El tributo cargado de emoción y de recuerdos de alumnos reunió a docentes, ex docentes, funcionarios y familiares quienes lo recordaron desde su aspecto humano destacando las cualidades por la que es tan recordado, y como docente y profesional ponderando sus acciones a favor del establecimiento y los alumnos.
"Es una gran emoción y un gran orgullo por este legado que está dejando en todo el ámbito educativo, a sus alumnos del profesorado Tello, del nivel primario, del Polivalente de Arte que ha dedicado toda su vida al colegio. Para él era su segundo hogar", explicó Sandra Marcela Martínez, hermana del profesor.
Recordó por ello que el profesor tenía una muy buena relación con la comunidad educativa, desde sus alumnos, colegas, asumiendo que fue un sueño concretado el lograr el edificio, por lo que destacó su dedicación no sólo con el Polivalente sino en toda la docencia inclusive en sus alumnos que estaba por recibirse de docente. También lo recordó en su faceta personal destacando que desde chico supo destacarse siendo abanderado del Colegio El Salvador y en el secundario, además de su vocación "por ser maestro".
En el acto, que se inició con la lectura de la imposición del nombre al colegio otorgada por el Ministerio de Educación de la provincia, en la voz de la docente Beatriz Brega, y posteriormente de la ley aprobada en Legislatura en octubre del año pasado, por lo que destacó la iniciativa de alumnos, docentes y comunidad educativa al solicitarlo durante un desfile de carrozas poco después de su fallecimiento el 27 de septiembre.
El pedido obedecía a un reconocimiento no sólo por la valoración que se le daba sino en reconocimiento a la gestión por el edificio que se entregara en el 2004 y que el próximo 7 cumplirá 41 años que también motivó el acto. De hecho, la directora Silvia Zambrano, recordó en este sentido que implicó no sólo un reconocimiento a su trayectoria sino al trabajo realizado para gestionar el edificio escolar durante años.
"Alquilábamos una casa en la calle Belgrano, desde su creación pasó por distintos lugares, hasta llegar a esto y también con ayuda del profesor Martínez se ha logrado que se vayan obteniendo mejoras", precisó.
Ponderó por ello los avances logrados en torno al edificio, un acompañamiento que llevaba desde poco después de la creación del colegio, y posteriormente que implicó un crecimiento de su matrícula a los 800 alumnos con que cuenta actualmente. Ellos cursan en dos especialidades, Danzas folclóricas argentinas y Artes visuales, por lo que destacaron también las obras gestionadas por el profesor Martínez, la cancha inaugurada hace tres años, además de los baños y vestuarios , que se sumaron a otras mejoras para los sectores de danzas en otros pese a que aún faltan otras.
El acto contó con alumnos, abanderados e incluyó el descubrimiento de tres placas recordatorias, una en manos de funcionarios, otra de docentes y de familiares, situadas al lado del escenario, y entrega de obsequio de la familia al colegio.
El tributo cargado de emoción y de recuerdos de alumnos reunió a docentes, ex docentes, funcionarios y familiares quienes lo recordaron desde su aspecto humano destacando las cualidades por la que es tan recordado, y como docente y profesional ponderando sus acciones a favor del establecimiento y los alumnos.
"Es una gran emoción y un gran orgullo por este legado que está dejando en todo el ámbito educativo, a sus alumnos del profesorado Tello, del nivel primario, del Polivalente de Arte que ha dedicado toda su vida al colegio. Para él era su segundo hogar", explicó Sandra Marcela Martínez, hermana del profesor.
Recordó por ello que el profesor tenía una muy buena relación con la comunidad educativa, desde sus alumnos, colegas, asumiendo que fue un sueño concretado el lograr el edificio, por lo que destacó su dedicación no sólo con el Polivalente sino en toda la docencia inclusive en sus alumnos que estaba por recibirse de docente. También lo recordó en su faceta personal destacando que desde chico supo destacarse siendo abanderado del Colegio El Salvador y en el secundario, además de su vocación "por ser maestro".
En el acto, que se inició con la lectura de la imposición del nombre al colegio otorgada por el Ministerio de Educación de la provincia, en la voz de la docente Beatriz Brega, y posteriormente de la ley aprobada en Legislatura en octubre del año pasado, por lo que destacó la iniciativa de alumnos, docentes y comunidad educativa al solicitarlo durante un desfile de carrozas poco después de su fallecimiento el 27 de septiembre.
El pedido obedecía a un reconocimiento no sólo por la valoración que se le daba sino en reconocimiento a la gestión por el edificio que se entregara en el 2004 y que el próximo 7 cumplirá 41 años que también motivó el acto. De hecho, la directora Silvia Zambrano, recordó en este sentido que implicó no sólo un reconocimiento a su trayectoria sino al trabajo realizado para gestionar el edificio escolar durante años.
"Alquilábamos una casa en la calle Belgrano, desde su creación pasó por distintos lugares, hasta llegar a esto y también con ayuda del profesor Martínez se ha logrado que se vayan obteniendo mejoras", precisó.
Ponderó por ello los avances logrados en torno al edificio, un acompañamiento que llevaba desde poco después de la creación del colegio, y posteriormente que implicó un crecimiento de su matrícula a los 800 alumnos con que cuenta actualmente. Ellos cursan en dos especialidades, Danzas folclóricas argentinas y Artes visuales, por lo que destacaron también las obras gestionadas por el profesor Martínez, la cancha inaugurada hace tres años, además de los baños y vestuarios , que se sumaron a otras mejoras para los sectores de danzas en otros pese a que aún faltan otras.
El acto contó con alumnos, abanderados e incluyó el descubrimiento de tres placas recordatorias, una en manos de funcionarios, otra de docentes y de familiares, situadas al lado del escenario, y entrega de obsequio de la familia al colegio.