Nos acercamos al acceso norte de Maimará para visitar uno de los más tradicionales, "Niño Salvador del Mundo", que en el frente de la capilla confiesa ser de 1958. Mirta Azucena Daza, una de las nietas de los fundadores del Pesebre, comienza a contarnos que "esta tradición viene de mis abuelos, lo tuvo mi padre, mi tío, y ahora que ellos no están lo seguimos nosotros. Celestina y Pablo Daza trajeron el Niñito de Bolivia, y comenzaron a adorarlo desde que mi papá tenía nueve años".
Sigue diciendo que "somos varios hermanos que colaboramos, comenzando el 15 de diciembre con la novena para terminarla una noche antes de Navidad. Tenemos más de cien chicos que adoran con las trenzas y además van bailando por la calle y los miércoles y los sábados que tenemos misa en la capilla".
Las salidas las hacen a invitaciones a casas de familia, "y también vamos a Humahuaca donde tenemos invitación de la familia Campos y por años que también vamos al hospital de Humahuaca. El año pasado también estuvimos en Purmamarca".
Este año nos dice que "estamos muy tristes porque nuestra mamá, Mauricia Sajama, se nos fue en agosto. Mi papá era Lorenzo Daza".
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Nos acercamos al acceso norte de Maimará para visitar uno de los más tradicionales, "Niño Salvador del Mundo", que en el frente de la capilla confiesa ser de 1958. Mirta Azucena Daza, una de las nietas de los fundadores del Pesebre, comienza a contarnos que "esta tradición viene de mis abuelos, lo tuvo mi padre, mi tío, y ahora que ellos no están lo seguimos nosotros. Celestina y Pablo Daza trajeron el Niñito de Bolivia, y comenzaron a adorarlo desde que mi papá tenía nueve años".
Sigue diciendo que "somos varios hermanos que colaboramos, comenzando el 15 de diciembre con la novena para terminarla una noche antes de Navidad. Tenemos más de cien chicos que adoran con las trenzas y además van bailando por la calle y los miércoles y los sábados que tenemos misa en la capilla".
Las salidas las hacen a invitaciones a casas de familia, "y también vamos a Humahuaca donde tenemos invitación de la familia Campos y por años que también vamos al hospital de Humahuaca. El año pasado también estuvimos en Purmamarca".
Este año nos dice que "estamos muy tristes porque nuestra mamá, Mauricia Sajama, se nos fue en agosto. Mi papá era Lorenzo Daza".