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Atentado explosivo dejó 8 muertosy heridos

Sabado, 05 de noviembre de 2016 01:30
<div>DIYARBAKIR / UNA FAMILIA CORRE DESESPERADA POR LAS CALLES LUEGO DE LAS EXPLOSIONES.&nbsp;</div><div>
Un atentado explosivo contra un cuartel policial en la ciudad turca de Diyarbakir dejó ayer ocho muertos, dos policías y cinco civiles además del atacante, y más de 100 heridos, en un ataque perpetrado apenas horas después del arresto de los máximos líderes y once diputados del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), la formación de la izquierda prokurda.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, informó que en la explosión perdió la vida un supuesto miembro del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), grupo considerado terrorista para Ankara y sus aliados occidentales, que estaría tras el atentado.
El ataque se produjo frente al cuartel de las fuerzas especiales antidisturbios de la Policía cuando un colectivo cargado de explosivos explotó tras chocar con un taxi.
Tras la explosión, se escucharon disparos y la Policía inició una operación de captura de los presuntos autores con apoyo de helicópteros militares Sikorsky.
"Los heridos fueron trasladados a los hospitales y están siendo tratados", informó el Gobierno provincial en un comunicado en el que pidió a la población "actuar con sentido común" y subrayó la necesidad de mostrar "unidad".
El ataque se produce en medio de una creciente tensión entre las autoridades turcas y la minoría kurda en el país, y apenas siete horas después del arresto de Figen Yuksekdag y Selahattin Demirtas, copresidentes del HDP y de once legisladores investigados por presuntos crímenes relacionados con "propaganda terrorista".
El Gobierno intensificó su campaña militar en el sureste para erradicar a los combatientes del ilegalizado PKK, y viene lanzando ataques casi diarios desde la ruptura de un frágil alto el fuego en 2015.
A partir de ese momento se han reanudado los enfrentamientos, combates y ataques, en una región ya marcada por la violencia de la guerra de Siria y las acciones del grupo islamista radical Estado Islámico (EI) en este país y en Irak.
El partido prokurdo reclamó en varias ocasiones al Gobierno y al PKK que alcancen un acuerdo para reabrir el proceso de diálogo.
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Un atentado explosivo contra un cuartel policial en la ciudad turca de Diyarbakir dejó ayer ocho muertos, dos policías y cinco civiles además del atacante, y más de 100 heridos, en un ataque perpetrado apenas horas después del arresto de los máximos líderes y once diputados del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), la formación de la izquierda prokurda.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, informó que en la explosión perdió la vida un supuesto miembro del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), grupo considerado terrorista para Ankara y sus aliados occidentales, que estaría tras el atentado.
El ataque se produjo frente al cuartel de las fuerzas especiales antidisturbios de la Policía cuando un colectivo cargado de explosivos explotó tras chocar con un taxi.
Tras la explosión, se escucharon disparos y la Policía inició una operación de captura de los presuntos autores con apoyo de helicópteros militares Sikorsky.
"Los heridos fueron trasladados a los hospitales y están siendo tratados", informó el Gobierno provincial en un comunicado en el que pidió a la población "actuar con sentido común" y subrayó la necesidad de mostrar "unidad".
El ataque se produce en medio de una creciente tensión entre las autoridades turcas y la minoría kurda en el país, y apenas siete horas después del arresto de Figen Yuksekdag y Selahattin Demirtas, copresidentes del HDP y de once legisladores investigados por presuntos crímenes relacionados con "propaganda terrorista".
El Gobierno intensificó su campaña militar en el sureste para erradicar a los combatientes del ilegalizado PKK, y viene lanzando ataques casi diarios desde la ruptura de un frágil alto el fuego en 2015.
A partir de ese momento se han reanudado los enfrentamientos, combates y ataques, en una región ya marcada por la violencia de la guerra de Siria y las acciones del grupo islamista radical Estado Islámico (EI) en este país y en Irak.
El partido prokurdo reclamó en varias ocasiones al Gobierno y al PKK que alcancen un acuerdo para reabrir el proceso de diálogo.

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