Cuando se habla de dengue, también las medidas de prevención abarcan al chikungunya y zika. Los tres virus forman una triada ya que las enfermedades son transmitidas por la misma especie de mosquito. Sin embargo, este año también se encuentra en circulación una nueva virosis, el "mayaro".
El secretario de Salud de la provincia especificó que algunos casos de la enfermedad fueron detectados en comunidades rurales de otros países, algunos de ellos en América, por lo que se debe tener especial resguardo para evitar su proliferación.
Los síntomas del virus "mayaro" son similares a los dengue y chikungunya, como fiebre de 38 grados o más, dolor en las articulaciones, dolor de ojos, cabeza y mareos, por lo que las medidas preventivas para evitar son la mismas.
Pablo Perovic además aclaró que lo más importante para luchar contra el dengue y las tres enfermedades trasnsmitidas por el mismo mosquito, no es la fumigación, sino el descacharrado.
La afirmación responde a que los venenos colaboran y pueden mitigar un brote en un sector específico, pero la clave en realidad es la destrucción de criaderos antes de la llegada del verano.
El secretario de Salud de la provincia especificó que algunos casos de la enfermedad fueron detectados en comunidades rurales de otros países, algunos de ellos en América, por lo que se debe tener especial resguardo para evitar su proliferación.
Los síntomas del virus "mayaro" son similares a los dengue y chikungunya, como fiebre de 38 grados o más, dolor en las articulaciones, dolor de ojos, cabeza y mareos, por lo que las medidas preventivas para evitar son la mismas.
Pablo Perovic además aclaró que lo más importante para luchar contra el dengue y las tres enfermedades trasnsmitidas por el mismo mosquito, no es la fumigación, sino el descacharrado.
La afirmación responde a que los venenos colaboran y pueden mitigar un brote en un sector específico, pero la clave en realidad es la destrucción de criaderos antes de la llegada del verano.
Aún sin vacunas
A lo largo del año la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó el uso de vacunas contra la enfermedad pero en Argentina no es algo que se aplicará en el corto plazo, consideró el secretario de Salud de la provincia.
"Va a llevar tiempo que la vacuna sea efectivamente usada en la población y con las garantías de seguridad que merece, esto lleve quizás cuestiones de años, por ahora la prevención y la educación son nuestras armas más efectivas contra el dengue", expresó Perovic.
En abril de este año la OMS aconsejó el uso de la primera vacuna contra el dengue en los países donde el virus es endémico y en las zonas donde haya una incidencia mayor al 50%.
En esos momentos, el presidente del Grupo Asesor de Expertos sobre Inmunización (Sage), dependiente del organismo internacional, reconoció la efectividad de la nueva vacuna, llamada Dengvaxia.
El grupo sugirió que los países que tengan una alta transmisión y brotes recurrentes de la enfermedad introduzcan en sus programas de inmunización, aprobada ya en países como México, Brasil, El Salvador y Filipinas.
Al momento de darse a conocer la noticia, desde Nación informaron que nuestro país no usará la vacuna porque su tasa de "protección es muy baja", menor al 64 por ciento de los vacunados, y su efecto inmune tarda un año.
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Cuando se habla de dengue, también las medidas de prevención abarcan al chikungunya y zika. Los tres virus forman una triada ya que las enfermedades son transmitidas por la misma especie de mosquito. Sin embargo, este año también se encuentra en circulación una nueva virosis, el "mayaro".
El secretario de Salud de la provincia especificó que algunos casos de la enfermedad fueron detectados en comunidades rurales de otros países, algunos de ellos en América, por lo que se debe tener especial resguardo para evitar su proliferación.
Los síntomas del virus "mayaro" son similares a los dengue y chikungunya, como fiebre de 38 grados o más, dolor en las articulaciones, dolor de ojos, cabeza y mareos, por lo que las medidas preventivas para evitar son la mismas.
Pablo Perovic además aclaró que lo más importante para luchar contra el dengue y las tres enfermedades trasnsmitidas por el mismo mosquito, no es la fumigación, sino el descacharrado.
La afirmación responde a que los venenos colaboran y pueden mitigar un brote en un sector específico, pero la clave en realidad es la destrucción de criaderos antes de la llegada del verano.
El secretario de Salud de la provincia especificó que algunos casos de la enfermedad fueron detectados en comunidades rurales de otros países, algunos de ellos en América, por lo que se debe tener especial resguardo para evitar su proliferación.
Los síntomas del virus "mayaro" son similares a los dengue y chikungunya, como fiebre de 38 grados o más, dolor en las articulaciones, dolor de ojos, cabeza y mareos, por lo que las medidas preventivas para evitar son la mismas.
Pablo Perovic además aclaró que lo más importante para luchar contra el dengue y las tres enfermedades trasnsmitidas por el mismo mosquito, no es la fumigación, sino el descacharrado.
La afirmación responde a que los venenos colaboran y pueden mitigar un brote en un sector específico, pero la clave en realidad es la destrucción de criaderos antes de la llegada del verano.
Aún sin vacunas
A lo largo del año la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó el uso de vacunas contra la enfermedad pero en Argentina no es algo que se aplicará en el corto plazo, consideró el secretario de Salud de la provincia.
"Va a llevar tiempo que la vacuna sea efectivamente usada en la población y con las garantías de seguridad que merece, esto lleve quizás cuestiones de años, por ahora la prevención y la educación son nuestras armas más efectivas contra el dengue", expresó Perovic.
En abril de este año la OMS aconsejó el uso de la primera vacuna contra el dengue en los países donde el virus es endémico y en las zonas donde haya una incidencia mayor al 50%.
En esos momentos, el presidente del Grupo Asesor de Expertos sobre Inmunización (Sage), dependiente del organismo internacional, reconoció la efectividad de la nueva vacuna, llamada Dengvaxia.
El grupo sugirió que los países que tengan una alta transmisión y brotes recurrentes de la enfermedad introduzcan en sus programas de inmunización, aprobada ya en países como México, Brasil, El Salvador y Filipinas.
Al momento de darse a conocer la noticia, desde Nación informaron que nuestro país no usará la vacuna porque su tasa de "protección es muy baja", menor al 64 por ciento de los vacunados, y su efecto inmune tarda un año.