El Consejo de la Magistratura con mayoría del voto kirchnerista logró quitar ayer al juez Luis María Cabral, uno de los más críticos del Gobierno nacional, de la Cámara Federal de Casación Penal.
Lo hizo por siete votos contra cuatro y designó como reemplazante de su subrogancia en la Sala I de Casación al conjuez Claudio Vázquez.
El plenario designó, además de Vázquez, a los conjueces Roberto Boico y Norberto Frontini, quienes reemplazarán a los magistrados Gustavo Hornos y Ana María Figueroa, respectivamente, que son titulares del tribunal, pero ocupaban dos vocalías vacantes.
Las designaciones de jueces subrogantes están relacionadas con la cobertura de cargos vacantes en el máximo tribunal penal de la Nación, cuyos concursos se encuentran en trámite en el Consejo de la Magistratura.
Cabral venía siendo cuestionado desde hace años por sus pares, al considerar que su subrogancia era irregular, y ahora por mayoría fue corrido de la Cámara Federal de Casación Penal.
El juez Cabral es uno de los tres magistrados que el próximo martes debía pronunciarse, junto con sus colegas Juan Carlos Gemignani y Ana María Figueroa, sobre si el Memorándum con Irán por el caso Amia era o no constitucional.
Además, Casación es el tribunal que define las causas por hechos de corrupción de los funcionarios públicos, de narcotráfico y por delitos de lesa humanidad.
Fuentes judiciales señalaron que Cabral apelará mediante una demanda judicial la decisión del Consejo.
Las fuentes aseguraron que la subrogancia de Cabral "era sin término" y no vencía el 30 de junio, como argumentaron los consejeros que lo removieron, por lo que no había motivos para ser removido a partir de ayer.
Durante el plenario, reunido con carácter "extraordinario", el secretario del Justicia, Julián Álvarez, argumentó que la medida obedecía a "razones estadísticas" y "ante un nuevo sistema institucional", para cubrir esos cargos vacantes con conjueces. A la vez, sostuvo que la propia jueza Figueroa, presidente del tribunal, expresó que "no puede hacerse cargo de dos vocalías a la vez" y que Cabral era miembro del Consejo de la Magistratura.
Álvarez argumentó que se trata de una Sala que "en términos estadísticos resolvió el 19% del total de causas que tiene en trámite", menor en comparación a las estadísticas de las otras salas que rondan el 25 y 29 % de resolución.
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El Consejo de la Magistratura con mayoría del voto kirchnerista logró quitar ayer al juez Luis María Cabral, uno de los más críticos del Gobierno nacional, de la Cámara Federal de Casación Penal.
Lo hizo por siete votos contra cuatro y designó como reemplazante de su subrogancia en la Sala I de Casación al conjuez Claudio Vázquez.
El plenario designó, además de Vázquez, a los conjueces Roberto Boico y Norberto Frontini, quienes reemplazarán a los magistrados Gustavo Hornos y Ana María Figueroa, respectivamente, que son titulares del tribunal, pero ocupaban dos vocalías vacantes.
Las designaciones de jueces subrogantes están relacionadas con la cobertura de cargos vacantes en el máximo tribunal penal de la Nación, cuyos concursos se encuentran en trámite en el Consejo de la Magistratura.
Cabral venía siendo cuestionado desde hace años por sus pares, al considerar que su subrogancia era irregular, y ahora por mayoría fue corrido de la Cámara Federal de Casación Penal.
El juez Cabral es uno de los tres magistrados que el próximo martes debía pronunciarse, junto con sus colegas Juan Carlos Gemignani y Ana María Figueroa, sobre si el Memorándum con Irán por el caso Amia era o no constitucional.
Además, Casación es el tribunal que define las causas por hechos de corrupción de los funcionarios públicos, de narcotráfico y por delitos de lesa humanidad.
Fuentes judiciales señalaron que Cabral apelará mediante una demanda judicial la decisión del Consejo.
Las fuentes aseguraron que la subrogancia de Cabral "era sin término" y no vencía el 30 de junio, como argumentaron los consejeros que lo removieron, por lo que no había motivos para ser removido a partir de ayer.
Durante el plenario, reunido con carácter "extraordinario", el secretario del Justicia, Julián Álvarez, argumentó que la medida obedecía a "razones estadísticas" y "ante un nuevo sistema institucional", para cubrir esos cargos vacantes con conjueces. A la vez, sostuvo que la propia jueza Figueroa, presidente del tribunal, expresó que "no puede hacerse cargo de dos vocalías a la vez" y que Cabral era miembro del Consejo de la Magistratura.
Álvarez argumentó que se trata de una Sala que "en términos estadísticos resolvió el 19% del total de causas que tiene en trámite", menor en comparación a las estadísticas de las otras salas que rondan el 25 y 29 % de resolución.