La exposición se titula "Cuna verde: no querer huir de lo que se vive" y estará disponible en la gran ciudad hasta el 22 de enero próximo.
La inauguración de esta obra se realizó con música, bailes y canto de nuestra tierra, donde Cecilia Espinoza fue la gran protagonista.
De a poco, el arte de las Yungas se va posicionando a nivel nacional gracias a esta creativa artista plástica.
La directora del departamento de Artes del Centro Borges, Blanca María Monzón, reseñó que: "la producción de Cecilia Espinoza está presidida por una dialéctica que traduce desde su inicio, el deseo de poder expresar todas las creencias relacionadas con su identidad, del mismo modo que la ambivalencia que la caracteriza. Es decir, tanto lo positivo como lo negativo, lo implícito y lo explícito de parte de la cultura andina jujeña, con todo lo mítico que la rodea. Porque es en el espacio de sus raíces -material con que trabaja- donde se hace presente, un considerable desfasaje entre la realidad de uno y la percepción del otro. La que nos transmite a través de la forma, el lenguaje del color viviente, el expresionismo gestual de su imagen, y el material elegido para representar su mundo".
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La exposición se titula "Cuna verde: no querer huir de lo que se vive" y estará disponible en la gran ciudad hasta el 22 de enero próximo.
La inauguración de esta obra se realizó con música, bailes y canto de nuestra tierra, donde Cecilia Espinoza fue la gran protagonista.
De a poco, el arte de las Yungas se va posicionando a nivel nacional gracias a esta creativa artista plástica.
La directora del departamento de Artes del Centro Borges, Blanca María Monzón, reseñó que: "la producción de Cecilia Espinoza está presidida por una dialéctica que traduce desde su inicio, el deseo de poder expresar todas las creencias relacionadas con su identidad, del mismo modo que la ambivalencia que la caracteriza. Es decir, tanto lo positivo como lo negativo, lo implícito y lo explícito de parte de la cultura andina jujeña, con todo lo mítico que la rodea. Porque es en el espacio de sus raíces -material con que trabaja- donde se hace presente, un considerable desfasaje entre la realidad de uno y la percepción del otro. La que nos transmite a través de la forma, el lenguaje del color viviente, el expresionismo gestual de su imagen, y el material elegido para representar su mundo".