El Papa Francisco cumplió ayer las últimas dos actividades en su tercer día de visita a suelo boliviano.
A las 9, hora local, se reunió con internos de la cárcel de Palmasola, la más grande y violenta de Bolivia.
Dos hombres y una mujer le describieron sus penas y pidieron interceder por ellos ante las autoridades.
Cientos de presos, acompañados por sus familiares dieron la bienvenida al Pontífice, quien besó a los niños y se tomó el tiempo para saludar a la mayor cantidad de reos y familiares en el patio de un pabellón abierto del penal de Santa Cruz.
En ese lugar, algunos de los niños portaban globos amarillos y varios adultos levantaron grandes letras, también amarillas, que formaban el mensaje "Bienvenido Papa Francisco a Palmasola".
Posteriormente, el máximo pontífice visitó la Iglesia de La Santa Cruz, donde se reunió con obispos en la Conferencia Episcopal durante una hora, además de recibir a un grupo de comunicadores. Dejando de lado el protocolo, convocó a los sorprendidos periodistas que desde horas tempranas aguardaban su llegada.
Desde allí partió el papamóvil rumbo al aeropuerto internacional de Viru Viru, desde donde despegó rumbo a Paraguay para continuar con su gira latinoamericana.
Tras la partida del pontífice, el presidente boliviano Evo Morales, junto al alcalde de Santa Cruz, Percy Fernández, y el canciller David Choquehuanca, valoró la visita de Papa Francisco a su país.
Es que en el contexto de las intenciones del oriente boliviano de separarse del Estado plurinacional declarando su autonomía, Francisco no sólo llevó un mensaje de paz y unión, sino que también con su sencillez demostró que ante las diferencias sociales y económicas solamente está el ideal de la gente.
Antes de su despedida, el máximo pontífice agradeció a todo el pueblo boliviano, que vivió jornadas históricas e inolvidables. Quedará en cada ciudadano del vecino país cumplir con los preceptos del Papa relacionados a la igualdad.
Para El Tribuno de Jujuy queda la satisfacción de la tarea cumplida, al ser el único medio de la provincia presente en tan significativa visita.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
El Papa Francisco cumplió ayer las últimas dos actividades en su tercer día de visita a suelo boliviano.
A las 9, hora local, se reunió con internos de la cárcel de Palmasola, la más grande y violenta de Bolivia.
Dos hombres y una mujer le describieron sus penas y pidieron interceder por ellos ante las autoridades.
Cientos de presos, acompañados por sus familiares dieron la bienvenida al Pontífice, quien besó a los niños y se tomó el tiempo para saludar a la mayor cantidad de reos y familiares en el patio de un pabellón abierto del penal de Santa Cruz.
En ese lugar, algunos de los niños portaban globos amarillos y varios adultos levantaron grandes letras, también amarillas, que formaban el mensaje "Bienvenido Papa Francisco a Palmasola".
Posteriormente, el máximo pontífice visitó la Iglesia de La Santa Cruz, donde se reunió con obispos en la Conferencia Episcopal durante una hora, además de recibir a un grupo de comunicadores. Dejando de lado el protocolo, convocó a los sorprendidos periodistas que desde horas tempranas aguardaban su llegada.
Desde allí partió el papamóvil rumbo al aeropuerto internacional de Viru Viru, desde donde despegó rumbo a Paraguay para continuar con su gira latinoamericana.
Tras la partida del pontífice, el presidente boliviano Evo Morales, junto al alcalde de Santa Cruz, Percy Fernández, y el canciller David Choquehuanca, valoró la visita de Papa Francisco a su país.
Es que en el contexto de las intenciones del oriente boliviano de separarse del Estado plurinacional declarando su autonomía, Francisco no sólo llevó un mensaje de paz y unión, sino que también con su sencillez demostró que ante las diferencias sociales y económicas solamente está el ideal de la gente.
Antes de su despedida, el máximo pontífice agradeció a todo el pueblo boliviano, que vivió jornadas históricas e inolvidables. Quedará en cada ciudadano del vecino país cumplir con los preceptos del Papa relacionados a la igualdad.
Para El Tribuno de Jujuy queda la satisfacción de la tarea cumplida, al ser el único medio de la provincia presente en tan significativa visita.