuentes judiciales dijeron que el fiscal de Rufino a cargo del caso, Mauricio Clavero, ordenó el secuestro del teléfono celular del padre del adolescente detenido con la intención de establecer horarios en los que el chico se comunicó con él para contarle lo sucedido.
El hombre, un sargento de la policía de Santa Fe que presta servicios en la comisaría local, es investigado actualmente por la Dirección de Asuntos Internos de la fuerza de seguridad santafesina.
A través de un comunicado, Clavero remarcó que "el hombre siempre prestó colaboración con todo lo que se le solicitó". Fuentes judiciales dijeron, además, que los pesquisas allanaron en las últimas horas la casa de la madre del padrastro del detenido, donde se secuestraron "elementos relacionados con lo que se conoce popularmente como Macumba".
Un comunicado del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe, precisa que el allanamiento fue llevado a cabo por personal policial a partir de un pedido del fiscal Mauricio Clavero, en una casa ubicada en la calle Galán y San Lorenzo, de Rufino, localidad ubicada a 270 kilómetros al sudoeste de Rosario.
El fiscal Clavero imputó ayer a la madre del menor acusado del crimen y a su pareja, ambos por ser "partícipes necesarios" de los delitos de "homicidio agravado" por el vínculo y femicidio, y por aborto no consentido por la víctima. Fuentes judiciales adelantaron que el próximo lunes a las 9 se realizará una nueva audiencia imputativa en la que la jueza de la Investigación Penal Preparatoria, Lorena Garini, deberá resolver si mantiene la prisión preventiva a los dos acusados mayores de edad. Chiara Páez fue encontrada enterrada en el fondo de la casa familiar del joven el domingo pasado.