El consumo de drogas en la provincia es una realidad y la recuperación continúa siendo un desafío en los distintos organismos que se dedican a ello. Aseguran que las más visibles en torno a la demanda son paco y pasta base. La visión de recuperarlos en su entorno refuerza la idea de la atención de centros de día, mientras una coordinación nueva apunta a integrar otros estamentos para ampliar la atención y no reducirla a los centros especializados.
A pocos días de haberse recordado el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas es bueno conocer las diversas opciones de las casas terapéuticas y centros de rehabilitación, algunas de trayectoria como el Centro de Asistencia y Orientación de las Adicciones "El Umbral" y el Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe". Mientras que la nueva Coordinación constituye una muestra de la nueva política basada en la Ley de Salud Mental.
Laila Quintar, referente de "El Umbral" explicó que el panorama se modificó repentinamente desde que comenzó a funcionar hace 18 años cuando tenían consultas reducidas por consumo experimental de marihuana y muy esporádicas de cocaína, y en 2003 cambió la demanda por pasta base y paco, y eventualmente por marihuana y mucho menos por cocaína.
"Lo que se ha instalado en nuestra provincia, y no sólo aquí sino en el país, es el consumo de pasta base, que la podemos considerar una droga dura", precisó Quintar.
Esta caracterización la fundamentó en que se trata de una droga muy adictiva, difícil de abordar con un tratamiento sin una previa internación. Por ello precisó que "El Umbral" trata en la mayoría de los casos de implementar el tratamiento ambulatorio inicialmente al considerar que "es la verdadera manera de salir de las adicciones", por entender que si los adictos viven en un contexto, en un lugar y con relaciones determinadas, deben salir del consumo con disciplina, voluntad y tratamiento sin salir de su ámbito.
"Lo que ocurre con las internaciones la mayoría de las veces es que están tres meses a un año sin consumir por la institucionalización, las actividades y porque no la tienen a mano. Pero cuando salen vuelven a la misma familia, barrio, los amigos, saben dónde está el dealer y vuelven a caer", precisó Quintar.
Entonces plantea que la recuperación del consumo es más óptimo abordarlo en forma ambulatoria en su mismo contexto, por entender que es ahí donde se prueba el verdadero deseo de salir del consumo.
Explicó que muchos de los adictos han perdido otro horizonte, dejaron de trabajar, estudiar y a su familia, por lo que estimó clave una verdadera decisión para dejar de consumir sino reinciden.
Sostuvo que muchos, tras salir de internación se encuentran con ese tipo de realidad, de pérdidas y antes de reingresar al tratamiento ambulatorio ya volvieron a consumir.
Recordó que la mayoría comienza a consumir en la pubertad, de los 15 a 17 años pero se mantiene inclusive hasta pasados los 30 años y reinciden en tratamientos e internaciones. "No hay una voluntad y decisión como para soportar la angustia de las cosas que fueron perdiendo en el camino", precisó.
De hecho explicó que muchos no llegan por propia voluntad sino inducidos por familiares, padres o esposa, para acatar una orden judicial que los deriva o bien de los colegios.
Razones de por qué consumen
Según la referente del Centro "El Umbral", Laila Quintar, en la experiencia del tratamiento de los pacientes de esa institución "lo que está en la superficie es que siempre comienzan a consumir por curiosidad, porque no consiguieron otra cosa y le ofrecieron, los amigos, el grupo. Un tratamiento trata de ir de la superficie a lo profundo para encontrar cuáles son las razones por las cuáles aparece la angustia que los lleva a permanecer en el consumo", precisó.
Es que entiende que algunos prueban y deciden que no va con ellos o no les gusta pero también hay otros que deciden continuar consumiendo.
"Una predisposición"
Sin embargo la profesional explicó que no es adicto el que quiere sino el que tiene una estructura y predisposición a esto.
Y los factores de riesgo de llegar a la adicción son similares para el consumo de alcohol, la delincuencia, la soledad, la angustia, la marginación y la falta de proyectos en principio.
Sin embargo Quintar explicó que no se puede encasillar y asociar la adicción a los bajos recursos, a las villas afirmando que son los únicos, porque existen adictos que poseen una familia que los contiene, una posición económica que les permiten un proyecto y una salida.
Y es que estimó que se trata de una problemática universal y que está más vinculada a la estructura psíquica de cada uno.
"El factor desencadenante del por qué hoy hay muchas drogas, es que en esta época hay una demanda a consumir fuerte, por algo se dice que es una sociedad de consumo, todo esto lleva a una angustia grande, las diferencias, la exclusión, la oferta es para todos pero en realidad no lo es, es una época que genera mucha angustia. Y la angustia es el camino, y como es insoportable se buscan recursos para salir y uno de ellos son las sustancias", explicó Quintar.
El caso del Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe", en los Valles
En el Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe", ubicado en el paraje Coronel Arias entre Monterrico y Perico, la internación es uno de los servicios que brinda para la recuperación de pacientes de distintas adicciones aunque también cuenta con centro de día y ambulatorio, para jóvenes de 13 a 21 años.
Actualmente está en proceso de ampliación para duplicar su capacidad, a fin de incorporar en agosto a pacientes adultos.
Cuentan ahora con 12 camas de internación, centro de día para jóvenes al que asisten otra docena de pacientes, de 9 a 18, mientras el consultorio ambulatorio es externo. Se asiste tanto a adictos como a sus familiares.
"En general las consultas que nos realizan tienen que ver con consumo de alcohol, marihuana y pasta base, no quita que pueda haber consultas por cocaína y otras. Las edades varían desde los 13 años en adelante, en internación estamos únicamente con chicos de 13 a 21 años pero en otras modalidades hay personas de más edad", precisó José Manzur, director del mismo.
El médico explicó que la mayor demanda es de los familiares para saber cómo actuar, con lo cual se les da herramientas para que el adicto llegue, mientras la menor es la consulta espontánea, y además derivados de puestos de salud, o del Juzgado de Menores.
En la primera etapa se trabaja la adherencia terapéutica y luego en la toma de conciencia y el contexto.
Trabaja con distintos barrios como el Centro de Salud de barrio El Chingo. El contacto para los interesados en consultar es el 4211300.
En la provincia Red Operativa y Ejecutora
La Coordinación de Asistencia Integral de Adicciones y otras Patologías funciona hace tres meses.
Otro tipo de asistencia vigente en Jujuy es la de la Red Operativa y Ejecutora Provincial para el abordaje de las adicciones impulsada por la cartera de salud que busca aglutinar organismos vinculados a la asistencia y atención de la temática tendiente a mejorar la contención.
Se trata de un proceso de políticas y estrategias para la prevención, promoción, investigación, tratamiento, rehabilitación y reinserción social del usuario de drogas y su familia, en coordinación de medidas.
En ese marco se creó la Coordinación de Asistencia Integral de Adicciones y otras patologías del Ministerio de Salud que funciona hace tres meses buscando promover la atención y abordaje de los equipos de salud y salud mental. Trabaja bajo la premisa que las adicciones se resuelven a nivel comunitario, aplicando la Ley de Salud Mental, por lo que buscan que todas las instituciones de salud y salud mental puedan abordar y recibir los casos, y direccionar en casos de tratamiento a otros especializados de ser necesario.
También funcionan la Casa Educativa Terapéutica en Alto Comedero, en la órbita de Niñez, Adolescencia y Familia, tendiente a brindar contención y tratamiento en adicciones en esta Capital, además de otras en Palpalá y La Quiaca.
La recuperación y el tratamiento ambulatorio
La referente del Centro "El Umbral" Laila Quintar explicó que quienes llegan a la recuperación suelen ser aquéllos que cuentan con la contención familiar que se encarga de traerlos, y si es que está muy atrapado en el consumo y recluido en una habitación consideró que es difícil que puedan ir una o dos veces a consulta, con lo cual recién se implementa la internación en el Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe".
En 2º instancia y si cumple con los requisitos para evitar que les sea fácil volver a su casa se decide internación en La Rioja, Salta, Entre Ríos, Buenos Aires, vía Ministerio de Salud.
El éxito en la recuperación, según explicó, depende si el paciente se puede sostener posteriormente a la internación en un tratamiento ambulatorio, de lo contrario cuando vuelven al contexto suelen retomar el consumo. Y en otros casos cuando salen de la internación no vuelven al ambulatorio.
Por ello Quintar consideró que se debería implementar un seguimiento con las instituciones donde están internados de modo que mantengan una información constante y permanente del estado de los jóvenes.
En el caso del consumo de pasta base y paco estimó que al ser duras les cuesta mucho salir pero depende del tiempo que llevan consumiendo y la desestructuración que tienen. Es que entiende que estas sustancias están más a la mano a la hora de consumir, y generaría una problemática de la compulsión.
Pueden ingresar para tratamiento en "El Umbral" desde los 13 años, y es que en un principio solían ser derivados, y actualmente se realizan diariamente entre 5 y 8 admisiones por día, cuyo tratamiento depende de cada uno. Algunos llevan diez años en tratamiento y se procura que sigan en contacto más allá del turno, de modo que puedan volver.
Allí atienden cuatro psicólogos y tres asistentes sociales, y cuentan con jóvenes que realizan tesis y pasantías supervisadas, además de estudiantes de la Universidad Católica de Santiago del Estero.
El contacto para los interesados en consultar es el 4249524.
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El consumo de drogas en la provincia es una realidad y la recuperación continúa siendo un desafío en los distintos organismos que se dedican a ello. Aseguran que las más visibles en torno a la demanda son paco y pasta base. La visión de recuperarlos en su entorno refuerza la idea de la atención de centros de día, mientras una coordinación nueva apunta a integrar otros estamentos para ampliar la atención y no reducirla a los centros especializados.
A pocos días de haberse recordado el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas es bueno conocer las diversas opciones de las casas terapéuticas y centros de rehabilitación, algunas de trayectoria como el Centro de Asistencia y Orientación de las Adicciones "El Umbral" y el Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe". Mientras que la nueva Coordinación constituye una muestra de la nueva política basada en la Ley de Salud Mental.
Laila Quintar, referente de "El Umbral" explicó que el panorama se modificó repentinamente desde que comenzó a funcionar hace 18 años cuando tenían consultas reducidas por consumo experimental de marihuana y muy esporádicas de cocaína, y en 2003 cambió la demanda por pasta base y paco, y eventualmente por marihuana y mucho menos por cocaína.
"Lo que se ha instalado en nuestra provincia, y no sólo aquí sino en el país, es el consumo de pasta base, que la podemos considerar una droga dura", precisó Quintar.
Esta caracterización la fundamentó en que se trata de una droga muy adictiva, difícil de abordar con un tratamiento sin una previa internación. Por ello precisó que "El Umbral" trata en la mayoría de los casos de implementar el tratamiento ambulatorio inicialmente al considerar que "es la verdadera manera de salir de las adicciones", por entender que si los adictos viven en un contexto, en un lugar y con relaciones determinadas, deben salir del consumo con disciplina, voluntad y tratamiento sin salir de su ámbito.
"Lo que ocurre con las internaciones la mayoría de las veces es que están tres meses a un año sin consumir por la institucionalización, las actividades y porque no la tienen a mano. Pero cuando salen vuelven a la misma familia, barrio, los amigos, saben dónde está el dealer y vuelven a caer", precisó Quintar.
Entonces plantea que la recuperación del consumo es más óptimo abordarlo en forma ambulatoria en su mismo contexto, por entender que es ahí donde se prueba el verdadero deseo de salir del consumo.
Explicó que muchos de los adictos han perdido otro horizonte, dejaron de trabajar, estudiar y a su familia, por lo que estimó clave una verdadera decisión para dejar de consumir sino reinciden.
Sostuvo que muchos, tras salir de internación se encuentran con ese tipo de realidad, de pérdidas y antes de reingresar al tratamiento ambulatorio ya volvieron a consumir.
Recordó que la mayoría comienza a consumir en la pubertad, de los 15 a 17 años pero se mantiene inclusive hasta pasados los 30 años y reinciden en tratamientos e internaciones. "No hay una voluntad y decisión como para soportar la angustia de las cosas que fueron perdiendo en el camino", precisó.
De hecho explicó que muchos no llegan por propia voluntad sino inducidos por familiares, padres o esposa, para acatar una orden judicial que los deriva o bien de los colegios.
Razones de por qué consumen
Según la referente del Centro "El Umbral", Laila Quintar, en la experiencia del tratamiento de los pacientes de esa institución "lo que está en la superficie es que siempre comienzan a consumir por curiosidad, porque no consiguieron otra cosa y le ofrecieron, los amigos, el grupo. Un tratamiento trata de ir de la superficie a lo profundo para encontrar cuáles son las razones por las cuáles aparece la angustia que los lleva a permanecer en el consumo", precisó.
Es que entiende que algunos prueban y deciden que no va con ellos o no les gusta pero también hay otros que deciden continuar consumiendo.
"Una predisposición"
Sin embargo la profesional explicó que no es adicto el que quiere sino el que tiene una estructura y predisposición a esto.
Y los factores de riesgo de llegar a la adicción son similares para el consumo de alcohol, la delincuencia, la soledad, la angustia, la marginación y la falta de proyectos en principio.
Sin embargo Quintar explicó que no se puede encasillar y asociar la adicción a los bajos recursos, a las villas afirmando que son los únicos, porque existen adictos que poseen una familia que los contiene, una posición económica que les permiten un proyecto y una salida.
Y es que estimó que se trata de una problemática universal y que está más vinculada a la estructura psíquica de cada uno.
"El factor desencadenante del por qué hoy hay muchas drogas, es que en esta época hay una demanda a consumir fuerte, por algo se dice que es una sociedad de consumo, todo esto lleva a una angustia grande, las diferencias, la exclusión, la oferta es para todos pero en realidad no lo es, es una época que genera mucha angustia. Y la angustia es el camino, y como es insoportable se buscan recursos para salir y uno de ellos son las sustancias", explicó Quintar.
El caso del Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe", en los Valles
En el Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe", ubicado en el paraje Coronel Arias entre Monterrico y Perico, la internación es uno de los servicios que brinda para la recuperación de pacientes de distintas adicciones aunque también cuenta con centro de día y ambulatorio, para jóvenes de 13 a 21 años.
Actualmente está en proceso de ampliación para duplicar su capacidad, a fin de incorporar en agosto a pacientes adultos.
Cuentan ahora con 12 camas de internación, centro de día para jóvenes al que asisten otra docena de pacientes, de 9 a 18, mientras el consultorio ambulatorio es externo. Se asiste tanto a adictos como a sus familiares.
"En general las consultas que nos realizan tienen que ver con consumo de alcohol, marihuana y pasta base, no quita que pueda haber consultas por cocaína y otras. Las edades varían desde los 13 años en adelante, en internación estamos únicamente con chicos de 13 a 21 años pero en otras modalidades hay personas de más edad", precisó José Manzur, director del mismo.
El médico explicó que la mayor demanda es de los familiares para saber cómo actuar, con lo cual se les da herramientas para que el adicto llegue, mientras la menor es la consulta espontánea, y además derivados de puestos de salud, o del Juzgado de Menores.
En la primera etapa se trabaja la adherencia terapéutica y luego en la toma de conciencia y el contexto.
Trabaja con distintos barrios como el Centro de Salud de barrio El Chingo. El contacto para los interesados en consultar es el 4211300.
En la provincia Red Operativa y Ejecutora
La Coordinación de Asistencia Integral de Adicciones y otras Patologías funciona hace tres meses.
Otro tipo de asistencia vigente en Jujuy es la de la Red Operativa y Ejecutora Provincial para el abordaje de las adicciones impulsada por la cartera de salud que busca aglutinar organismos vinculados a la asistencia y atención de la temática tendiente a mejorar la contención.
Se trata de un proceso de políticas y estrategias para la prevención, promoción, investigación, tratamiento, rehabilitación y reinserción social del usuario de drogas y su familia, en coordinación de medidas.
En ese marco se creó la Coordinación de Asistencia Integral de Adicciones y otras patologías del Ministerio de Salud que funciona hace tres meses buscando promover la atención y abordaje de los equipos de salud y salud mental. Trabaja bajo la premisa que las adicciones se resuelven a nivel comunitario, aplicando la Ley de Salud Mental, por lo que buscan que todas las instituciones de salud y salud mental puedan abordar y recibir los casos, y direccionar en casos de tratamiento a otros especializados de ser necesario.
También funcionan la Casa Educativa Terapéutica en Alto Comedero, en la órbita de Niñez, Adolescencia y Familia, tendiente a brindar contención y tratamiento en adicciones en esta Capital, además de otras en Palpalá y La Quiaca.
La recuperación y el tratamiento ambulatorio
La referente del Centro "El Umbral" Laila Quintar explicó que quienes llegan a la recuperación suelen ser aquéllos que cuentan con la contención familiar que se encarga de traerlos, y si es que está muy atrapado en el consumo y recluido en una habitación consideró que es difícil que puedan ir una o dos veces a consulta, con lo cual recién se implementa la internación en el Centro de Rehabilitación "Vicente Arroyabe".
En 2º instancia y si cumple con los requisitos para evitar que les sea fácil volver a su casa se decide internación en La Rioja, Salta, Entre Ríos, Buenos Aires, vía Ministerio de Salud.
El éxito en la recuperación, según explicó, depende si el paciente se puede sostener posteriormente a la internación en un tratamiento ambulatorio, de lo contrario cuando vuelven al contexto suelen retomar el consumo. Y en otros casos cuando salen de la internación no vuelven al ambulatorio.
Por ello Quintar consideró que se debería implementar un seguimiento con las instituciones donde están internados de modo que mantengan una información constante y permanente del estado de los jóvenes.
En el caso del consumo de pasta base y paco estimó que al ser duras les cuesta mucho salir pero depende del tiempo que llevan consumiendo y la desestructuración que tienen. Es que entiende que estas sustancias están más a la mano a la hora de consumir, y generaría una problemática de la compulsión.
Pueden ingresar para tratamiento en "El Umbral" desde los 13 años, y es que en un principio solían ser derivados, y actualmente se realizan diariamente entre 5 y 8 admisiones por día, cuyo tratamiento depende de cada uno. Algunos llevan diez años en tratamiento y se procura que sigan en contacto más allá del turno, de modo que puedan volver.
Allí atienden cuatro psicólogos y tres asistentes sociales, y cuentan con jóvenes que realizan tesis y pasantías supervisadas, además de estudiantes de la Universidad Católica de Santiago del Estero.
El contacto para los interesados en consultar es el 4249524.