La semana fue pródiga en acontecimientos políticos, típico de un proceso electoral en marcha. Y como todo comienza a estar relacionado con todo, y cada vez más intensamente, es imposible separar el devenir nacional de las derivaciones en el ámbito local. Tucumán –o por llamarlo como corresponde, el "escándalo Tucumán"- fue la vedette de las noticias. Todo comenzó el día de los comicios, con las tremendas irregularidades detectadas, que aún siguen apareciendo a medida que el lentísimo escrutinio avanza, y pasó por las siempre inoportunas declaraciones apresuradas en la misma noche de las elecciones, de candidatos tucumanos, precandidatos presidenciales, fiscales, jueces electorales y una pueblada que se repitió durante cuatro días en la Plaza Independencia, alentada por desdichadas manifestaciones de las autoridades y una represión policial que hace muchos años no se veía. Luego vinieron expresiones a favor y en contra de la anulación del acto electoral, y todo lo cerraron, o pretendieron hacerlo, de un lado la oposición y del otro la Presidente de la Nación. La "opo" cerrando filas detrás de la demanda de un nuevo sistema electoral electrónico para el 25 de Octubre. Es un pedido absurdo y abstracto: en cuarenta días es imposible que se instale un soft en cada una de las 95 mesas de votación, aunque se alquilen equipos en Brasil o en EE.UU. como sugirieron algunos. Totalmente inviable cuando en el propio Jujuy –por ejemplo- hay enormes zonas en sombra donde internet y las conexiones de los sistemas informáticos llegan horriblemente o no llegan. Era un pedido a sabiendas que era irrealizable. Por su parte Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, pretendiendo clausurar la discusión, le dijo a la oposición que lo que hacen con tanto jaleo es poner en duda el sistema democrático, cosa que jamás ocurrió. Por el contrario, lo que se pretende es fortalecer el sistema democrático, evitando que lo de Tucumán (urnas quemadas, represión, urnas con más votos que votantes, urnas vacías, telegramas adulterados, cargas del correo sospechadas de fraude, etc. etc.) se convierta en moneda corriente y de curso legal, como ocurre con muchas cosas que sí conspiran contra la calidad institucional del sistema. Aunque no hay un final cerrado todavía, la victoria del candidato Juan Manzur del FPV parece clara, pero estigmatizada de origen, su gestión asoma con una necesidad de legitimación que deberá ser prioridad, apenas asuma. En el espejo de Tucumán se miran las elecciones que vienen en las Provincias y en la Nación. Y los candidatos, sufren o disfrutan del momento.
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La semana fue pródiga en acontecimientos políticos, típico de un proceso electoral en marcha. Y como todo comienza a estar relacionado con todo, y cada vez más intensamente, es imposible separar el devenir nacional de las derivaciones en el ámbito local. Tucumán –o por llamarlo como corresponde, el "escándalo Tucumán"- fue la vedette de las noticias. Todo comenzó el día de los comicios, con las tremendas irregularidades detectadas, que aún siguen apareciendo a medida que el lentísimo escrutinio avanza, y pasó por las siempre inoportunas declaraciones apresuradas en la misma noche de las elecciones, de candidatos tucumanos, precandidatos presidenciales, fiscales, jueces electorales y una pueblada que se repitió durante cuatro días en la Plaza Independencia, alentada por desdichadas manifestaciones de las autoridades y una represión policial que hace muchos años no se veía. Luego vinieron expresiones a favor y en contra de la anulación del acto electoral, y todo lo cerraron, o pretendieron hacerlo, de un lado la oposición y del otro la Presidente de la Nación. La "opo" cerrando filas detrás de la demanda de un nuevo sistema electoral electrónico para el 25 de Octubre. Es un pedido absurdo y abstracto: en cuarenta días es imposible que se instale un soft en cada una de las 95 mesas de votación, aunque se alquilen equipos en Brasil o en EE.UU. como sugirieron algunos. Totalmente inviable cuando en el propio Jujuy –por ejemplo- hay enormes zonas en sombra donde internet y las conexiones de los sistemas informáticos llegan horriblemente o no llegan. Era un pedido a sabiendas que era irrealizable. Por su parte Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, pretendiendo clausurar la discusión, le dijo a la oposición que lo que hacen con tanto jaleo es poner en duda el sistema democrático, cosa que jamás ocurrió. Por el contrario, lo que se pretende es fortalecer el sistema democrático, evitando que lo de Tucumán (urnas quemadas, represión, urnas con más votos que votantes, urnas vacías, telegramas adulterados, cargas del correo sospechadas de fraude, etc. etc.) se convierta en moneda corriente y de curso legal, como ocurre con muchas cosas que sí conspiran contra la calidad institucional del sistema. Aunque no hay un final cerrado todavía, la victoria del candidato Juan Manzur del FPV parece clara, pero estigmatizada de origen, su gestión asoma con una necesidad de legitimación que deberá ser prioridad, apenas asuma. En el espejo de Tucumán se miran las elecciones que vienen en las Provincias y en la Nación. Y los candidatos, sufren o disfrutan del momento.
Sufrimientos y esfuerzos
Daniel Scioli lo debe estar sufriendo. Es probablemente y paradójicamente, el hombre que padece mucho más de lo que goza de los triunfos electorales parciales que va obteniendo en las PASO y en las distintas provincias. Ocurre que ha recibido golpes que parecieran hechos a medida de los éxitos que su imagen y su candidatura logran. Algunos impensados como las terribles inundaciones de Buenos Aires, o como el asesinato del joven militante radical Ariel Velásquez en Jujuy, y que la propia Presidente metió en la agenda política nacional, el caso Tucumán, otros como las permanentes señales de alerta del dólar, la situación financiera internacional, el paro del campo, los reclamos durísimos de las economías regionales a través de la CAME, situaciones de las que debe hacerse cargo, por el sólo hecho de ser el candidato del oficialismo. Y también está el tironeo interno: mientras desde el PJ –el gobernador sanjuanino José Gioja y su grupo Gestar, le reclaman "peronizar" más la campaña, y que insista con que si es presidente cambiará todo lo que haya que cambiar, desde el planeta K le exigen más fuerte apego al modelo, al punto de arrancarle la definición de que el desarrollo debe lograrse desde la competitividad y no desde la devaluación. Para colmo, en medio de ese panorama las impresentables declaraciones "misóginas y retrógradas" de la senadora tucumana Beatriz Rojkés de Alperovich o cualquier expresión del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández sobre el tema Tucumán, tampoco lo ayudan a Scioli a enfrentar los embates que sufre en la arena política. Y con Scioli, lo padecen todos los gobernadores y candidatos del Frente para la Victoria, que en los próximos dos meses, tienen que disciplinar sus tropas, presentar listas de candidatos, organizar sus procesos electorales, y acertar en las campañas camino a Octubre. El gobernador bonaerense lo sabe, y guapea y enfrenta las adversidades con un estoicismo encomiable.
Alegrías y riesgos
Para la oposición tampoco es sencillo. Corroer las victorias de Scioli, y su posicionamiento al frente de las encuestas, sondeos y preferencias, es una tentación que les quita el sueño. Pero si todos los temas planteados que usan como materia prima de sus ataques, y se agotan en denuncias y chicanas sin tener la contrapartida de proyectos claros y comprensibles por la gente, estarán escupiendo para arriba con los enormes y desagradables riesgos que ello traería inexorablemente. Mauricio Macri súbitamente moderado, se avino a compartir mesas con Sergio Massa, súbitamente beneficiado por el escenario general. Margarita Stolbizer y un desdibujado Sanz, aprovechan para acompañar, aunque sea subidos al último vagón del convoy. Y así, corriendo de atrás, sueñan con saltar la tapia del 25 de Octubre con una performance que los deposite una segunda vuelta y en un cabeza a cabeza con el Frente para la Victoria. Claro, no pueden equivocarse y no sólo eso: no deben exagerar, ni cargosear al electorado con sus ataques, por también la gente termina hartándose de los ensañamientos, y entonces, automáticamente, el atacado se convierte en la víctima que recibe el respaldo solidario de las multitudes. En Jujuy, Eduardo Alfredo Fellner y Gerardo Morales, ya lo saben. Y con toda la data y la experiencia a su disposición, elaboran los próximos movimientos, ahora que, poco a poco, el tablero de ajedrez de Octubre, se va completando con las piezas elegidas.
Noticias de la "opo"
El jueves GM anunció su lanzamiento formal como candidato a Gobernador. Como el anuncio no iba a tomar a nadie por sorpresa, el senador eligió el golpe de efecto de un importante acto público, como hace mucho tiempo no realizaba un partido político en la ciudad. Como único orador, ofreció desvivirse por lograr la paz social y convocó a los jujeños a recuperar la cultura del trabajo y el orgullo de ser jujeños de libre pensamiento, virtudes que él considera nublados por el clientelismo. Compartió su palco con toda la dirigencia del FCJ. Así acomodó parte del tablero. Al día siguiente, el peronismo que integra el Frente Cambia Jujuy, convocó a otro tradicional encuentro de dirigentes de ese sector, donde tampoco sorprendió con la proclamación del nombre de quien se integrará a la fórmula como candidato a vicegobernador, el ex diputado nacional y actual Secretario General a cargo de la Defensoría del Pueblo de la Nación, el contador Carlos Guillermo Haquim, de quien ya se conocía por filtraciones previas la aclamación en el plenario. Horas antes, el FCJ había cerrado un sinfín especulaciones confirmando la candidatura Intendente de San Salvador de Jujuy de Raúl "Chuli" Jorge. Denunció y despreció así las versiones que indicaban una fuerte ofensiva judicial del oficialismo para bloquear esa reelección basada en impedimentos de la propia Carta Orgánica Municipal. "Si quieren batalla legal, la tendrán y la perderán" decían entusiasmados los chulistas de la primera hora. Y los de última hora también. Así, con Morales/Haquim y Raúl Jorge, están ubicadas las piezas principales, y ahora tanto UCR, PRO como el peronismo massista, armarán cada uno sus listas de diputados y concejales para disputar los ejecutivos, y, de ser posible, armar sus mayorías legislativas. En cada intendencia y comisión municipal, se dará el trabajo de consensuar listas o acordar mecanismos, durante esta semana.
Noticias del oficialismo
El lunes, EAF, que había movido primero anunciando a su candidato a vicegobernador Guillermo Jenefes, hizo otro movimiento fuerte: les mostró a los capitalinos a Walter Barrionuevo como candidato a Intendente. El ex vicegobernador y gobernador y actual senador comenzó a trabajar. Se diferenciará de arranque: "No quiero sedes por todos lados. La sede de mi trabajo es el Partido Justicialista" definió, y en la semana comenzó a atender a dirigentes, punteros y aspirantes en una extensa jornada. Los peronistas que pasaron frente a él y a la mesa donde además estuvieron el vicepresidente primero y el segundo del PJ; Rubén Rivarola y Eduardo Alderete, dejaron más quejas y facturas pendientes que halagos-. Pero tampoco fue sorpresa: WBB sabía que no sería fácil, y que muchos de los compañeros, esperaban esta oportunidad desde hace mucho tiempo. "Ahora, que están escuchados y contenidos", dijo una fuente al término del primer encuentro, "viene entonces la etapa de la movilización y el trabajo en cada barrio", confió. Mientras tanto, el FPV, también organiza la conformación de sus listas. Aseguran fuentes generalmente informadas, que habría tres listas de diputados provinciales, una de ellas, directamente armada por EAF y otras dos, compitiendo también con la imprescindible bendición del jefe, como las listas colectoras en los municipios, donde también armarán sus espacios buscando apoyar –de ser posible- a un mismo candidato a intendente. La aparición estratégica y necesaria del socio político del FPV, el Frente Unidos y Organizados, será decisiva. Las tropas de la diputada Milagro Amalia Ángela Sala Leyton de Noro, acompañarían a esos candidatos a intendentes consensuados, a cambio de una lista propia de concejales, y en también de llevar su propia lista de diputados provinciales en las boletas del oficialismo. La jefa tupaquera –y candidata consagrada al Parlaur- que no pierde esta vez a ningún legislador, y que tendría ante sí un excelente negocio en términos políticos, confía más que nunca en su gente y en su capacidad de organización y movilización. Lo demostró hace unas horas, en el tradicional festival del Dia del Niño que su organización barrial Tupac Amaru, realiza cada año. "Más de ciento cincuenta mil juguetes para chicos jujeños, significaron para nosotros, la adhesión de decenas miles de familias que acompañaron la fiesta" se ufanaba el sábado entre un show de fuegos artificiales, una reconocida militante y dirigente tupaquera, y agregaba: "Y esto no es por el año electoral. La gente sabe que lo venimos haciendo desde mucho antes que "la Flaca" se meta en política".
Próximos pasos
Los próximos días serán claves para el éxito o el fracaso de las aspiraciones políticas jujeñas. No sólo, como se demostró, influenciarán de manera notable los movimientos de los referentes nacionales, sino que en la Provincia, es muy probable que gane no quien acierte más, sino el que se equivoque menos. En esto, como se dijo, contará cada nombre, cada lugar en las listas, cada aliado que se sume o se reste.En el Frente para la Victoria, por ejemplo esperan repetir el acuerdo con el grupo de FORJA y los radicales disidentes que cruzaron el cerco antes de las PASO. Este sector, que recibió la tonificante visita del jefe nacional y subsecretario general de la Presidencia, Gustavo López, asegura que en los quince lugares donde trabajó para las primarias, hizo notar su presencia. Y ahora, esperan ser convocados por el fellnerismo, para conversar "en serio" de los tiempos que se vienen. En tanto, en el Frente Cambia Jujuy, se recibió con moderado optimismo la noticia del alejamiento del FPV del siempre díscolo diputado ledesmense Ermindo Marcelo Llanos. Ese alejamiento, si bien no fue considerado significativo causó indisimulada pesadumbre en algunos dirigentes para quienes Llanos siempre había sido un referente del oficialismo local. Algo parecido ocurrió en la otra vereda, con el lanzamiento formal de Rubén Daza como candidato a intendente de Palpalá por el FCJ. La desazón en este caso, rodeó a quienes siempre tuvieron al ex vicegobernador como uno de los primeros kirchneristas de Jujuy, que en rigor lo fue. En su acto hubo correligionarios del Frente que hoy lo contiene, pero también muchos compañeros de pasados esplendores. Por son estos los vaivenes de la política, que se deben tomar como cosas normales producto de simpatías o disidencias que se expresan en cada momento electoral. Otro tema que será fundamental de aquí a Octubre, será el tenor de las campañas políticas, el estilo, y especialmente la forma en que cada sector elija comunicarse con la gente. Se entiende que ya no es tiempo de campañas de afiliación, que ahora es muy difícil o imposible la realización de actos de proselitismo tradicional, por lo que la relación vía medios de comunicación y redes sociales cobrará una importancia vital. Desde el Frente Cambia Jujuy se filtró que habrá una campaña modesta, parecida a la de las PASO, poniendo énfasis en el diálogo personal, las caminatas y el timbreado casa por casa. Precisamente, Sergio Massa vendrá pasado mañana, para acompañar una gigantesca caravana que muestre la fórmula del Frente y lo muestre a él mismo, candidato que salió segundo en las primarias locales. El Frente para la Victoria, acentuará oportunamente la figura del Gobernador, y por ahora, presenta un cambio de slogan de cierre de sus spots, donde tras mostrar las realizaciones, asegura que la gente"no cambia a Jujuy" por nada, en obvia alusión a sus competidores. Quien mejor interprete qué esperan ver y oír los jujeños, seguramente, se llevará los puntos que cada campaña arrima a sus candidatos. Y que este año, serán sin dudas, absolutamente decisivos.