Las políticas públicas sobre el desarrollo de la quinua en los países andinos, las experiencias en torno a su crecimiento y comercialización, las tecnologías y potenciales aplicaciones fueron algunas variedades de aspectos que se abordaron en el V Congreso Mundial y II Simposio Internacional de Granos Andinos que culminó con las conferencias, paneles y exposición, y finalizará hoy con una visita a campo y producciones.
inicia sesión o regístrate.
Las políticas públicas sobre el desarrollo de la quinua en los países andinos, las experiencias en torno a su crecimiento y comercialización, las tecnologías y potenciales aplicaciones fueron algunas variedades de aspectos que se abordaron en el V Congreso Mundial y II Simposio Internacional de Granos Andinos que culminó con las conferencias, paneles y exposición, y finalizará hoy con una visita a campo y producciones.
La puesta en común de experiencias, políticas y visiones en torno al cultivo de la quinua en los países productores como en los de Europa, fueron abordados en 199 trabajos, conferencias, exposiciones y reuniones de trabajo con la participación de grupos de productores y de especialistas.
Las tecnologías en desarrollo necesarias para la producción campesina o familiar, las necesidad de preservar semillas, la comercialización y valor agregado, fueron temas eje de distintas presentaciones y una de las necesidades comunes a la región andina, pese al desigual desarrollo y producciones de Perú, Chile y norte argentino.
Así lo reflejó uno de los expositores del panel de ayer fue el peruano Angel Mujica, al exponer sobre los retos en la macro y microeconomía de la quinua, quien se refirió al cultivo, su variedad, los problemas que atraviesa y analizó su situación. Explicó que entre los retos se encuentran el uso racional del agua, suelo, y fertilizantes; producción y uso de semillas de calidad genética y agronómica, mayor investigación y generación de nuevas variedades adecuadas a nuevas condiciones agroclimáticas, comercializar productos con valor agregado y no sólo materia prima, búsqueda de nuevos mercados, y promoción de su consumo dada su riqueza alimenticia.
Entre las exposiciones presentadas en el salón "Martin Fierro" del Complejo Educativo "José Hernández" estuvo la de Didier Bazile, consultor francés en semillas y recursos fitogenéticos e investigador del Cirad (Centro de Cooperación Internacional en Investigación Agronómica para el Desarrollo), que trabaja en cooperación internacional y experto en la Food and Agriculture Organization (FAO), quien abordó sobre la "Dinámica de la biodiversidad de la quinua respecto al acceso a los recursos fitogenéticos: desafíos para una expansión a nivel global".
Explicó "cómo la expansión del cultivo de quinoa a nivel mundial necesita un acceso a los recursos fitogenéticos de los países andinos para expandirse, y cómo proteger las variedades de semillas locales andinas en este proceso".
También abordó cómo reaccionan los gobiernos de los países para mantener el derecho de los agricultores de sus semillas y permitir la innovación para crear nuevas diversidades para otros contextos fuera de las zonas andinas. Explicó que es importante trabajar en un lugar neutro como la FAO por entender que hay posibilidad de ver todas las alternativas en torno a la diversidad y cómo respetar la soberanía de cada país sobre su diversidad,
"Lo que estoy tratando de hacer es mejorar la trazabilidad dentro de los flujos de semillas a nivel mundial, de ver que cada país, cada persona que quiere experimentar la quinua fuera de la zona andina respete una transparencia en su acceso a las semillas, y va a compartir sus resultados de innovación con sus países andinos, sin limitar el derecho de reproducir estas semillas para los agricultores", precisó el investigador francés.
De hecho, explicó que el tema de su investigación es la conservación in situ con los campesinos de sus variedades locales, trabajando el mejoramiento de las semillas con ellos mismos a través de un programa de selección y mejoramiento participativo. Trabaja en un programa en la región central de Chile para conservar las variedades tradicionales del ecotipo del nivel del mar con una cooperativa de semillas.
La idea de conservar in situ las semillas apunta a buscar la producción de las variedades locales, mantener el uso de estas para que los campesinos sigan utilizándolas en el futuro, con lo cual se trabaja con mercados y conexiones para desarrollo de agro turismo para procurarles ingresos cuando cultivan.
Recordó que hay interés en África, Europa, Asia, con lo cual estimó que el foco en la semilla es en todos los tiempos pero en los últimos 50 años las leyes de semillas tienen restricciones para intercambio entre productores, por lo que planteó que le gustaría volver al intercambio libre sin que algunas empresas tengan derecho apropiarse de los recursos fitogenéticos, y a la vez mantener el derechos de los agricultores a usar las semillas.
Se sucedieron así innumerables presentaciones y sirvió de vinculación para cientos de productores.
El cierre estaba previsto para hoy a través de un viaje a campo visitando algunas producciones en Rodero, la escuela granja de Humahuaca, el Ipaf de Inta en Hornillos, la escuela Gastronómica de Maimará.