Carlos Garmendia, abogado de la Fundación María de los Ángeles Verón, sostuvo respecto de la detención de Oscar Dilascio, acusado de integrar una asociación ilícita dedicada al lavado de dinero, que "ya no quedaría ningún obstáculo para que el "Clan Alé" llegue a juicio oral".
Luego de que el integrante de la organización criminal fuese detenido en Jujuy por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), Garmendia sostuvo que el acusado "era el único prófugo (desde 2013) de esta organización criminal que se dedicaba al lavado de dinero con origen ilícito", explicó.
"De esta manera no quedaría ningún obstáculo para avanzar hacia el segundo paso del requerimiento de elevación a juicio y que la causa pueda llegar al Tribunal Oral Federal", explicó el letrado.
Dilascio, quien permanece detenido en la cárcel federal de la localidad salteña de Güemes, está vinculado a la causa federal en la que se investiga al "Clan Alé", acusado de la desaparición de Marita Verón (la hija de Susana Trimarco) y de lavado de dinero obtenido ilegalmente.
Las detenciones de los acusados fueron dispuestas por la Justicia Federal a partir de una denuncia realizada por la Unidad de Información Financiera (UIF), que detectó operaciones informales manejada por los Alé por una suma cerca a los 63.000.000 de pesos.
Dilascio estuvo al frente de la gerenciadora NOA S.A., que administró deportivamente a San Martín de Tucumán, uno de los clubes más populares de la región, entre 2002 y 2010.
Ex futbolista, en su paso como gerenciador y con Alé presidente y Rivero vicepresidente, San Martín ascendió a Primera División en la temporada 2007/2008, pero perdió la categoría un año después.
Luego de ser trasladado a Tucumán, Dilascio puede ser recluido en el penal de Villa Urquiza, adelantaron fuentes judiciales.
Vale recordar que Marita Verón de 23 años, desapareció en San Miguel de Tucumán el 3 de abril de 2002. La causa llegó a la etapa del juicio oral a comienzos de 2012, dictándose sentencia absolutoria para todos los acusados. El fallo mereció severas críticas desde los más diversos ámbitos
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Carlos Garmendia, abogado de la Fundación María de los Ángeles Verón, sostuvo respecto de la detención de Oscar Dilascio, acusado de integrar una asociación ilícita dedicada al lavado de dinero, que "ya no quedaría ningún obstáculo para que el "Clan Alé" llegue a juicio oral".
Luego de que el integrante de la organización criminal fuese detenido en Jujuy por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), Garmendia sostuvo que el acusado "era el único prófugo (desde 2013) de esta organización criminal que se dedicaba al lavado de dinero con origen ilícito", explicó.
"De esta manera no quedaría ningún obstáculo para avanzar hacia el segundo paso del requerimiento de elevación a juicio y que la causa pueda llegar al Tribunal Oral Federal", explicó el letrado.
Dilascio, quien permanece detenido en la cárcel federal de la localidad salteña de Güemes, está vinculado a la causa federal en la que se investiga al "Clan Alé", acusado de la desaparición de Marita Verón (la hija de Susana Trimarco) y de lavado de dinero obtenido ilegalmente.
Las detenciones de los acusados fueron dispuestas por la Justicia Federal a partir de una denuncia realizada por la Unidad de Información Financiera (UIF), que detectó operaciones informales manejada por los Alé por una suma cerca a los 63.000.000 de pesos.
Dilascio estuvo al frente de la gerenciadora NOA S.A., que administró deportivamente a San Martín de Tucumán, uno de los clubes más populares de la región, entre 2002 y 2010.
Ex futbolista, en su paso como gerenciador y con Alé presidente y Rivero vicepresidente, San Martín ascendió a Primera División en la temporada 2007/2008, pero perdió la categoría un año después.
Luego de ser trasladado a Tucumán, Dilascio puede ser recluido en el penal de Villa Urquiza, adelantaron fuentes judiciales.
Vale recordar que Marita Verón de 23 años, desapareció en San Miguel de Tucumán el 3 de abril de 2002. La causa llegó a la etapa del juicio oral a comienzos de 2012, dictándose sentencia absolutoria para todos los acusados. El fallo mereció severas críticas desde los más diversos ámbitos