La joven
Linnie Ikeda tiene 24 años y viven
Hawaii, su caso ahora es mundialmente conocido por su extravagancia. Es que Ikeda llora sangre, tiene problemas en la lengua y moretones en diferentes zonas del cuerpo.
La chica lleva un registro de estas anomalías, anotando la fecha, hora y el tipo de padecimiento en un cuaderno. Además acudió a más de treinta médicos. El diagnóstico con el que se quedó fue el "Síndrome de Gardner-Diamond"o "Síndrome de autosensibilización eritrocitaria" y "Púrpura psicógena".
La enfermedad trae consigo la aparición inusual de
dolorosas lesiones subcutáneas (equimosis) en la cara, tronco y extremidades, seguidas de inflamación, enrojecimiento de la piel (eritemas) y edemas progresivos. Ataca la mayoría de las veces a las mujeres y, por lo general, suele vincularse con el estrés y/o a ciertos trastornos psíquicos (depresión, ansiedad, etc.). Aunque no hay ninguna cura concreta se aborda al paciente desde distintas disciplinas.
La joven
Linnie Ikeda tiene 24 años y viven
Hawaii, su caso ahora es mundialmente conocido por su extravagancia. Es que Ikeda llora sangre, tiene problemas en la lengua y moretones en diferentes zonas del cuerpo.
La chica lleva un registro de estas anomalías, anotando la fecha, hora y el tipo de padecimiento en un cuaderno. Además acudió a más de treinta médicos. El diagnóstico con el que se quedó fue el "Síndrome de Gardner-Diamond"o "Síndrome de autosensibilización eritrocitaria" y "Púrpura psicógena".
La enfermedad trae consigo la aparición inusual de
dolorosas lesiones subcutáneas (equimosis) en la cara, tronco y extremidades, seguidas de inflamación, enrojecimiento de la piel (eritemas) y edemas progresivos. Ataca la mayoría de las veces a las mujeres y, por lo general, suele vincularse con el estrés y/o a ciertos trastornos psíquicos (depresión, ansiedad, etc.). Aunque no hay ninguna cura concreta se aborda al paciente desde distintas disciplinas.