Se trata esencialmente de cartas almacenadas por el Episcopado argentino, la Secretaría de Estado vaticana y la Nunciatura Apostólica en Buenos Aires.
Así lo informaron la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y el propio Vaticano en una declaración conjunta, al presentar los avances de un trabajo motorizado por el exarzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio, ahora papa Francisco.
"La verdad ilumina", subrayó el vicepresidente primero de la CEA y cardenal primado de la Argentina, Mario Aurelio Poli en una conferencia de prensa.
Mientras que el presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, sostuvo que los documentos de archivos vinculados a la última dictadura militar en el país echarán "más luces que sombras" sobre el rol de la Iglesia en ese período. Arancedo puso de relieve las gestiones que llevaba adelante el clero para averiguar el paradero de personas detenidas desaparecidas por la dictadura militar y dijo que "no se puede hablar de complicidad".
"La Iglesia quizá no hizo todo lo que pudo hacer, pedimos disculpas", dijo Arancedo. Los archivos de la Iglesia Argentina consisten principalmente en más de 3.000 cartas de familiares que pedían por sus padres o hijos detenidos y/o desaparecidos, de igual modo que las contestaciones que daban las autoridades eclesiásticas en ese momento y las gestiones que hacía para intentar averiguar el paradero de esas personas.
inicia sesión o regístrate.
Se trata esencialmente de cartas almacenadas por el Episcopado argentino, la Secretaría de Estado vaticana y la Nunciatura Apostólica en Buenos Aires.
Así lo informaron la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y el propio Vaticano en una declaración conjunta, al presentar los avances de un trabajo motorizado por el exarzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio, ahora papa Francisco.
"La verdad ilumina", subrayó el vicepresidente primero de la CEA y cardenal primado de la Argentina, Mario Aurelio Poli en una conferencia de prensa.
Mientras que el presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, sostuvo que los documentos de archivos vinculados a la última dictadura militar en el país echarán "más luces que sombras" sobre el rol de la Iglesia en ese período. Arancedo puso de relieve las gestiones que llevaba adelante el clero para averiguar el paradero de personas detenidas desaparecidas por la dictadura militar y dijo que "no se puede hablar de complicidad".
"La Iglesia quizá no hizo todo lo que pudo hacer, pedimos disculpas", dijo Arancedo. Los archivos de la Iglesia Argentina consisten principalmente en más de 3.000 cartas de familiares que pedían por sus padres o hijos detenidos y/o desaparecidos, de igual modo que las contestaciones que daban las autoridades eclesiásticas en ese momento y las gestiones que hacía para intentar averiguar el paradero de esas personas.