El número de muertes por el terremoto de 6,4 grados en la escala de Richter que sacudió Taiwán el sábado último, subió ayer a 61 y hay pocas esperanzas de rescatar con vida a las 75 personas que permanecen desaparecidas, informó el Servicio Nacional de Emergencias local.
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El número de muertes por el terremoto de 6,4 grados en la escala de Richter que sacudió Taiwán el sábado último, subió ayer a 61 y hay pocas esperanzas de rescatar con vida a las 75 personas que permanecen desaparecidas, informó el Servicio Nacional de Emergencias local.
Entre los fallecidos se encuentran una bebé de diez días, dos de seis meses y 17 niños más; mientras que entre los desaparecidos, presuntamente sepultados entre los escombros, se cuentan 60 adultos y 15 niños, según detalló el organismo.
Miembros de los equipos de rescate en el edificio derrumbado Weiguan Jinlong (Dragón Dorado) de Tainan, la ciudad más afectada por el terremoto, reconocieron que las esperanzas de encontrar personas vivas entre los escombros son muy escasas.
Desde el sábado, han sido rescatados 327 sobrevivientes.