¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

15 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Advertencia de China a Trump por Taiwán

Martes, 13 de diciembre de 2016 01:30
<div>ADVERTENCIA / DONALD TRUMP Y LA PRESIDENTE TSAI ING-WEN.</div><div>
Las tensiones entre Beijing y Washington repuntaron ayer después de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, cuestionara el principio de "una sola China", sin el cual, advirtió el Gobierno chino, se acabará la estabilidad de las relaciones bilaterales.
Si el principio por el que Beijing insiste en que se le reconozca como único Gobierno de China y considera a Taiwán una provincia rebelde "se ve comprometido o interrumpido, el crecimiento estable de las relaciones entre China y Estados Unidos no es posible", dijo Geng Shuang, portavoz de la Cancillería china.
El Gobierno chino, remarcó, "está seriamente preocupado" por las declaraciones de Trump, quien en una entrevista emitida por la cadena de televisión Fox News aseguró que no permitirá que el gigante asiático le "dicte" lo que debe hacer.
"No sé por qué tenemos que estar ligados a la política de ''una sola China'' a no ser que lleguemos a un acuerdo con China que tenga que ver con otras cosas, incluido el comercio", afirmó Trump.
La razón para China está clara: "Quiero enfatizar que la cuestión de Taiwán es realmente un interés central para China", respondió el portavoz en una rueda de prensa en la que consideró que la política de "una sola China" representa los "cimientos" de las relaciones con Estados Unidos.
Y es que este axioma ha supuesto la base de las relaciones bilaterales entre China y Estados Unidos desde que ambos países suscribieron, tras negociaciones entre los gabinetes de Richard Nixon y Mao Tsé Tung, el comunicado de Shanghai en 1972, siete años antes de que restablecieran sus lazos diplomáticos.
Trump parece haber decidido ignorar estas más de cuatro décadas de statu quo en las últimas dos semanas, tras provocar el primer episodio de tensiones con China al aceptar una llamada telefónica de la presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen, este mes, el primer contacto de alto nivel entre ambas partes en casi 40 años.
Justo cuando las aguas comenzaban a calmarse, los nuevos comentarios de Trump han hecho que China vuelva a dar un toque de atención al futuro inquilino de la Casa Blanca.
"Urgimos a la nueva administración estadounidense y a sus líderes a que admitan la sensibilidad de la cuestión de Taiwán y se adhieran a la política de ''una sola China''", dijo Geng. También les exhortó a que "gestionen este asunto de manera adecuada y prudente para que no interrumpa o dañe los intereses generales de las relaciones bilaterales".
Esto "no afecta sólo a los intereses de las relaciones entre China y EEUU, sino también a la paz.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
Las tensiones entre Beijing y Washington repuntaron ayer después de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, cuestionara el principio de "una sola China", sin el cual, advirtió el Gobierno chino, se acabará la estabilidad de las relaciones bilaterales.
Si el principio por el que Beijing insiste en que se le reconozca como único Gobierno de China y considera a Taiwán una provincia rebelde "se ve comprometido o interrumpido, el crecimiento estable de las relaciones entre China y Estados Unidos no es posible", dijo Geng Shuang, portavoz de la Cancillería china.
El Gobierno chino, remarcó, "está seriamente preocupado" por las declaraciones de Trump, quien en una entrevista emitida por la cadena de televisión Fox News aseguró que no permitirá que el gigante asiático le "dicte" lo que debe hacer.
"No sé por qué tenemos que estar ligados a la política de ''una sola China'' a no ser que lleguemos a un acuerdo con China que tenga que ver con otras cosas, incluido el comercio", afirmó Trump.
La razón para China está clara: "Quiero enfatizar que la cuestión de Taiwán es realmente un interés central para China", respondió el portavoz en una rueda de prensa en la que consideró que la política de "una sola China" representa los "cimientos" de las relaciones con Estados Unidos.
Y es que este axioma ha supuesto la base de las relaciones bilaterales entre China y Estados Unidos desde que ambos países suscribieron, tras negociaciones entre los gabinetes de Richard Nixon y Mao Tsé Tung, el comunicado de Shanghai en 1972, siete años antes de que restablecieran sus lazos diplomáticos.
Trump parece haber decidido ignorar estas más de cuatro décadas de statu quo en las últimas dos semanas, tras provocar el primer episodio de tensiones con China al aceptar una llamada telefónica de la presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen, este mes, el primer contacto de alto nivel entre ambas partes en casi 40 años.
Justo cuando las aguas comenzaban a calmarse, los nuevos comentarios de Trump han hecho que China vuelva a dar un toque de atención al futuro inquilino de la Casa Blanca.
"Urgimos a la nueva administración estadounidense y a sus líderes a que admitan la sensibilidad de la cuestión de Taiwán y se adhieran a la política de ''una sola China''", dijo Geng. También les exhortó a que "gestionen este asunto de manera adecuada y prudente para que no interrumpa o dañe los intereses generales de las relaciones bilaterales".
Esto "no afecta sólo a los intereses de las relaciones entre China y EEUU, sino también a la paz.

Temas de la nota

Temas de la nota