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Se resistió a un robo y mató a dos delincuentes | Buenos Aires, Policía Federal, Quilmes, asaltado

Martes, 09 de junio de 2015 00:00
QUILMES / EL DOMICILIO EN DONDE EL GRUPO DE DELINCUENTES PRETENDIÓ ROBAR CON LA MODALIDAD DE ENTRADERA.
Un suboficial de la Policía Federal mató a dos hombres e hirió a otros dos cuando resistió a los tiros mientras era asaltado junto a su esposa y sus hijos en su casa del partido bonaerense de Quilmes, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió el domingo, cerca de las 21.30, en una casa de la calle Pedro Elustondo al 100 de ese partido del sur del Conurbano y los investigadores aseguraron que tanto el efectivo, como su esposa y sus hijos resultaron ilesos.
Según las fuentes policiales, el episodio comenzó cuando el suboficial acababa de ingresar su Ford Escort color bordó en el garaje de su casa y se aprestaba a cerrar el portón, momento en el cual varios hombres descendieron de un Volkswagen Gol Power y lo amenazaron con armas, con intenciones de robo.
"Él estaba vestido con ropa de civil, porque había estado de franco y de paseo con sus familiares. Eran cuatro hombres los que bajaron a los gritos y lo obligaron a ingresar a la casa a los empujones", dijo a Télam un jefe policial que participa de la investigación del hecho.
La fuente precisó que "adentro lo estaba esperando su esposa y sus hijos chiquitos, quienes se sorprendieron al ver a los ladrones con armas en sus manos".
Una vez en el interior de la casa, los asaltantes comenzaron a revolver violentamente todos los ambientes en busca de dinero, electrodomésticos y objetos de valor, los cuales iban guardando en bolsos.
Sin embargo, el policía aprovechó un descuido de los ladrones y extrajo su arma reglamentaria, una pistola Browning calibre 9 milímetros, y dio la voz de alto.
"En ese momento se originó un fuerte tiroteo", relató el investigador, quien explicó que dentro de la casa, en la puerta de una de las habitaciones, quedó muerto uno de los ladrones.
Ante esa situación, los ladrones huyeron y, detrás de ellos, salió el suboficial de la PFA.
El tiroteo continuó en la calle y otro de los asaltantes cayó muy malherido a los pocos metros y murió antes de que pudiera ser atendido por los médicos que llegaron al lugar.
En tanto, los otros dos ladrones escaparon de la casa a bordo del mismo auto en el que habían llegado, en el cual aparentemente estaba un quinto cómplice al volante.
Pocos minutos después, un hombre con varios impactos de bala en su cuerpo fue llevado por dos jóvenes a una sala de emergencias ubicada a pocas cuadras del lugar donde se produjo el tiroteo.
Las fuentes policiales aseguraron que, luego, se determinó en base al relato de testigos que ese hombre había sido uno de los partícipes del asalto a la casa del policía y fue identificado como Leandro Rodríguez.
Los investigadores aclararon que ese delincuente fue trasladado de urgencia al Hospital Zonal de Quilmes, donde fue operado y en la tarde de ayer permanecía internado bajo custodia policial, en grave estado.
En tanto, los dos hombres que llevaron a la sala de emergencias a su cómplice huyeron, aunque luego fueron detenidos por personal del Comando de Prevención Comunitaria de Quilmes cuando caminaban por la intersección de las calles Andrés Baranda e Islas Malvinas.
Uno de esos detenidos, de 16 años, presentaba una herida de bala en un pie, por lo que debió ser trasladado a un centro asistencial para su atención, en tanto el otro fue identificado como Franco Gómez (19).

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Un suboficial de la Policía Federal mató a dos hombres e hirió a otros dos cuando resistió a los tiros mientras era asaltado junto a su esposa y sus hijos en su casa del partido bonaerense de Quilmes, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió el domingo, cerca de las 21.30, en una casa de la calle Pedro Elustondo al 100 de ese partido del sur del Conurbano y los investigadores aseguraron que tanto el efectivo, como su esposa y sus hijos resultaron ilesos.
Según las fuentes policiales, el episodio comenzó cuando el suboficial acababa de ingresar su Ford Escort color bordó en el garaje de su casa y se aprestaba a cerrar el portón, momento en el cual varios hombres descendieron de un Volkswagen Gol Power y lo amenazaron con armas, con intenciones de robo.
"Él estaba vestido con ropa de civil, porque había estado de franco y de paseo con sus familiares. Eran cuatro hombres los que bajaron a los gritos y lo obligaron a ingresar a la casa a los empujones", dijo a Télam un jefe policial que participa de la investigación del hecho.
La fuente precisó que "adentro lo estaba esperando su esposa y sus hijos chiquitos, quienes se sorprendieron al ver a los ladrones con armas en sus manos".
Una vez en el interior de la casa, los asaltantes comenzaron a revolver violentamente todos los ambientes en busca de dinero, electrodomésticos y objetos de valor, los cuales iban guardando en bolsos.
Sin embargo, el policía aprovechó un descuido de los ladrones y extrajo su arma reglamentaria, una pistola Browning calibre 9 milímetros, y dio la voz de alto.
"En ese momento se originó un fuerte tiroteo", relató el investigador, quien explicó que dentro de la casa, en la puerta de una de las habitaciones, quedó muerto uno de los ladrones.
Ante esa situación, los ladrones huyeron y, detrás de ellos, salió el suboficial de la PFA.
El tiroteo continuó en la calle y otro de los asaltantes cayó muy malherido a los pocos metros y murió antes de que pudiera ser atendido por los médicos que llegaron al lugar.
En tanto, los otros dos ladrones escaparon de la casa a bordo del mismo auto en el que habían llegado, en el cual aparentemente estaba un quinto cómplice al volante.
Pocos minutos después, un hombre con varios impactos de bala en su cuerpo fue llevado por dos jóvenes a una sala de emergencias ubicada a pocas cuadras del lugar donde se produjo el tiroteo.
Las fuentes policiales aseguraron que, luego, se determinó en base al relato de testigos que ese hombre había sido uno de los partícipes del asalto a la casa del policía y fue identificado como Leandro Rodríguez.
Los investigadores aclararon que ese delincuente fue trasladado de urgencia al Hospital Zonal de Quilmes, donde fue operado y en la tarde de ayer permanecía internado bajo custodia policial, en grave estado.
En tanto, los dos hombres que llevaron a la sala de emergencias a su cómplice huyeron, aunque luego fueron detenidos por personal del Comando de Prevención Comunitaria de Quilmes cuando caminaban por la intersección de las calles Andrés Baranda e Islas Malvinas.
Uno de esos detenidos, de 16 años, presentaba una herida de bala en un pie, por lo que debió ser trasladado a un centro asistencial para su atención, en tanto el otro fue identificado como Franco Gómez (19).