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Alimentos para limpiar y fortalecer las arterias | alimentos, antioxidantes, enfermedades cardiovasculares, ensaladas

Sabado, 25 de julio de 2015 13:12
EL AJO RESULTA UN ALIMENTO QUE LIMPIA.
Revisa tu tensión de forma regular y no olvides hacerte pruebas periódicas para controlar el nivel de colesterol.
Las enfermedades cardiovasculares se llevan cada año la vida de miles de personas en todo el mundo. El origen está casi siempre en la aterosclerosis, que es, en realidad, una variedad de arteriosclerosis.
Las arterias se endurecen debido a la presencia de grasa en forma de placas y a otras sustancias dañinas, a la hipertensión, a las inflamaciones. Dolencias que suelen cursar en silencio y de forma asintomática hasta que aparece el infarto de miocardio.
Es vital cuidar la salud de las arterias, sobre todo si se tiene antecedentes genéticos o si ha llegado a la menopausia.
En el caso de las mujeres, los estrógenos han actuado como protectores frente a la arterioesclerosis, pero a partir de los 55 años y debido a los cambios hormonales, sufren un riesgo más elevado frente a este tipo de dolencias.
El jugo de granada: Consumir de forma regular jugo de granada, ayudar a disfrutar de una mejor salud cardíaca, y a reducir la incidencia tanto de la aterosclerosis, como de la arteriosclerosis. Ayuda a limpiar las arterias, reduciendo además el estrés oxidativo.
El jugo de granada reduce la proteína quimiotáctica, un tipo de químico que origina la inflamación de las arterias. Además evita que se acumulen grasas en los músculos cardíacos.
La palta o aguacate:A pesar de ser un alimento calórico, debe ser consumido con moderación y equilibrio.
Las palta son ricos en esas grasas capaces de evitar la oxidación del organismo y que las placas de grasa se adhieran a las arterias.
El ajo: Es uno de los mejores antibióticos naturales que existen y, a su vez, es un tratamiento ideal para cuidar cada día la salud del corazón.
El ajo es rico en antioxidantes y ayuda a combatir el colesterol malo o LDL, y a elevar el bueno. El secreto está en tomar cada día un diente de ajo con un vaso de agua.
La manzana: Para que la manzana cuide el corazón y las arterias se debe consumirla con piel. Es en la piel donde se encuentra la pectina en un nivel más elevado, así como la fibra, que ayudarán a su vez a reducir el colesterol.
Tampoco hay que olvidar que las manzanas son ricas en flavonoides, muy necesarios para reducir las inflamaciones y evitar el peligroso endurecimiento de las arterias.
Los frutos secos: Se puede consumir entre 4 o 5 nueces diarias, avellanas, pistachos, anacardosà Los frutos secos son ricos en ácidos grasos omega 3, necesarios para cuidar el corazón y reducir el colesterol malo.
El aceite de oliva: El aceite prensado en frío es aquel que guarda las mismas características biológicas que tenía cuando se encontraba de forma natural, es decir, a partir de la semilla o el fruto.
El aceite de oliva se obtiene del olivo, de la pulpa de su fruta. Lo que llega hasta al consumo debe ser "la perfecta sustancia vegetal", elaborada de la forma más natural posible.
Se vigila la temperatura para que no supere nunca los 40ºC y, así, se respete la estabilidad molecular de los ácidos grasos.
Gracias a este proceso natural y a ese prensado en frío el aceite de oliva es un tipo de grasa muy saludable para el corazón y para proteger las arterias.
Las semillas de sésamo: tiene grandes beneficios. Añádelas de forma natural en los desayunos o ensaladas porque, además de ser adecuadas para reducir el dolor de artritis, actúan como grandes cardioprotectores, muy adecuados para prevenir la aterosclerosis.

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Revisa tu tensión de forma regular y no olvides hacerte pruebas periódicas para controlar el nivel de colesterol.
Las enfermedades cardiovasculares se llevan cada año la vida de miles de personas en todo el mundo. El origen está casi siempre en la aterosclerosis, que es, en realidad, una variedad de arteriosclerosis.
Las arterias se endurecen debido a la presencia de grasa en forma de placas y a otras sustancias dañinas, a la hipertensión, a las inflamaciones. Dolencias que suelen cursar en silencio y de forma asintomática hasta que aparece el infarto de miocardio.
Es vital cuidar la salud de las arterias, sobre todo si se tiene antecedentes genéticos o si ha llegado a la menopausia.
En el caso de las mujeres, los estrógenos han actuado como protectores frente a la arterioesclerosis, pero a partir de los 55 años y debido a los cambios hormonales, sufren un riesgo más elevado frente a este tipo de dolencias.
El jugo de granada: Consumir de forma regular jugo de granada, ayudar a disfrutar de una mejor salud cardíaca, y a reducir la incidencia tanto de la aterosclerosis, como de la arteriosclerosis. Ayuda a limpiar las arterias, reduciendo además el estrés oxidativo.
El jugo de granada reduce la proteína quimiotáctica, un tipo de químico que origina la inflamación de las arterias. Además evita que se acumulen grasas en los músculos cardíacos.
La palta o aguacate:A pesar de ser un alimento calórico, debe ser consumido con moderación y equilibrio.
Las palta son ricos en esas grasas capaces de evitar la oxidación del organismo y que las placas de grasa se adhieran a las arterias.
El ajo: Es uno de los mejores antibióticos naturales que existen y, a su vez, es un tratamiento ideal para cuidar cada día la salud del corazón.
El ajo es rico en antioxidantes y ayuda a combatir el colesterol malo o LDL, y a elevar el bueno. El secreto está en tomar cada día un diente de ajo con un vaso de agua.
La manzana: Para que la manzana cuide el corazón y las arterias se debe consumirla con piel. Es en la piel donde se encuentra la pectina en un nivel más elevado, así como la fibra, que ayudarán a su vez a reducir el colesterol.
Tampoco hay que olvidar que las manzanas son ricas en flavonoides, muy necesarios para reducir las inflamaciones y evitar el peligroso endurecimiento de las arterias.
Los frutos secos: Se puede consumir entre 4 o 5 nueces diarias, avellanas, pistachos, anacardosà Los frutos secos son ricos en ácidos grasos omega 3, necesarios para cuidar el corazón y reducir el colesterol malo.
El aceite de oliva: El aceite prensado en frío es aquel que guarda las mismas características biológicas que tenía cuando se encontraba de forma natural, es decir, a partir de la semilla o el fruto.
El aceite de oliva se obtiene del olivo, de la pulpa de su fruta. Lo que llega hasta al consumo debe ser "la perfecta sustancia vegetal", elaborada de la forma más natural posible.
Se vigila la temperatura para que no supere nunca los 40ºC y, así, se respete la estabilidad molecular de los ácidos grasos.
Gracias a este proceso natural y a ese prensado en frío el aceite de oliva es un tipo de grasa muy saludable para el corazón y para proteger las arterias.
Las semillas de sésamo: tiene grandes beneficios. Añádelas de forma natural en los desayunos o ensaladas porque, además de ser adecuadas para reducir el dolor de artritis, actúan como grandes cardioprotectores, muy adecuados para prevenir la aterosclerosis.

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